Mi Hermoso Vagabundo.

(Sam Warren)......

Después de haber ido a despejarme a un lugar en donde no me encontrara con Rocío, regresé a la empresa y mientras me bajaba de mi carro en el estacionamiento escuché el sonido de un carro como si hubiese golpeado a algo o a alguien.

(De inmediato fui a ver qué había sucedido) Ahí fue cuando la vi a ella... Dónde al acercarme Rocío se encontraba inconsciente tirada en el piso del estacionamiento.

Sin pensarlo la tomé en mis brazos y la subí a mi carro para llevarla al hospital… (No recuerdo cómo conduje hasta que llegue al hospital) Solo recuerdo el miedo que sentí al verla inconsciente a mi lado, mientras que pasaba por mi cabeza la posibilidad de llegar a perderla para siempre.

Luego en el hospital, después de que los médicos la examinarán y la llevarán al quirófano... Yo estaba como un loco sin saber el estado de salud de Rocío.

Al rato...

Me informó el médico que Rocío se encuentra bien, qué producto del impacto al recibir el golpe ella se había desmayado, quizás por la impresión y que la única secuela física era una fractura en la pierna derecha, pero gracias a una pequeña cirugía que le realizaron y con reposo de por lo menos un mes Rocío quedaría sin secuelas del accidente.

Pedí verla de inmediato (Solo necesitaba cerciorarme con mis ojos que ella estuviera bien).

Hasta que entré a su habitación y la vi sentada en esa cama, mirándome mientras yo caminaba hacia ella sin decir nada.

_Señor Warren, ¿Qué hace usted aquí?_ me pregunta Rocío sin saber por qué yo estoy junto a ella en el hospital.

_¿Cómo te sientes?_ le pregunto queriendo abrazarla, pero manteniendo una fría distancia que me duele en el alma.

_Bien, pero no ha respondido mi pregunta_ me dice Rocío.

_Yo, yo fui quien te trajo al hospital cuando el carro te golpeó en el estacionamiento del edificio_ le respondo un poco nervioso.

_¿Fue usted quien me trajo?

_Si... Yo me estaba justo bajando del carro cuando escuché el golpe y al verte tirada en el piso te traje de inmediato al hospital, ya que estabas Inconsciente y no sabía la gravedad de tus lesiones.

_Muchas gracias, se lo agradezco mucho señor Warren_ me responde Rocío mientras me da una hermosa sonrisa.

_¿Necesitas algo? ¿Quieres que le avisé a tus padres?_ le digo sabiendo que debería avisarle del accidente a su madre porque por la hora debe estar esperando a Rocío en su casa.

_¡Mi madre! Ella debe de estar muy preocupada porque aún no llego a casa.

_Si quieres te presto mi teléfono para que la llames_ le digo mientras saco mi teléfono de mi bolsillo para entregárselo.

_No es necesario señor Warren, guarde su teléfono, ya que mi madre no tiene teléfono en casa para llamarla_ me dice Rocío, viendo en su rostro tristeza al no saber qué hacer para ubicar a su madre.

_No te preocupes, yo iré por tu madre_ le digo saliendo de la habitación sin escuchar una respuesta de parte de Rocío porque conociendo muy bien como es, sé que no aceptaría mi ayuda.

Al rato...

Llegué a la casa de Rocío, llamo a la puerta y donde sale su madre, a la que le expliqué lo sucedido con su hija. Ella se puso muy nerviosa, aunque yo traté de calmarla de igual forma la madre de Rocío estaba muy preocupada.

Le ofrecí llevarla al hospital para que la viera y ella muy apenada aceptó de inmediato, llevando así a la madre de Rocío y a sus hermanitas que estaban muy nerviosas por su hermana.

Al llegar al hospital las llevé a la habitación, dónde yo me quedé observando en silencio parado en la puerta como su madre y hermanas abrazaban a Rocío con mucho amor, viendo que a pesar de que esa señora es una mujer muy humilde, ella ama con todo su ser a sus hijas.

Ahí me quedé pensando que no existe nada semejante a Rocío, esa bella chica que me hace sentir cada vez que estoy con ella, qué corre sangre recorre por mis venas y que si tengo corazón. Quien con su nobleza pudo entrar en mi alma, convirtiéndose en alguien de quien no me quisiera alejar nunca más en toda mi vida...

Para que no se dieran cuenta de cómo la miraba con cara de idiota, salí en silencio de ahí para ir a la dirección del hospital, en dónde dejó pagado una gran suma de dinero para costear todos los gastos de Rocío, exigiendo que solo le digan a Rocío que el seguro médico cubrió todos los gastos.

Esa noche me quedé en el hospital, no pude dormir, pero tampoco quise que me vieran tan preocupado por ella, así que me quedé en mi carro, ya que no podía alejarme de Rocío porque es ella en que pienso en cada momento.

Al otro día...

Fui a la habitación de Rocío, quien aún dormía, pero su madre quien estaba ahí me pide salir de la habitación para que hablemos y así no despertar a Rocío.

_Señor Warren, estoy muy agradecida por lo que ha hecho por mi hija_ me dice mientras me da un gran abrazo.

(Yo me quedé inmóvil, no supe cómo responder a esa muestra de cariño, puesto que jamás en mi vida me habían abrazado de esa forma)

_No tiene nada que agradecer... Yo haría esto por cualquier empleado de mi empresa_ le digo para que no sospechara que estoy enamorado de su hija.

Luego regresé al edificio, en dónde me di una ducha y me cambié de ropa porque tenía una importante reunión que no podía posponer. Donde luego de terminar, me fui de inmediato al hospital para saber de Rocío.