Última parte de la saga Casualidad o Destino, continuando y culminando con la historia de Carlos y Lizbeth, así como de su descendencia, mostrando las experiencias, que puede vivir una persona sin importar, la edad que se tenga o la época en la que se encuentre.
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UNA TRAS OTRA
Después de la apresurada boda, la familia tiene que afrontar otra crisis, esta vez, con Asgard ahora de 13 años, cuando mandan a llamar a Aldebarán y Kenia en la escuela, ya que tenía problemas con algunas materias, y no estaba respondiendo a la altura que se les esperaba por parte de la escuela y tenían que solucionarlo.
Al recibir la llamada, Aldebarán y Kenia se presentan lo más pronto posible, presentándose ante la directora de la escuela para preguntar, cuál era el problema con Asgard, a lo que esta se sorprende que algunos padres se presentaran tan rápido aún llamado, por parte de la escuela.
Aldebaran:
Buenas tardes, recibimos el mensaje ¿cuál es el problema con Asgard?
Directora:
Buenas tardes, el problema es que las calificaciones de Asgard son muy bajas y afecta al rendimiento del grupo.
Kenia:
Ya veo y dígame, ¿en qué materias tiene problemas?
Directora:
En matemáticas y ciencias.
Aldebaran:
Ya veo, permítame preguntarle algo directora, los maestros le dicen para que, le servirán los temas que ven, en la vida diaria, o solo cumplen con su planeación y no le dan un ejemplo práctico.
Al escuchar, las palabras de Aldebaran, la directora, se pone incómoda y trata de anular los argumentos, justificando la forma de car clases de los profesores.
Directora:
Los profesores no se pueden adaptar a un solo alumno, ya que tiene más estudiantes que atender, si lo hicieran descuidarían a los demás estudiantes, y los padres de estos, vendrían a reclamar a la escuela, y con justa razón, si ustedes desean, podemos ponerle una calificación aprobatoria, pero no sería justo para los otros alumnos ni para el mismo.
Aldebaran:
De acuerdo profesora, entiendo sus razones, pero acaso un maestro no tiene la obligación de adaptarse a los tres estilos de aprendizaje, además con los nuevos modelos educativos es necesario, que den ejemplos prácticos de los temas, así como su utilidad en la vida cotidiana.
Kenia:
Profesora, usted sabe que es ilegal exhibir, de una u otra manera, a un alumno, tenga o no una característica neurodivergente, lo que usted está haciendo al sugerirnos esto, está apartando a nuestro hijo, y más aún sin una prueba echa por un especialista en la materia ajena en la escuela.
Directora:
Señora, en ningún momento, estoy insinuando que Asgard, no sea neurotipico, solo les estoy marcando, la posibilidad de ponerle una calificación aprobatoria.
Aldebaran:
Si solo, hubiera dicho eso, estaría bien, pero lo que está diciendo es que si recurrimos a esa, opción, no sería justo para los demás estudiantes, profesora, realizaremos las pruebas a Asgard, y si resulta ser neurodivergente, simplemente lo cambiaremos de escuela a una en la que lo puedan apoyar de forma correcta.
Directora:
Señor Aldebaran, en ningún momento he sugerido esa opción, solo le pido que comprenda, que los profesores no se pueden adaptar a un solo alumno, a si las características de aprendizaje sean diferentes.
Aldebaran:
Profesora, usted misma, está insinuando que nuestro hijo es de características especiales, y entiendo a los profesores, pero dar una utilidad práctica a los temas transmitidos, aumenta la retención del aprendizaje y no quita absolutamente nada de tiempo, ya que el profesor tiene la obligación de dar ejemplos además de ejercicios.
Directora:
A si es, pero sería dar una atención especial, y eso no se puede hacer.
Aldebaran:
De acuerdo profesora, si usted, sigue en la misma posición, entonces me veré obligado a asistir a las clases con mi hijo, y si yo noto que el profesor no responde las dudas de mi hijo, tomaré cartas en el asunto, ya que esa sí es su obligación.
Directora:
Señor, no puede juzgar el trabajo de un profesionista, el cual no conoce, ha profundidad, así como ningún docente se atrevería a juzgar las de ustedes.
Kenia:
Ja, disculpe que me ría, pero por si no lo ha notado, mi esposo, no desconoce, el trabajo docente, ya que tiene una Maestría en Pedagogía, además de estar activo como profesor y si eso no fuera suficiente, mi suegro que en paz descanse también lo era, y este a su vez, se crio en familia de maestros, así que de ningún modo desconoce la labor docente y sus actualizaciones.
Aldebaran:
Si nos disculpa, profesora, firme la salida de mi hijo, inmediatamente lo llevaré con especialistas y si mi hijo, es neurodivergente, lo cambiaré a una institución más adecuada, pero sea o no, iniciaré una reclamación formal, ya
que si lo es la institución debió haberme avisado y si no lo es, no solo estarían difamando, sino que además lo excluyeron y mermaron su autoestima.
Al decir esto, Aldebaran y Kenia recogen a Asgard, e inmediatamente se dirigen a especialistas a hacerle pruebas, para que diagnostiquen su condición, en el camino notan a Asgard con lágrimas en los ojos, parando inmediatamente para hablar con él y ver qué sucede.
Aldebaran:
¿Hijo que tienes?
Asgard:
Nada papá, no te preocupes.
Kenia:
Confía en nosotros.
Asgard:
¿Por qué vinieron a la escuela?, voy a ser la burla de mis compañeros de que papi y mami tienen que venir a salvarme, ya que soy un tonto para la escuela, no necesito que me lo digan.
Aldebaran:
Asgard entiende, somos tus padres, nos preocupamos por ti, siempre serás nuestro hijo, nuestra responsabilidad es cuidarte, apoyarte y corregirte, siempre que sea necesario, hasta que alcancemos a tus abuelos.
Kenia:
No eres, tonto hijo, hemos visto muchas de tus capacidades y los especialistas solo nos dirán que es lo que tienes, y si eres neourodivergente veremos cuál es tu fortaleza y trabajaremos en ella.
Asgard:
De acuerdo, vamos, pero no quita que no sirvo para muchas materias, no les encuentro ninguna utilidad, y peor en matemáticas, más allá de las 4 operaciones básicas, no le veo utilidad.
La familia llega a un centro de valoración, donde le hacen diversos estudios a Asgard, incluso de tipo psicológico, psiquiátrico y neurológico, los cuales arrojan que no es neurotipico en todo el sentido de la palabra, sino que su estilo de aprendizaje, la teoría lo aburre, ya que no le ve ningún uso práctico, lo cual solo le da un muy leve consuelo, ya que se siente diferente.
