Un Amor No Tan Prohibido

En México Emma ya había llegado hacia bastante y ya se había alojado en un hotel, ya había desempacado sus cosas, ya que se quedaría varios días en el hotel hasta conseguir un departamento cerca de la universidad donde estudiaría.

Ya era de noche, después de dejar todas sus cosas acomodadas, bajó al restaurante del hotel a cenar 

Se sentía angustiada, no había pasado ni un solo día y ya extrañaba a su familia, pero más lo extrañaba a él, pero sabía que si se había ido a México era para olvidarlo, por lo que tendría que no pensar en él

Quería llamar a sus padres, sabía que su mamá estaría triste y llorando por lo que ella se había ido, pero también sabía que la estarían buscando y su celular era lo primero que rastrearian 

Tenía que comprarse un chip Nuevo, uno prepago para que no pudieran rastrearla, sabía que Leonel sería lo primero que haría cuando se enterara que ella se había ido, conocía a Máximo el mejor amigo de él y sabía que era un gran hacker y que no tardaría en encontrarla si ella encendía su celular

Estaba sentada cenando y pérdida en sus pensamientos, cuando siente que alguien se sienta junto a ella en la mesa 

Al levantar la vista ve a un joven de unos veinte o veintitantos años, alto, moreno y guapo que le sonreía 

— Buenas noches soy Tobías y trabajo aquí — se presenta el joven — Y tu? Estás de vacaciones? — le pregunta 

— Buenas noches, me llamo Sol y no, no estoy de vacaciones, vine para estudiar en la universidad — le responde ella, ya que hablaba bastante bien el español 

— Oh, que bien, ya te has inscripto en alguna? — le pregunta él con curiosidad 

— No aún no — solo le responde ella, sintiéndose media incómoda 

— Quieres que te ayude con eso? Yo soy de aquí y conozco muy bien la ciudad — se ofrece él ayudarla 

— Te lo agradezco, pero no, gracias igual yo puedo manejarme sola — le responde ella un tanto inquieta 

— Entiendo, no confías en mí por qué no me conoces, discúlpame, yo soy así de sociable, me gusta entablar conversación enseguida, a veces no me doy cuenta que puede llegar a ser molesto para los demás — dice el joven apenado y levantándose de la silla 

— No hay problema, tal vez si me incomode un poco al no conocerte, lo siento, no soy de aquí y no conozco aún sus costumbres — le responde Emma 

El joven Tobías sonrió y se volvió a sentar junto a ella y ambos comenzaron a charlar de todo un poco y conociéndose un poco más.

Cerca de media noche Emma se despidió de Tobías y subió a su habitación, habían entablado una amistad y Tobías se había ofrecido a acompañarla a hacer todo los que ella necesitará.

Al día siguiente Emma se levanta, se da un baño, se viste y luego baja a desayunar, hoy iría a anotarse a la universidad y luego iría a buscar algún departamento para alquilar 

Al llegar al restaurante ordena su desayuno y mientras espera a que se lo traigan, llega Tobías

— Buenos días hermosa — la saluda sentándose con ella en la mesa 

— Buenos días Tobías — le responde el saludo — Ya has desayunado? quieres desayunar? — le pregunta ella 

— No, te lo agradezco, yo he desayunado mucho más temprano — le responde el

Llega el mesero con el desayuno de Emma y ella comienza a desayunar mientras conversa con Tobías 

Al finalizar el desayuno ambos salen del hotel, toman un taxi y se dirigen a la universidad

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En Seattle, un muy descontrolado Leonel se encontraba en su habitación destrozando todo lo que tenía a mano

Habían pasado 5 horas desde que se enteró que Emma se había ido y aún no habían podido rastrear su celular 

Había ido al aeropuerto para saber a qué hora se había ido y que nombre había usado para comprar el pasaje, pero en el aeropuerto no le quisieron dar información, por lo que terminó armando un kilombo y los guardias lo terminaron echando del lugar.

