Una Bella Historia De Reencarnación

Capítulo 12

Luego del incidente, nos llegó una carta del condado de Baronet, pidiendo que nos disculpemos por lo sucedido, a lo que contesté que me disculparía el día que ese cerdo se disculpe por decir las obscenidades que me dijo, obviamente solamente les envié una carta sin insultos, siempre manteniendo las formalidades, aunque internamente quería insultarlo.

Lamentablemente ellos tenían negocios con mi padre y retiraron su capital.

-Hija no te preocupes, ya lo resolveré-

-Padre disculpa, esto es culpa mía por ser tan elocuente-

-No mi hija, se que te contuviste cuando les contestaste, papá las ama así tal cual son y lo resolveré de alguna forma-

Sinceramente nunca me involucré en los negocios de mi padre, mi pequeña fortuna la hice por mis novelas, la tengo guardada en caso de emergencia. Así que será lo último que usaremos para hacer renacer a esta familia, de ser necesarios, será un pequeño ahorro.

Pero venía un evento que podría favorecernos, se aproxima mi mayoría de edad y si hay algo interesante en estos lugares, no solo es que los padres de las chicas las venden como ganado, sino que muchos aprovechan para hacer conexiones, negocios y aumentar su capital.

Por lo que miro a mi padre, con una sonrisa

-Padre tengo una idea, busquemos socios el día de la fiesta de mayoría de edad, se dará como siempre en el palacio, por lo que será para nuestro beneficio-

-Tienes razón aprovechemos, tenemos un buen producto, solo deben conocerlo-

El territorio de mi padre, es muy bueno para la cosecha de uvas, tenemos un viñedo, no es porque le pertenece a mi familia, pero se hacen los mejores vinos no solo tintos, sino blancos dulces, que son mis favoritos, gracias a mi paladar, conseguí, la uva exacta con la que se hace el vino que amaba tomar en mi anterior vida, un gustito personal que me di aquí también.

Así pasaron los días, me había olvidado de ir a conseguir mi propio vestido, mandé a preparar el traje de mi padre y le compré un vestido a mi hermana, pero dejé para último momento la compra de mi propio vestido, para no decir que lo olvide, por completo.

Inesperadamente, me sorprendió recibir una enorme caja, no tenía remitente, solo decía, ¨gracias por la ayuda prestada, espero que sea de su agrado y si no es mucho atrevimiento espero que lo pueda usar la noche de su mayoría de edad.¨ Salvada por el extraño, cuando lo vea le debo agradecer, ¿debe ser que hará guardia esa misma noche en el palacio?

De todos modos es hermoso… la tela se nota que es bastante cara, es muy alta calidad, era de color azul Francia, color que resalta indudablemente mi cabello rojizo, los detalles estaban en verde agua, el mismo tono que mis ojos, llevaba la espalda descubierta y no era pomposo como la mayoría de los vestidos de moda, el frente llevaba un pequeño escote que dejaba imaginar que tenía dentro del vestido, marcaba cada una de mis curvas.

Indudablemente es un vestido que solo una mujer osada se atrevería a usar. Lo mejor de este vestido es que asegurará que muy pocos nobles quieras casar a sus hijos con una mujer tan atrevida.

Llegó la noche del gran evento, nos vestimos y Ester se ocupó de peinarme y maquillarme, mi peinado era simple pero hermoso, era una corona de trenzas que hacía que mi pelo este recogido, con algunos mechones sueltos sobre mi cara, dejaba ver mi gran espalda descubierta y mi largo cuello, en el cual colgaba un simple collar que heredé de mi madre, junto con aros que hacían juego y en mi cabello una pequeña tiara plateada, cosa que solían llevar las muchachas que festejarían su mayoría de edad, para poder ser reconocidas entre la multitud de personas que asiste.

A mi hermana le elegí un vestido rosa simple, si tuviera una cámara me encantaría retratar este momento, es tan bella con algo tan simple. Mi padre por su parte se colocó su traje, el cual solo usaba en ocasiones especiales, tuvieron que lavarlo con anticipación, porque de tanto que lo guardo, se empolvó.

Mientras bajaba la escalera, a los pies de la misma, podía ver a mi padre y hermana esperándome, ambos me sonreían maravillados por el vestido, cuando llegué al último escalón, extiendo mi mano hacia ese buen hombre y le digo

-Caballero ¿me escoltará?-

Mi padre con esa sonrisa paternal que lo caracteriza, y su dulce voz me responde

-Toda la vida escoltaré a mi princesa-

Bajé y me lancé a sus brazos, mientras con una de mis manos arrastraba a mi hermana para que se uniera. Antes de despegarnos se escucha a Ester regañarnos

-Vamos, ya dejen de ser tan cariñosos, que llegaremos tarde-

Antes que pueda quejarse la arrastro con nosotros y junto con mi hermana, la unimos al abrazo, mientras les digo

-Son las tres personas que más amo en este mundo-

En este mundo, porque siempre están presentes mis adorados hermanos y padres adoptivos de mi trágica primer vida.

Ester sonríe y más dulcemente dice

-Ya lo sé, vamos después puedes seguir siendo así de pegajosa, harás quedar mal a tu padre si llegamos tarde-

-No me interesa que me haga quedar mal, es raro que mi dulce niña reparta abrazos-

-Barón Posadas, compórtese que es el adulto-

Mi padre, como si fuera la orden suprema, nos suelta y dice

-Tiene razón Ester, vamos-