Sinfonía De Dos Almas

En el camerino de la orquesta estaba el joven omega pianista repasando su vestuario antes de entrar para su presentación en esta competencia individual y pudo escuchar el número que le pertenecía por los altavoces del lugar.

Detrás del escenario Cian podía ver a los jueces en la primera fila con sus formularios de calificación y el público constituido por familiares, así como amantes de la música clásica y periodistas del ámbito musical desde diferentes ángulos del teatro.

Entonces respiro una y otra vez hasta que calmó sus nervios para caminar hasta el piano, sentarse en el banco del instrumento y tocar las teclas del piano para comenzar a sacar las hermosas notas de la partitura que había escogido y poco a poco se relajó para disfrutar del sonido de tan exquisito instrumento, no se podía esperar menos de un concurso a nivel internacional.

Cuando terminó recibió los aplausos del público mientras los jueces calificaban su presentación y cuando se disponía a volver al camerino para cambiarse y comprar cosas para la familia como regalo fue abordado por un hombre.

El joven se detuvo y examinó con la mirada a la persona frente a él es un hombre de apariencia imponente definitivamente era un alfa, claramente alguien de alto rango debido a que llevaba un traje elegante y una sonrisa calculada, esa persona le dijo a Cian.

- Felicidades, Joven O’Connor. Dijo el Alfa mientras extendía la mano para estrechar la mano del pianista y continúo hablando.

-Soy Horald Pierce, director de la Orquesta Filarmónica de Londres, quería expresar que su interpretación fue impresionante, pero lo vi desde esta mañana, luego de ver su competencia individual ha confirmado su excelencia para mí ¿Ha considerado unirse a una orquesta profesional?

En el momento que escuchó eso Cian se sorprendió por la oferta en su aturdimiento estrechó la mano del alfa y le dijo.

-Es un honor, señor Pierce, pero todavía estoy en la escuela por lo que es muy precipitado y aún no he pensado en lo que haré en el futuro.

Pierce sonrió de manera paternal y todo su cuerpo exsudaba la amabilidad de un maestro amable y por eso le dio un consejo al joven omega.

-La música es un mundo competitivo, pero con su talento, puede llegar muy lejos, por eso no tiene que decidir hoy, sin embargo, tenga en cuenta que nuestras puertas están abiertas para usted.

Al terminar de hablar el hombre sacó del bolsillo interno de su traje una pequeña pieza de papel que era una tarjeta de presentación con su información de contacto personal y se la pasó a Cian para decirle.

-Llámame cuando tomes una decisión.

Entonces el joven omega asintió, sintiéndose abrumado por la oferta, pues no era algo que pudiera decidir a la ligera, pero la posibilidad de ser parte de una de las orquestas más prestigiosas del mundo era tentadora.

Durante un tiempo se quedó pensando en toda la situación llegó a la conclusión de que era mejor salir a comprar las cosas para regalar a su regreso para mamá Clara compró galletas, una sencillas, pero hermosas mancuernillas o gemelos como algunos también los llaman para el uniforme de mayordomo de papá, a Steven unas estampillas para su colección, unas cremas para el cuidado de la piel para Emily y para sus padres biológicos, así como para su hermano solo compró tres sencillos llaveros característicos del lugar y los pondría en la sala con una nota para que escogieran el que quisieran o los votaran, no le importaba.

El Teatro fue hermosamente decorado, cada persona en él, lucía sus mejores galas y en algún momento se escuchó el inicio del discurso de la parte organizadora elogiando el desempeño de los músicos y agradeciendo a los patrocinadores del evento.

Sobre todo, fue una sorpresa la llamada del nombre de Cian como el ganador de la sección de piano se alegró tanto que su mente se puso blanca, después le inundó el nerviosismo, pues temía caerse en el escenario o decir alguna tontería, pero gracias a los cielos todo salió bien.

Cuando fue el turno de la competencia de orquestas su escuela quedo de cuarto lugar solo por unas décimas en la puntuación cosa que frustró mucho a los integrantes porque se esforzaron tanto y les faltó tan poco para al menos obtener el tercer lugar, sin embargo, hubo otros músicos que ganaron su respectiva competencia e hizo tanto revuelo que apareció en las noticias de su país.

Mientras Cian deslumbraba al público en la competencia de piano, en la mansión de los O´Connor, Aoife estaba atrapada en una torre de documentos y números en su oficina, revisando los gastos de sus hijos, pero al compaginar los extractos bancarios con los horarios de clases y actividades de Cian, algo la incomodó y siguió revisando con más detalle.

