capítulo 12

"Entonces eso paso?"

"Así es... Hicimos mal?"

"Lo bueno es que vinieron con bien y aquella persona es de buenas intenciones, solo tengan cuidado en la próxima, a veces pueden ser personas que se dedican a hacer daño a otros"

"Cazadores?"

"Así es Yoko, pero un tipo de cazador que busca sastifacer sus más oscuros deseos con los más débiles, creo que tendré que comprarles un celular, en parte es útil manejar uno"

"No te preocupes por nosotras, soy un ser poderoso!"

"No digo que no, pero hasta los más fuertes tienen debilidades y un cazador busca eso, la debilidad de sus víctimas, por cierto... Que tal quedó la cena?"

"Estaba rica madre"

"Madre?"

Cuando le dijo eso Cleo a Eleonore, ella de inmediato se quedó en silencio, poniendo sus manos en lo alto de su pecho mientras suspiraba sorpresa, Nikita soltó una débil y pequeña risa mientras se tapaba la boca.

"Que pasa?"

"Y eso de decirme Madre a qué vino?"

"Verás, le dijimos a Luvianne que habíamos sido adoptadas por ti, por suerte nos creyó... Es que sería muy incómodo decirle que somos tu mascota"

"Al igual con el caso de sus orejas?"

"Sip!"

Todos nos fuimos a dormir, mientras me cambiaba de ropa escuché unos pasos que cada vez aumentaba, no eran los pasos de Nikita, cuando volví a ver hacia la puerta mire que era Cleo quien llegaba rozando su hombro con su mano.

"Que pasa?"

"Quería saber si podía dormir con ustedes?"

"No sé si Nikita está de acuerdo..."

"Está bien, la cama es grande"

Terminamos las tres en la misma cama, me dejaron el medio de la misma y compartimos la misma sábana, a pesar de que tenía bastante sueño estaba despierta, voltee a ver a Nikita y tenía los ojos cerrados, luego ví a Cleo que estaba noqueada.

"Vaya... Porque no puedo dormir"

"Porque ya lo estás haciendo"

Volví a ver hacia donde estaba Nikita, pero ella no estaba allí, dirigí la vista hacia el otro lado y tampoco estaba Cleo, cuando alce la vista hacia arriba todo cambio, estaba en el mismo bosque de mis sueños.

"Que mala pata"

"Cuando pagarás tu deuda Yoko?"

"Eh"

Escuchaba esa voz que parecía murmurar cerca de mi oído, me levanté y volví a ver a todas parte pero no había nada, exepto el enorme charco de sangre que cubría el suelo y también mis manos, cuando alce la vista hacia el horizonte todo se volvió claro.

"No otra vez"

Nuevamente estaba en ese maldito sueño, esos dos espectros que me avisan todas las noches, no sabía que hacer en realidad, nuevamente el rifle apuntando mi cara mientras aquellos espectros de burlaban de mí.

"Yoko!"

Logré despertar de aquel sueño, por suerte mis manos no estaban sobre ninguna de las dos, aunque si estaban clavadas en mi cintura, Nikita me tenía aferrada a ella con sus brazos rodeandome a lo alto de mi abdomen.

"Creo que tenemos que resolver ese problema"

"No deja de atormentarme, siempre es lo mismo"

"Es interesante saber que Nikita está intacta"

"Seguro porque he tomado control en parte"

"Quisiera preguntarte... Paso algo antes, un evento tan caótico que dejó rastros en tu memoria, algo que de alguna forma te genera odio o culpa?"

"No que yo sepa"

En realidad si, tenía que ver conmigo y con mi vida durante la segunda guerra mundial, cuando perdí aquello que llamaba hogar, destrucción y más destrucción, a la vista de aquellos que solo cazaban porque podían y se les antojaba.

Mis manos se pusieron temblorosas mientras las levantaba para tapar mi rostro, en eso Eleonore sujeto mis manos y las guio hacia su cuello, la rodee con ellas mientras ella me pegaba a su pecho y me daba un beso en la frente.

