CICATRICES [Solo El Tiempo Lo Podrá Curar]

...『 Lía 』...

^^^(Un mes después...)^^^

Las heridas físicas sanan, pero las emocionales o las del alma ¿Cuándo sanarán?, hace un mes qué sucedió mi incidente con Alexander aunque su estancia en la comisaría no fue tardía, ya que su madre pagó la fianza de libertad condicional, pero eso no quita el hecho de que está bajo la amenaza de que si se acerca a mí lo meterán de nuevo a la cárcel.

En dos días es la firma oficial del divorcio, pero no se termina el juicio porque no llegamos aún acuerdo sobre la custodia de la niña y esto complica las cosas, Dayana al ser mi abogada está haciendo demasiado para llegar a buenos términos en esas partes que Alexander se niega a firmar. Adalia ve a su padre los fines de semana porque eso fue lo que el juez dictamino y si él desacata la orden se le negara volver a verla hasta qué le den una respuesta.

Christopher se ha mantenido a mi lado apoyándome en todo, cuando sale de su trabajo siempre viene a verme trayendo con flores o pequeños detalles que valen demasiado y me sacan sonrisas llenas de dulzura.

Mis padres se han encargado de entregar a mi hija con Alex o al colegio en este periodo de recuperación, Chris habló conmigo diciéndome que sus padres quieren conocerme y que me ofrecen trabajo en su empresa para formar parte del área de corte y confección. Le agradecí por tal invitación, pero ahora quería mejorarme del todo para volver a mi vida normal.

— ¿Hoy vendrá Christopher? —Pregunta Adalia mientras le peino para ir al preescolar.

Cepillo su cabello en un moño alto dejándolo perfectamente aunque sé que no durará ni una hora bien.

— Tal vez venga, aunque lo dudo porque me dijo que tiene mucho trabajo

Ella hace un leve puchero, pero tal gesto se le va en cuestión de segundos cuando mi papá llega para llevársela

— Te amo mami, ya quiero que pronto me lleves mi escuela —Besa mi mejilla antes de irse

— También te amo mi hadita y verás qué pronto estaré devuelta llevándote al preescolar o cualquier lado —Prometo

Se marcha junto con mi padre y mi madre entra a mi habitación con una sonrisa cariñosa.

— Me siento feliz por ti hija mía, que dios no te ha dejado sola en ningún momento de tanto dolor —Me abraza— Te mereces cosas buenas en tu vida no pierdas la fe y la esperanza

— Te quiero mamá porque no me has dejado sola en ningún momento, que has prevalecido a mi lado.

Me guía fuera de mi habitación a la planta baja para que ambos tomemos él te como se ha vuelto una costumbre entre las dos últimamente.

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...【 Christopher 】...

Quiero enfocar mis pensamientos a la reunión que tengo ahora, pero cierta pelinegra está plasmada en mi mente evocando los pequeños momentos dónde somos solo ella y yo. Adentro mi mano derecha al bolsillo de mi pantalón tocando el fino encaje de las bragas que le robe esa noche en mi habitación una leve sonrisa curva mis labios al despertar recuerdos que no debería

— ¿Qué opina sobre las acciones de este mes?, Joven Christopher

Salgo de mis pensamientos por la pregunta de mi accionista

— Las acciones de la empresa han subido, Simón no hay ningún fallo o falencias que tratar; se han aumentando los números dando a reconocer más la marca "Beckett Group Company"

Los presentes asienten y comparten opiniones sobre mi respuesta; hasta ahora la empresa está a mi cargo y nada se ha ido al carajo. La junta sigue hasta qué por fin se termina, soy el primero en salir yendo directo a mi oficina.

— Tengo que esperar casi tres infinitas horas para verte, soy tu socio mayor — Entra quejándose mi mejor amigo Mike a mi oficina dejándose caer en el sofá.

— Creí que sabías modales —Increpo mientras tecleo en la MacBook.

