Tipos de amor

Narra Mildred

Suspiré con frustración... Tatiana era mi mejor amiga y sabía desde hace unos años que sentía algo más por "mi padre" en realidad sabía todo lo que sucedió en mi vida después de que Jean me adoptó.

— Si, Tatiana yo lo amo — Le confesé con cierta duda, lo que más me preocupaba era ¿que pensaría ella de mi? seguro estaría creyendo en ese mismo instante que yo era una loca que necesita ir a un psicólogo — Creo que ya lo sabías y no está de más decirte que no estoy loca — Dije para romper el silencio que se había formado entre nosotras en ese momento.

— Te equivocas — Me contesto mientras fijaba su mirada hacia mi — No creo que necesites ningún tipo de ayuda psicológica, después de todo yo apruebo tu odio a Elena desde que le conocí hace unos meses — Ahora ella me confesó algo que a mí nunca me pasó por la mente que pensara.

— Gracias por comprender — Solté de manera aliviada pero ese alivio se terminó mas rápido que el tiempo que tardo en llegar.

— El que no me lleve muy bien con Elena no quiere decir que justifico lo que haces Mildred... eres mi mejor amiga pero noto que a veces no piensas en consecuencias de tus actos — Dijo para después continuar mientras dirigía la mirada a otro lado — No es correcto que le digas Jean o que te acerques a el cuando están solos.

— ¡¿Eh?! ¡¿ahora me vas a decir que puedo hacer y que no?! — Le grite enfadada y está solo se giró hacia mi mirándome seriamente.

— ¿Que harás si algún día Jean llega hasta donde estas tu con una noticia? — Pregunto y no supe que responder así que continúo.

— ¿Si esa noticia es un embarazo por parte de Elena?... ¿que harás al notar su cara de felicidad? — Esa pregunta me dejó helada, ¿un hijo de Elena? ¡Jamás! eso no lo permitiré.

— Y aún se puede poner peor, ¿que piensas hacer si te obligan a llamar hermana a esa niña? ¡¿Lo vas a aceptar?! — Lo último me lo dijo en un tono de voz más alto que el anterior.

— ¡Por supuesto que no! — Le grite enfadada por semejantes idioteces.

— Pues lamento decirte que ese es el único destino que te espera si sigues cerca de Jean — Me dijo más calmada y me quedé pensando en todo lo que me había dicho. Odiaba que ella se metiera en algunos de mis asuntos, pero odiaba más que ella siempre tenía la razón ante todo pues yo siempre estuve cegada por mis estupideces.

...Narra Jean...

Me encontraba en la recepción hablando sobre asuntos irrelevantes con un joven llamado Harry, al parecer era el mejor amigo de Charles Aomin el hermano mayor de mi esposa Elena.

Elena llegó hasta mi y yo corte mi conversación con Harry.

— Mi amor — Me hablo y la mire inmediatamente.

— ¿Que sucede? — Le pregunté.

— Mi padre quiere platicar de algo contigo— Me miraba ansiosamente y no me quedo de otra más que aceptar la petición.

— Bien, vamos a dónde tú padre — Accedí despidiéndo me de Harry y nos dirigimos hacia la ubicación del señor Aomin.

...Narrador Omnisciente...

Mientras Jean y Elena se alejaban una señora de cabellos castaños y ojos marrones se encontraba mirando hacia donde se dirigían.

— Oh Jean... en serio pido perdón por haberte insistido para que tomarás matrimonio con Elena, pero no lo debes soportar tanto tiempo ¿o si? — Susurro por lo bajo y le dió un trago a su copa de vino tinto — Esto solo será hasta que logres convertirte en el señor de la mafia... así podrás vengar a tu padre por la traición que sufrió — Pensó y después se percató de que alguien la abrazaba por la espalda.

Cuando miro a la persona se dió cuenta de que era Mildred, su "nieta".

— ¡Oh! Hola querida Sofi — Dijo muy feliz para finalmente corresponder el abrazo de esta.

— Buenas tardes Abue, hace mucho tiempo que no tenía el gusto de verla... bueno creo que debería llamarla señora Ackerman — La pelinegra se quedó pensándolo por unos momentos.

— ¡Vamos!, claro que puedes llamarme abue; Eres tan linda… justo como te guardaba en mis recuerdos —Le da un beso en la mejilla a Mildred — Solo con la diferencia de que ahora ¡eres toda una mujer! — Hizo una pausa para separarse y tomar un poco más de vino — Dime ¿cuántos galanes se están peleando por ti en estos momentos?.