"Cuando sea el momento, te escucharé... Estaré allí para ayudarte"

"Gracias Eleonore"

"De nada mi pequeña"

El sol hacia presencia en el cielo anunciando la llegada de un nuevo día, Nikita estaba preparando el café mientras Cleo la veía sentada desde la mesa de comedor, yo estaba en la habitación viendo las sábanas cubiertas de sangre.

Quite las sábanas de la cama y las lleve a meterlas en la lavadora junto a la pileta de agua, mientras veía como las sábanas daban vueltas y vueltas, no dejaba de pensar en esa pesadilla, aún no sabía que hacer o que quiere decir.

Mire mis manos que estaban envueltas en tiras de tela, mire hacia el techo mientras respiraba profundo, en eso la máquina lanzo unos pitidos que me desconcentró, estaba enjuagando las sábanas.

"Con que aquí estás"

"Nikita, que ocurre?"

"Deberías venir... Es Juan"

Fuimos de inmediato las dos, estaba proyectado en la pantalla en una videollamada, Eleonore había sincronizado su teléfono con este para apreciarlo mejor, cuando llegue pude verlo una vez más, me relajo saber que estaba bien.

"... Y por eso no apliqué a entrar a la Academia Superiora Nacional"

"Vienes de regreso entonces?"

"Ya quisiera, de inmediato papá me metió en el Colegio Franciscano, ni siquiera pudo meterme en el Instituto porque el curso ya está muy avanzado, por eso..."

"Juan!"

"Hola Yoko!, Que tal todo por allá?"

"Es aburrido cuando no estás"

"En serio?"

"Parece que le haces falta a Yoko, no vendrás al menos a consolarla?"

"TIA!"

El se puso rojo cuando Eleonore le dijo eso, seguramente yo me puse igual porque me sentía la cabeza caliente, en eso ella volteo a verme y riéndose volvió la vista hacia Juan que muy alerta veía hacia todos lados.

"Lo vez, hasta me la dejaste como tomate, no en serio, vendras en estos días?"

"Tía... No sea así"

"Pero así me querés chavalo, seguro que venís por aquí?"

"Lo negociare con papá"

"Dale pues, cuídate chavalo"

"Ok, cualquier cosa les llamo, adiós Cleo, Nikita... Yoko"

Con una pequeña sonrisa cerró la transmisión de la llamada, me acerque a Eleonore que estaba muy callada sosteniendo el teléfono, cuando toque su hombro ella volvió la vista hacia mi, veía sus lágrimas deslizar por sus mejías.

"Estás bien?"

"Nunca creí sentirme así, creo que me encariñé tanto de él que lo veo como si fuera mi hijo, no sabes que difícil fue contener mis lágrimas mientras hablaba con él"

"Así me siento yo"

Decía Nikita mientras caminaba hacia el sillón grande, se sentó junto a Eleonore y tomo sus manos, sus ojos estaban vidriosos y próximas a arrojar lágrimas.

"Todo el tiempo que he estado aquí, ustedes dos han estado conmigo, lo extraño mas que nunca... No sabes cuántas ganas tengo de abrazarlo, de hablar con él"

"Nikita... Eleonore, lo que importa es que está bien, está sano y salvo y puede que lo veamos aquí pronto, solo hay que tener paciencia"

"Gracias Yoko"

"De nada... Cleo, traerles agua"

"Sip!"

Las dejé a ambas desahogarse mientras Cleo iba por el agua para tranquilizarla un poco, me fui directo al baño, me acerque a la lavadora que ya tenía lavada las sábanas, mientras las secaba, lágrimas caían sobre la tapa.

"Tonto"

Dije mientras limpiaba mis lágrimas de mi rostro, luego me apoye sobre la lavadora mientras alzaba la vista y respiraba profundo, fui al lavamanos y me enjuague la cara para quitarme todo rastro de lágrimas.

"No entiendo porque lloro por tí si apenas te conozco"

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***