Una sola noche, cambio mi vida para siempre.
NovelToon tiene autorización de Nessa Pimentel para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
14
Hola, Lya. Sal de ahí ahora mismo. – dijo mi hermano seriamente mientras me miraba a los ojos fijamente.
Vi en sus ojos una ira infinita cuando salí gateando de la cama, desnudo como estaba, y me puse de pie, tapandome con la sábana .
En aquel momento solo quería que me tragase la tierra y desaparecer. Busqué con mi mirada los ojos de Jared, que miraba al suelo con la cara casi desencajada. Volví a mirar a mi hermano, ya de pie, con los brazos cruzados sobre su pecho y mirándome con enojo todavía.
- ¿Qué tal está Diego? – me preguntó fríamente mientras entrecerraba sus ojos.
¿Diego? Es cierto, dije que iba a su casa... No sabía qué responder. Cualquier excusa sería increíble estando desnudo en casa de su mejor amigo y la verdad era muy bochornosa.
Estaba muy jodida.
- Chris..., yo... - comencé a decir, nervioso.
- Tú nada. – me dijo mi hermano bruscamente. – Vístete ahora mismo.
Bajé la cabeza avergonzado, y me agaché de nuevo para buscar la ropa que había debajo de la cama. Saqué aquel montón de ropa y comencé a vestirme.
La habitación estaba en silencio y yo ya había terminado de vestirme, cuando Jared habló nerviosamente:
- Chris..., escucha... - fue a poner su mano sobre el hombro de su amigo.
Mi hermano le dio un manotazo y después un empujón con ambas manos, desplazando a Jared varios metros.
- ¡No me toques! ¿Te parece bien abusar de mi hermana? – le gritó enfadado. – Chris estaba fuera de sí.
- ¡Chris! Él no... - comencé a decirle.
- ¡Tú te callas! – me gritó, señalándome con un dedo.
Me quedé muda, incapaz de decir nada ante la figura de mi hermano mayor, que temblaba de ira.
- Lya, vete a tu casa. Déjame hablar con tu hermano... - me dijo Jared suavemente.
¿Dejarlos solos? Miré a Chris, al que se le notaban todas las venas del cuello y de la parte de la sien. Tenía los puños apretados y miraba fijamente a Jared, que estaba arrinconado frente a la pared, con su toalla amarrada a la cintura y con el torso desnudo. Siendo tan musculoso, se veía muy pequeño ante la figura de mi hermano, que parecía estar rodeado por un aura de ira. Pude imaginarme lo que pasaría si me iba de aquel cuarto.
- ¡No! ¡No pienso moverme de aquí! – grité yo, mirando a mi hermano.
- Lya, vete. Ya. – dijo mi hermano, lleno de cólera, sin apartar los ojos de Jared.
Me sentía minúsculo en aquel momento y lleno de impotencia. Tenía la sensación de que Chris quería golpear a Jared con todas sus fuerzas. Tenía que hacer algo para que aquello no ocurriese. O
asé rápidamente por el lado de mi Chris y me situé delante de Jared, dándole la espalda y mirando a mi hermano.
- ¡Él no tiene culpa de nada! ¡Ha sido todo mi idea! – le dije, desesperada.
- Lyq, deja de decir tonterías. Vete a casa ahora mismo. – dijo mi hermano, fulminándome con la mirada.
Yo negué con la cabeza, murmurando un "no" que no era capaz de salir de mis labios.
- Lyq, haz caso a tu hermano. Déjame solucionarlo con él. – dijo Jared a mi espalda en voz baja.
Agarró mi hombro con fuerza y yo rompí a llorar. Me sentía impotente, sin que mi opinión importase en absoluto en aquella situación.
Jared apretó mi hombro y me dio un leve empujón, invitándome a abandonar el cuarto. Mi hermano apartó la mirada cuando pasé a su lado arrastrando los pies, abatido. Salí del cuarto enjugándome las lágrimas de mis mejillas, que salían de mis ojos descontroladamente.
me gustaría ver el final