— Se puede saber que te pasa? Por qué estás destrozando tu cuarto? — le pregunta Leo 

— No lo entenderías, déjame solo papá — le responde Leonel

— Estás así por tu hermana?, Por qué no aparece? — le sigue preguntando Leo

— QUE NO ES MI HERMANA MALDITA SEA, EMMA NO ES MI HERMANA, Y YO NO SOY TU HIJO DE SANGRE, EL QUE NOS HAYAMOS CRIADO JUNTOS NO NOS HACE HERMANOS — grita enojado Leonel, mientras comienza a llorar, ya que por esa estúpida idea de que ellos eran hermanos no podían estar juntos

— De qué estás hablando Leonel? — pregunta Leo confundido de que él haya salido con eso 

— Lo siento papá, perdoname, pero me enamoré de Emma, la amo, la amo demasiado y no como una hermana, sino como mujer — dice Leonel cayendo de rodillas en el piso y tapándose la cara con ambas manos, ya que no podía dejar de llorar

Leo quedó en silencio con esa confesión de su hijo, no sabía que decir, ni como reaccionar, jamás imagino que su hijo se enamoraría de su propia hermana, aunque no llevarán la misma sangre 

En ese momento entra Lorena a la habitación, ya que había oído toda la conversación entre Leo y Leonel y necesitaba calmar las aguas

— Amor, ve a descansar un rato, esperemos a que Carol nos avise si Emma se comunicó con ella, ve, yo hablaré con nuestro hijo — le dice Lorena abrazándolo por la espalda 

Leo se giró para quedar de frente a ella le dio un beso en los labios y luego salió de la habitación dejándolos solos 

Lorena se acercó a Leonel, se agachó para quedar a su altura y lo abrazó, Leonel al sentirla también la abraza y comienza a llorar con más fuerza, se sentía deprimido y con miedo, sus padres ya sabían lo que él sentía por Emma y temía que lo quisieran alejar de ella 

— Mamá lo siento, yo no planee enamorarme de Emma, simplemente paso y no lo pude evitar — le dice Leonel 

— Y Emma lo sabe? Ella sabe de tus sentimientos hacia ella? — le pregunta Lorena 

— No mamá, ella no lo sabe, siempre intente tapar mis sentimientos poniéndome de novio con otras chicas, pero eso la destruía más a ella que a mí — le cuenta él 

— Por qué dice que el que tu salieras con otras mujeres la destruía más a ella? — pregunta Lorena confundida 

— Ella también está enamorada de mí mamá, y el que se haya ido hoy es mí culpa, Samantha le dijo que yo le había propuesto matrimonio y le mostró un anillo que yo tenía acá en mí habitación que había comprado para Emma, y Emma pensando que yo me casaría fue que decidió irse entiendes? Necesito encontrarla mamá o me moriré sin ella — le dice Leonel con tristeza 

— Tranquilo cariño, Emma aparecerá pronto, solo hay que darle tiempo, si ella se fue con el corazón roto, hay que dejarla que se le pase un poco y con respecto a Samantha, te dije desde un principio que esa joven no me agradaba y ahora con esto que me cuentas mucho menos, así que no la quiero volver a ver en mí casa — le dice e intenta tranquilizarlo su madre 

— Mamá no puedo dejar pasar mucho tiempo, no quiero perderla, necesito decirle que yo también la amo, que ya no me importa lo que piensen los demás, que solo me importa estar con ella — le dice desesperado Leonel 

— No podemos hacer nada cariño, hasta que ella se comunique con sus padres y diga dónde está, no sabremos dónde buscarla — sigue intentando tranquilizarlo — ven cariño, acuéstate tu también y descansa, quedarte despierto no vas a lograr nada — lo ayuda a levantarse del piso y lo hace acostar en su cama 

Después de que Leonel se tranquilizó y se acostó a dormir, Lorena salió de su habitación y se fue a la suya a hablar con Leo sobre lo sucedido con sus hijos.

Al día siguiente Leonel se despierta y lo primero que hace es mirar su celular para ver si tenía noticias de su amigo Máximo sobre Emma, pero se encontró sin nada

Con angustia se levanta sin ganas y baja a desayunar con sus padres y hermanos…

Leonel ..

Emma ..

Tobías ...