— Modales nada —Protesta— Últimamente no estás en aquí o en tu flamante Penthouse, te llamo y me ignoras

Rodó los ojos por sus reclamos como si fuera mi novia

— Deja de lloriquear Thompson, Sabes perfectamente que tengo vida después de aquí y un asunto que es de mi total atención

Abre la boca indignado y me mira acusatoriamente

— Tu Christopher James diciéndome algo así das a entender que ya estás en tus andadas de "Vuelvo locas a todas", Todo Londres quiere contigo y créeme tú ya conoces a media población londinense

Suelto a reír dejando mi espalda contra el respaldar de la silla, no puedo negar qué he tenido Líos de solo una noche cada que salgo por un par de tragos con él, pero desde que vi de nuevo a Mi hermosa Ninfa todo cambió.

— Pueda que si, pero ahora tengo mis ojos puestos en alguien que vale la pena para que sea mi mujer —Admito

— ¿Quién es?, ¿La conozco?

Mike es el tipo de amigo chismoso que se entera antes que todos lo que sucede aunque también es leal a mí y eso me agrada.

— Recuerdas la vez que te hable en Escocia sobre aquella chica

— Lo recuerdo, me tenías harto escuchándote hablar sobre ella y como era, Tengo grabado su nombre en algún lado de mi cabeza, es Lía McKenna ¿Que pasa con ella?

Asentí al saber que lo hostigaba cada que ella venía a mis pensamientos.

— Que no pasa con ella, Nos volvimos a encontrar y hemos estado más cerca de lo que yo pueda creer, pero también hay una situación que me hizo quedarme a su lado todo el tiempo

Su mirada se vuelve llena de intriga total y se acomoda mejor en el sofá.

— La telenovela va a estar muy buena así que empieza que yo escucho — Pide.

Olvido que mi mejor amigo viene de México...

Le narro el principio de todo, un poco de lo que sucedió entre los dos en mi casa, su hija y los acontecimientos que vivió con su ex pareja.

—Así que tiene una hija, porque lo que escucho la niña te quiere demasiado pese al poco tiempo que se conocen, quien lo iba a decir Christopher será padrastro — Suelta a reír y yo me irritó al no encontrarle gracia.

— ¿No sé cuál es el chiste? —Espeto molesto y Mike se limpia las lágrimas

— Hermano es que jamás imagine verte haciendo un rol de padre o algo así, eres ese tipo de hombre malo, pero en su interior hay un mundo de arcoíris y rosas

Me jode que piensen eso de mí

— Cállate, no vuelvo a decirte nada — Bramo tomando mi chaqueta para irme

—¿Dónde vas? — Cuestiona confundido

—Voy a verla — Es lo único que digo y salgo de mi oficina a dirección del elevador.

Entro y presiono el botón de la planta baja, el cubículo se llena de distintos trabajadores, pero me mantengo serio frente a las mujeres que me miran como si fuese de otro planeta

»Se les olvida que soy su jefe y puedo mandarlas a volar«

Una vez se detiene el elevador salgo y mi auto espera a por mí, mi precioso Mustang GT lo abordo manejando por las acaudalas calles de Londres, hago una parada antes de llegar a ella.

— Gracias por su compra y vuelva pronto a la floristería Blake — Agradece y despide la dependienta cuando tomó el ramo de rosas rojas

Cada que voy a verla le doy diferentes distintivos para alegrarle el día o simplemente porque me nace serlo con ella, es la primera mujer que me tiene como un adolescente enamorado y que hace miles de locuras con tal de estar a su lado. Subo nuevamente a mi auto y manejo hasta belgravia, aparco cuando estoy frente a su casa, tomo el ramo y salgo colocando el seguro a distancia, me tomo un pequeño respiro antes de tocar la puerta

Me siento ansioso por verla y tenerla en mis brazos cada vez que la tengo demasiado cerca, lo que siento me saldrá el pecho algún momento que sacaré la faceta que me he negado a demostrar

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