— Ninguno — Dice notablemente apenada — La verdad creo que eso no es algo que me preocupe mucho ahora mismo.

Mildred hizo una pausa para mirar un lugar retirado de las demás personas, dónde se encontraban Jean, Elena y el señor Aomin; padre de Elena.

— Sabe, no creo tener mucha suerte en esto del amor — Dice para después dirigir de nuevo la mirada a la señora Ackerman.

Su "abuela" pareció notar que de vez en cuando está miraba de reojo a Jean.

— Tu... ¿quieres mucho a mi hijo verdad? — Sonríe de lado y Mildred solo la mira confundida por la pregunta.

— Claro que lo quiero... después de todo el es mi padre adoptivo y tengo un cariño enorme hacia él y su persona — Suelta la pelinegra sin tanto interés.

— ... Me refiero a que si lo quieres como pareja — La señora la mira y la otra solo da un ligero brinco en su silla.

— ¡N-no! — Dice apenada — Yo solo tengo un cariño que cualquier hija tiene hacia su padre y nada más.

— Oh, vamos Mildred — La señora le dedica una pequeña sonrisa — él es guapo ¿o no? — Alza una ceja.

— Bueno... creo que ¿si? — Dijo mirando a su "abuela" con duda a lo que está le dedicó una mirada pícara — Pero no crea que me interesa él... digo el es alguien espectacular y todo pero yo soy su hija y de ninguna manera podría gustarme él.

La señora Ackerman miraba a Mildred y prosiguió a decir — Mildred yo solo te pregunté lo que tú creías sobre mi hijo, y me arrojas te muchas excusas; dime ¿dije algo que mereciera la respuesta que has dado hace un momento? — Hizo una pausa y tomo un suspiro — ¿O acaso te gusta mi hijo y no quieres confesar por miedo a que te traicione y le cuente todo a mi niño?.

— ¡Claro que no!, no se cómo puede pensar esas cosas absurdas — Evadió Mildred y los colores se subieron a su rostro.

— Que raro; mi experiencia en estos temas y el color rojizo en tu rostro me está demostrando todo lo contrario — La señora dirigió su mirada a su vino y tomo otro trago.

— Abue, ¡no diga eso! además usted no puede decir que es lo que yo pienso o siento — La pelinegra trato de excusarse.

— Oh — La señora solo atinó a decir eso de manera ligera para después continuar — Mildred, si yo sé que lo que tú sientes por mi hijo es amor, es por que yo una vez fui joven y con ello también tuve vivencias como las tuyas; el primer amor, el sufrimiento de no poder estar con la persona que "amas" — Hizo comillas en la última frase.

— Bueno... — La pelinegra trato de hablar pero su voz se cortó y la señora siguió hablando.

— Creo que esto nadie te lo ha explicado así que yo lo haré — Mildred puso atención a su "abuela" — En la vida existirá tu primer amor y el amor de tu vida.

— ¿Eh? — Mildred se extraño y su abuela siguió hablando.

— Una cosa es el primer amor; esa persona te enseña lo que es amar, pero en algún momento llega a causar una herida que llevaras en tu corazón junto a el cariño que sientes y aunque esa persona te daño tu la habrás de llevar en el corazón por siempre — Explico la abuela y Mildred pregunto.

— ¿Que no es lo mismo? — Hablo y su abuela la miro con cara de "Silencio niña no he terminado".

— El amor de tu vida curará toda herida que haya dejado tu primer amor; pero nunca lo sacará de tu corazón — Suelta un suspiro — Pero hay veces en que el primer amor y el amor de tu vida están presentes en ella al mismo tiempo, en esas ocasiones es molesto por qué ellos pelean por amor a la joven.

— Y... ¿En ese caso a quien debería escoger la chica? — Una pregunta fue dirigida hacia la señora.

— A quién el corazón elija — Esa palabra hizo que Mildred se pusiera a pensar ¿Que rayos estaba haciendo con su vida? ¿acaso Jean era su primer amor? ¿Solo eso?.

Mildred se levantó de su asiento y su abuela le dijo una última cosa antes de que está se marchara.

— La verdad lamento que mi hijo se haya casado con Elena, pero ese era un arreglo por parte de mi esposo y me gustaría que su última voluntad fuese realizada por mi hijo — Tras esto Mildred se despidió de su "abuela" con una reverencia y se dirigió al jardín trasero, en un lugar dónde nadie pudiese molestarla para reflexionar las palabras de la señora Ackerman.

Más populares

Comments

Liz Hernandez

Liz Hernandez

muy buena

2021-04-19

7

Total

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play