La Vida Al Límite

Como era de esperarse cuando regrese a casa después de toda esa diversión ,mis padres como nunca estaban unidos para llamarme la atención

Sam: buenos días

Dije al entrar en casa mi madre fue la primera en explotar su irá hacia mí

Marlén:que decepción contigo Sam, nos dejaste en ridículo delante de nuestras amistades

Preferí callar y no decir nada solo intenté seguir mi camino hacia mi habitación, pero está vez fui lejos y al ver a mi padre aquí sabía perfectamente que mi chiste tendría consecuencias

Samuel: adónde vas tu madre te está hablando

Sam: a mi habitación

Samuel: siéntate

Lo miré diciendo que puedo escuchar de pie

Samuel: es una orden , ya estoy cansado de tu comportamiento, así que ahora en adelante te comportas mejor o no verás nada de dinero

Sam: es eso lo que usted piensa , nunca me ha ingresado su dinero así que si es lo que desea me puede quitar la pensión que me da

Samuel: vaya si apenas acabas de cumplir los dieciocho y ya se cree un hombre te dije que te sientes o acaso no entiendes

Me siento de mala manera y subo los pies en el mueble frente a mí

Marlén: si ves, tu hijo es un malcriado

Samuel: creo que tú debiste criarlo mejor

Marlén: acaso es solo mi obligación tú eres el padre

Samuel : pero paso todo el maldito día trabajando para mantener sus lujos

Marlén: claro y por eso te queda fácil echarme toda la carga a mí

Yo solo los veía mientras discutían en qué momento deje de ser el centro de atención, pensé irónicamente, vaya que se sentía bien que se preocuparan por mí, como ellos seguían discutiendo decidí irme a mi habitación

Samuel: no he terminado de hablar contigo san Ferrer

Me detuve y giré hacia él

Samuel: mañana irás a trabajar a la empresa, ganarás el dinero con el que te mantengas de ahora en adelante y alista tus cosas para que te vayas al apartamento que mandé a preparar para ti

Marlén: como por qué le vas a hacer eso es tu hijo

Samuel: si gustas te puedes ir con el

Ella se quedó en silencio al escuchar la sentencia de mi padre, no respondí solo me fui a la habitación por la maleta , le demostraré que yo puedo solo que no soy un estorbo como ha de pensar

Con la maleta lista bajé a la sala él estaba aún aquí eso sí era extraño, acaso estará enfermo es la segunda vez en el día de hoy que me sorprende, nunca le había importado como yo me he comportado y mucho menos que se cumpla su palabra

Samuel: bien vamos

Lo seguí hasta el auto, cuando abrí la puerta me dijo que me iría en bus con uno de los guardias

Sam: en bus

Samuel: y vete acostumbrado, ya que ese será tu transporte de ahora en adelante

Sam: bien

Mierda por lo menos me hubiera mandado con el chófer, pero al parecer mi castigo va en serio

Manuel: listo joven

Me preguntó el guardia, le asentí el me ayudó con una de las maletas y caminamos hacia donde estaba la parada del auto bus