UN ENCUENTRO INESPERADO

Después de la pelea, Sofía y Alejandro se dirigieron a un café cercano para calmarse. Mientras tomaban un café, Sofía no podía dejar de mirar a Alejandro con admiración.

"Gracias por defendarme", dijo Sofía. "No sé qué hubiera hecho sin ti".

Alejandro sonrió. "Siempre estaré aquí para ti", dijo. "No permitiré que nadie te haga daño".

Sofía se sintió conmovida por las palabras de Alejandro y se acercó a él. "Te amo", dijo.

Alejandro la abrazó. "Te amo también", dijo. "Y voy a hacer todo lo posible para que seas feliz".

En ese momento, Emily y Michael entraron en el café y se acercaron a ellos. "¿Qué pasó?", preguntó Emily.

Sofía les contó todo lo que había sucedido con Marco y cómo Alejandro la había defendido. Emily y Michael se miraron, impresionados.

"¡Ese Alejandro es un héroe!", dijo Emily.

Michael asintió. "Sí, es un tipo increíble", dijo. "Sofía, eres muy afortunada de tenerlo".

Sofía sonrió, sabiendo que tenía razón. Había encontrado a su alma gemela en Alejandro y estaba decidida a hacer que su relación funcionara.

Después de la pelea con Marco, Sofía y Alejandro decidieron tomar medidas para protegerse. Alejandro instaló cámaras de seguridad en el apartamento de Sofía y contrató a un guardaespaldas para que la acompañara siempre.

Sofía se sintió un poco incómoda con tantas precauciones, pero Alejandro le aseguró que era necesario. "No quiero que te pase nada", le dijo.

Un día, mientras Sofía estaba en el trabajo, recibió una llamada de Alejandro. "¿Dónde estás?", le preguntó.

Sofía se sorprendió. "Estoy en el hospital", dijo. "¿Por qué?"

Alejandro se rió. "Voy a sorprenderte", dijo. "Espérame en la entrada del hospital".

Sofía se sintió emocionada. ¿Qué planes tendría Alejandro?

Cuando salió del hospital, vio a Alejandro esperándola en la entrada, con una gran sonrisa en la cara. "¿Qué pasa?", le preguntó.

Alejandro se acercó a ella y le dio un beso. "Vamos a pasar el fin de semana juntos", dijo. "Solo tú y yo".

Sofía se sintió emocionada. "Me encantaría", dijo.

Y juntos, se subieron a un coche y se dirigieron a un destino desconocido.

Mientras conducían, Sofía no podía dejar de preguntarse a dónde la llevaba Alejandro. "¿Dónde vamos?", le preguntó.

Alejandro sonrió. "Es una sorpresa", dijo. "Pero te prometo que te encantará".

Después de un rato, llegaron a una hermosa casa en el campo. "¿Dónde estamos?", preguntó Sofía.

Alejandro se rió. "Estamos en mi casa de campo", dijo. "La compré hace unos meses y quería compartirla contigo".

Sofía se sintió emocionada. La casa era hermosa y el paisaje era impresionante.

Alejandro la llevó a dar un paseo por el jardín y luego la invitó a entrar en la casa. Dentro, Sofía vio que la casa estaba llena de detalles románticos. Había velas encendidas, flores frescas y una deliciosa comida preparada.

"¿Todo esto es para mí?", preguntó Sofía, emocionada.

Alejandro sonrió. "Todo es para ti", dijo. "Quiero que te sientas especial".

Sofía se sintió conmovida por la gesto de Alejandro. "Te amo", dijo.

Alejandro la abrazó. "Te amo también", dijo. "Y quiero pasar el resto de mi vida contigo".

Después de la deliciosa comida, Alejandro y Sofía se sentaron en el salón, disfrutando de una copa de vino. La atmósfera era íntima y romántica, y Sofía no podía dejar de sentir la química entre ellos.

Alejandro se acercó a ella y la tomó de la mano. "Quiero que te sientas cómoda", dijo. "Quiero que te sientas amada".

Sofía se sintió emocionada por sus palabras. "Me siento cómoda contigo", dijo. "Me siento amada".

Alejandro sonrió y la besó suavemente en los labios. Sofía se sintió derretir en sus brazos, y pronto se encontraron en una apasionada noche de amor y lujuria.

Se besaron y se acariciaron, explorando cada rincón de sus cuerpos. La pasión entre ellos era intensa, y Sofía se sintió como si estuviera en el cielo.

Después de una noche de pasión, se quedaron abrazados, disfrutando del calor del otro. "Te amo", dijo Alejandro.

Sofía sonrió. "Te amo también", dijo. "Esa fue la mejor noche de mi vida".

Alejandro sonrió también. "La mía también", dijo. "Quiero pasar el resto de mi vida contigo".

Sofía se sintió feliz y satisfecha. Sabía que había encontrado a su alma gemela en Alejandro, y que su amor duraría para siempre.

Después de la noche de pasión, Sofía y Alejandro se despertaron juntos, sintiendo una conexión más fuerte que nunca. Pero justo cuando pensaban que todo iba bien, recibieron una llamada inesperada.

"¿Quién es?", preguntó Sofía, mirando la pantalla del teléfono.

Alejandro se encogió de hombros. "No lo sé", dijo. "Pero contestaré".

Alejandro respondió la llamada y se sorprendió al escuchar la voz de Marco, el ex novio de Sofía.

"¿Qué quieres, Marco?", preguntó Alejandro, con una voz firme.

Marco se rió. "Quiero hablar con Sofía", dijo. "Tengo algo que decirle".

Sofía se sintió nerviosa. ¿Qué quería Marco ahora?

"¿Qué pasa, Marco?", preguntó Sofía, tomando el teléfono.

Marco se rió de nuevo. "Tengo una sorpresa para ti, Sofía", dijo. "Algo que te hará cambiar de opinión sobre Alejandro".

Sofía se sintió confundida. ¿Qué podía tener Marco que la hiciera dudar de Alejandro?

"¿Qué es?", preguntó Sofía, con curiosidad.

Marco se rió de nuevo. "Tendrás que esperar para verlo", dijo. "Pero te prometo que será impactante".

Y con eso, Marco colgó el teléfono, dejando a Sofía y Alejandro con más preguntas que respuestas.