El Destino De Dos Corazones

Los días que siguieron a su tarde en la colina fueron felices y tranquilos para Da-Hye y Seo-Joon. Se habían vuelto inseparables, y su relación se había convertido en el tema de conversación en la escuela. Aunque al principio habían llamado la atención de sus compañeros, ahora eran vistos como una pareja estable y envidiable.

Sin embargo, con la estabilidad llegó también un nuevo tipo de desafío: el futuro. Las solicitudes universitarias estaban en pleno apogeo, y la presión de asegurarse un lugar en la Universidad Nacional de Seúl, la meta compartida por ambos, comenzaba a pesar sobre ellos.

Una tarde, mientras estaban en la biblioteca, Da-Hye revisaba sus notas para la próxima prueba de simulación. Seo-Joon, a su lado, estaba sumergido en un libro de texto, pero su mente claramente estaba en otra parte. Da-Hye notó la distracción en su expresión y decidió preguntarle.

"¿Estás bien?" susurró, inclinándose hacia él. "Pareces preocupado."

Seo-Joon levantó la vista, intentando sonreír, pero la tensión era evidente. "Es solo... estoy pensando en las solicitudes. He estado revisando los requisitos para la Universidad Nacional de Seúl y... bueno, no puedo evitar sentirme presionado."

Da-Hye sintió un nudo en el estómago. Ella también estaba nerviosa por las solicitudes, pero había evitado hablar de ello, temiendo que expresar sus preocupaciones solo las haría más reales. "Lo entiendo," respondió, entrelazando sus dedos con los de Seo-Joon. "Pero estamos en esto juntos. Nos hemos preparado mucho, y sé que daremos lo mejor de nosotros."

Seo-Joon suspiró, agradeciendo la tranquilidad que le daba Da-Hye, pero sus ojos todavía reflejaban una preocupación más profunda. "Da-Hye, hay algo más que me inquieta. He estado pensando en lo que pasará si... no entramos en la misma universidad. Quiero decir, ¿qué pasaría con nosotros si eso ocurriera?"

La pregunta quedó suspendida en el aire, y por un momento, Da-Hye no supo cómo responder. La idea de no estar juntos en la universidad era algo que había evitado considerar. Siempre había imaginado que ambos lograrían entrar en la Universidad Nacional de Seúl, que todo saldría como habían planeado. Pero ahora, enfrentada a la posibilidad de un futuro diferente, sintió una punzada de miedo.

"Seo-Joon," dijo finalmente, con una voz tranquila pero firme. "No sé qué nos depara el futuro, pero sé una cosa: lo que tenemos es real. No importa dónde terminemos, quiero que sepas que estoy dispuesta a luchar por esto. Por nosotros."

Seo-Joon la miró a los ojos, encontrando en ellos la determinación que necesitaba. "Yo también, Da-Hye. Prometo que no dejaré que nada ni nadie se interponga entre nosotros, sin importar lo que pase."

Las palabras de Seo-Joon lograron calmar un poco la ansiedad de Da-Hye, pero ambos sabían que el futuro era incierto. Con el tiempo, las conversaciones sobre la universidad se volvieron más frecuentes, y aunque intentaban mantener una actitud positiva, las dudas y temores empezaban a aflorar.

Una mañana, mientras estaban en clase, el profesor Park anunció una competencia académica entre escuelas. La competencia era una oportunidad importante para los estudiantes que aspiraban a universidades de élite, y la escuela de Da-Hye y Seo-Joon estaba buscando candidatos.

"Esta es una excelente oportunidad para demostrar sus habilidades," dijo el profesor Park, mirando a sus alumnos con una mezcla de entusiasmo y expectativa. "Los estudiantes seleccionados no solo representarán a nuestra escuela, sino que también tendrán la oportunidad de destacarse ante los representantes de las universidades."

Da-Hye y Seo-Joon se miraron, sabiendo lo que esto significaba. Ambos eran candidatos naturales para participar, pero la competencia también traería consigo una gran cantidad de presión adicional. A pesar de sus preocupaciones, sabían que no podían dejar pasar esta oportunidad.

Después de clase, mientras caminaban hacia la salida, Seo-Joon habló sobre la competencia. "Creo que deberíamos intentarlo. Podría ser justo lo que necesitamos para asegurarnos esos lugares en la universidad."

Da-Hye asintió, aunque no podía evitar sentir una pequeña chispa de duda. "Tienes razón. Es una gran oportunidad, pero también... me preocupa que pueda ponernos más presión."

Seo-Joon la miró con comprensión. "Lo sé. Pero recuerda, estamos en esto juntos. Nos apoyaremos el uno al otro, como siempre lo hemos hecho."

Da-Hye sonrió, sintiéndose agradecida por tener a Seo-Joon a su lado en estos momentos. "Sí, juntos podemos con esto."

Así que decidieron participar. La preparación para la competencia fue intensa, con ambos dedicando horas a estudiar y practicar. Pasaron menos tiempo relajándose y más tiempo enfocándose en lo que estaba por venir. Aunque esto les acercaba académicamente, también empezó a poner una pequeña distancia emocional entre ellos.

Una noche, mientras revisaban sus notas en la biblioteca, Da-Hye notó que Seo-Joon estaba más callado de lo usual. "¿Todo bien?" preguntó, intentando romper el silencio.

Seo-Joon la miró, sus ojos revelando el cansancio acumulado. "Sí, solo estoy... agotado. Todo esto es más difícil de lo que pensé."

Da-Hye asintió, sintiendo lo mismo. "Sí, lo es. Pero ya casi estamos ahí. Solo un poco más de esfuerzo, y lo lograremos."

Seo-Joon asintió, pero Da-Hye podía ver que la carga emocional y física estaba empezando a hacer mella en ambos. A pesar de sus promesas de apoyarse mutuamente, la presión de la competencia y las solicitudes universitarias estaba comenzando a afectarlos. Sabían que necesitarían ser más fuertes que nunca para superar este desafío sin perder lo que los unía.