A medida que pasaba las páginas, su ceño se fruncía con creciente preocupación, Karaoke, centros de juegos y comidas rápidas, todos los cargos acumulándose desde la tarde hasta la noche, cuando Cian supuestamente debería estar en su residencia o practicando, simplemente algo no encajaba.

-¿Qué está haciendo este niño? Murmuró para sí misma.

El sentimiento de frustración crecía en Aoife, pues nunca había sido fácil lidiar con Cian, por eso decidida a aclarar la situación, ella tomó su teléfono y llamó a Ronan.

-Ronan, ven a mi oficina, necesito hablar contigo. Dijo la alfa con voz firme.

Pocos minutos después, escuchó la puerta abrirse y la mujer levantó la vista para ver a su marido entrar con su expresión despreocupada habitual, pero estaba segura de que no le gustaría nada de lo que iba a decir.

-¿Qué pasa?. Preguntó Ronan, mientras se acerca al escritorio de su esposa.

Aoife deslizó los extractos bancarios hacía él.

-Mira esto, las transacciones de Cian no tienen sentido, ¿por qué estaría gastando dinero en karaoke y comida rápida cuando se supone que debería estar en la residencia de la escuela?

Ronan miró los papeles, su expresión cambiando de indiferencia a la preocupación, pues acababa de recordar que le había dado ambas tarjetas a Declan, pero decidió seguirle el juego a Aoife, mientras pensaba en una opción para ayudar a Declan.

-Eso es extraño, pero ¿seguro que no se ha escapado un poco?

-Ronan, no estamos hablando de un pequeño desliz. Estoy hablando de un patrón. No está donde debería estar. Insistió Aoife con voz frustrada.

-¿Dónde esta Cian realmente? Pregunta Aoife.

Quizás solo está socializando, no todos los omegas son tan… reservados. Dijo Ronan con un encogimiento de hombros para restarle importancia.

Aoife lo miró, sintiendo que su paciencia se agotaba y le respondió.

-No se trata de ser reservado, o no, se trata de administrar bien las cosas, por eso es una tarjeta para Cian y otra para Declan.

-Declan es responsable, Aoife, estoy seguro de que esta haciendo bien sus gastos. Dijo Ronan intentando calmarla, pero su tono no era convincente.

Aoife tomó los registros de la tarjeta para Declan y notó transacciones similares en los mismos locales, ha casi iguales horas, es así como su mente se aclaró.

-Le diste ambas tarjetas a Declan, Ronan. Señalo Aoife no como pregunta, sino con total convicción.

Ronan se quedó en silencio un momento, buscando la manera de justificar la situación, pero no tenía remedio, entre más duraba el silencio de Ronan su esposa sentía que se le subía la sangre a la cabeza, por lo que tomó su teléfono y llamó a sus investigadores.

-Hola, necesito que revises los movimientos de Decla y Cian durante este mes.

-Tu te quedas, aquí Ronan hasta que me envíen el informe. Comentó Aoife.

Esperando un informe rápido, pues era inaceptable que ella no pudiese saber que estaban haciendo sus hijos y otra vez confirmó que Ronan no podía hacerse cargo de los niños.

Poco tiempo después, el informe llegó, Aoife lo abrió de su correo entre más leía, más escuchaba su corazón en sus oídos por la irá que se acumulaba y Ronan podía ver la tensión en su rostro aumentar a cada segundo.

-¡No puede ser!, Esto no pienso tolerar Sam el amigo de Declan esta usando la tarjeta de Cian, te dije claramente que era una cuenta para cada uno, en que pensabas Ronan.

Antes de que su esposo pudiese decir algo más Aoife continúo hablando.

-voy a hablar con Declan, pero ten cuidado de que esto se filtre a la prensa Ronan, no quiero encabezados de periódico diciendo “heredero O’Connor, se salta las clases y se va de fiesta”, no quiero que los asuntos de la familia se filtren y si esto continua pensare en el divorcio escuchaste.

Mientras Ronan se alejaba conmocionado por esta discusión, Aoife sintió la presión aumentando en su pecho, pues había estado lidiando con la incertidumbre en su familia durante la adolescencia de Declan y ahora con Cian brillando en el escenario como lo hacía se preguntaba si había tomado la decisión correcta, puesto que todo lo que había construido se sentía al borde del colapso.