Isabela es una enfermera experimentada, especializada en cuidados especiales, acostumbrada a tratar con pacientes en condiciones graves y delicadas. Cuando es contratada para cuidar a Renato, un joven que lleva 10 años postrado en cama debido a un accidente, enfrenta el trabajo con la seriedad y profesionalismo de siempre. Sin embargo, lo que comienza como una rutina tranquila de cuidados pronto toma un giro extraño. Isabela empieza a escuchar una voz misteriosa dentro del cuarto de Renato, pero al mirar alrededor, se da cuenta de que está sola con el paciente. Inicialmente escéptica sobre la posibilidad de que existan espíritus, se ve desafiante a enfrentar algo que no puede explicar. La voz parece dirigirse a ella, como si el propio Renato, en su estado inmóvil, fuera capaz de comunicarse de una manera que ella jamás imaginó posible. La enfermera se ve dividida entre su cordura y lo que parece una conexión sobrenatural. ¿Es víctima de un delirio, o Renato realmente está intentando hablar con ella, de una forma que trasciende la lógica médica? Día tras día, la línea entre lo real y lo inexplicable se vuelve más tenue, e Isabela debe enfrentar sus propios miedos y dudas para entender lo que está sucediendo.
NovelToon tiene autorización de R.R.Floriano para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 12
No conseguí dormir pensando en la propuesta que Dª. Aurora me hizo, si yo no hablara con Renato quizás ni consideraría la idea de ser su mujer y tener un hijo con él, pero siento una amistad muy grande por él y lo haré, si él un día vuelve estoy segura de que seremos muy amigos, y si no vuelve también, es gracioso, pero no me siento más sola, ahora tengo una familia.
Tomé un baño y fui al cuarto a comenzar mi día con Renato, no intenté hablar con él, sé que en la hora que él quiera conversar, hablará conmigo.
Hice como todos los días, le di un baño, cambié la ropa de cama, lo arropé y esperé a Julia con el desayuno.
_ Buenos días, Isa.
_ Buenos días, Julia. ¿La señora sabe si Dª. Aurora ya se levantó?
_ Sí, ya, ella debe ir al salón a tomar el desayuno en cualquier momento.
_ Por favor, Julia, pídele que venga a hablar conmigo antes de salir.
_ Le avisaré.
Julia salió del cuarto y Renato, comenzó a hablar.
_ ¿Qué quieres con mi madre? No estarás considerando aceptar esa locura de matrimonio?
Fui hasta la cama, acaricié su rostro, me acerqué y le di un beso en los labios y dije:
_ Renato, quiero casarme contigo, prometo hacer de todo para que tú te sientas siempre bien y cómodo.
_ No quiero, yo no tengo derecho de arruinar tu vida, no lo hagas. Yo no soy un hombre, tú no puedes hacer eso.
Dª. Aurora entró en el cuarto, me dio los buenos días y fue directa al asunto.
¿Ya tomaste tu decisión? ¿Te casarás con mi hijo?
Renato está tan alterado que casi no consigo concentrarme en lo que su madre está diciendo.
_ Mamá, ¿no ves que arruinarás la vida de Isa? Tienes que parar con esa locura, no puedes arruinar la vida de la única persona que me ayudó en todos estos años. Quiero morir, Señor, ¡mátame antes de que mi madre destruya la vida de Isa!
_ Acepto, pero ¿y si su hijo vuelve un día y no me quiere cerca de él?
_ Lo pondré todo en el contrato, si mi hijo despierta del coma y no quiere seguir casado contigo, la mitad de todo lo que él tiene pasará automáticamente a ti y a tu hijo. Y él no podrá pedir la custodia del niño, la única cosa es que tú criarás al niño para que lo asuma todo cuando cumpla 18 años, y si necesitas tener una relación extraconyugal, deberá ser muy bien escondida. Mientras mi hijo esté vivo, te comprometerás a cuidarlo y a vivir con él.
_ Ponga en el contrato también que esta casa pertenecerá a mi hijo, y que la señora vivirá conmigo hasta el último día de su vida, y me ayudará con las dificultades que surjan.
_ No tenía ninguna intención de dejarte sola, niña, quiero una aliada y no soltar una bomba en tu regazo e irme, mi hijo no es un problema, yo solo quiero que él continúe vivo de alguna forma.
_ ¿Y ahora qué hacemos?
_ Necesito tus documentos, para dar entrada a las proclamas y llamaré a mi abogado para redactar el contrato. Mandaré al Dr. Mario para que venga a sacarte sangre para los exámenes prenupciales.
_ No quiero que ese médico me examine, el día que él vino a sacarle sangre a Renato, él me tiró los tejos.
_ ¡Dios mío, niña! ¿Por qué no me contaste una cosa así? Cambiaré de médico inmediatamente.
_ Le daré el nombre de mi médica, por favor, marque una cita con ella, yo confío mucho en ella.
_ Óptimo, es bueno que ella ya te conozca, así podrá acompañarte durante el proceso del embarazo.
_ Hay otra cosa.
_ ¿Qué? Puedes hablar, no me escondas nada.
_ Soy virgen, solo tuve un novio y fue en la época de la escuela.
_ Tendremos que verlo con tu médica, pero creo que eso no será problema.
Le di mis documentos a Dª. Aurora, que los tomó y se fue a resolver los problemas, y yo me quedé aquí con un hombre muy enojado, casi volviéndome loca de tanto que habla.
_ Voy a hacerte cambiar de idea, Isa, para con esta locura antes de que sea tarde, yo no me quiero casar contigo, vete, quiero morir solo. ¿Cómo puedes pensar en tener un hijo con un hombre que no podrá ayudarte en nada? ¿Tú sabes cuánto trabajo da un niño? Tendrás dos niños que cuidar.
_ Renato, vete a dormir, quiero leer un poco, deja de hablar, no se resolverá, yo ya tomé mi decisión. Me casaré contigo.