Capítulo XVII

Narra Camila.

Me despierto temprano y lo primero que ven mis ojos es a un hermosa Rayan Dormido con pestañas perfectas y no puedo evitar sonreír al recordar todo lo que pasó anoche, me levanto y camino hacia la ducha.

Me estoy duchando cuando siento unas manos rodear mi cintura que hace sobresaltar.

-Te asusté princesa.

-Rayan, si un poco.

Rayan me hala por la cintura acercándome más a su cuerpo y puedo sentir su miembro rosar con mis partes íntimas y un pequeño gemido se me escapa.

-Te deseo tanto Camila, se mía.

-Soy tuya Rayan.

Mis palabras fueron como un detonante para el y de inmediato sus besos subieron de intensidad, en el baño solo se escuchaban gemidos de ambos y mi excitación cada vez era más grande pero Rayan se detiene.

-¿Que pasa?

-Princesa ayer fue tu primera vez y no te quiero lastimar.

-No me lastimara.

-Estas segura de eso.

-Muy segura.

Me acerco a él y le susurró al oído.

-Hazme tuya. meto mi lengua en su oreja el muerdo el lóbulo de la misma.

Rayan baja su mano a mi intimidad y comienza a jugar con mi clítoris e introduce uno de sus dedos en mi vagina, mis gemidos no se hacen esperar.

-Mmm... ahh, Ra..Rayan hazme tuya.

-Se.. segura. dice entre gemidos.

-Muy segu... No terminó de hablar cuando Rayan introduce su miembro hasta los más profundo de mi vagina y yo soy un pequeño quejido de dolor.

-Lo siento princesa, pero no me pude contener.

-No te preocupes.

-Te lastime.

-Solo un poco pero ya pasó.

-Si quieres me detengo.

-No continua.

Rayan co cintura, me pega contra la pared sin dejar de enbestirme y me besa con desesperación.

-Te amo tanto princesa.

-Y yo a ti mi amor.

Rayan sigue con su penetración y cada vez es más excitante, siento un cosquilleo en mi interior.

-Oh.. más rápido.

El sonríe con picardía y cumple mi deseo y estalló en un órgano placentero y luego de unos segundos Rayan también, sale de mí y pega su frente con la mía.

-Gracias princesa.

-Porque me agradeces.

-Por hacerme el hombre más feliz del mundo.

-Tu también me haces la mujer más feliz del mundo.

Salimos del baño y nos cambiamos, me coloco un vestido ajustado a mi a mi cuerpo hasta la rodilla color rosa palo con mangas tres cuartos y unos zapatos deportivos color blanco, Rayan se coloca su traje color azul oscuro hecho a la medida.

-Princesa me encantaría quedarme contigo pero tengo que ir a trabajar.

-No te preocupe me quedaré aquí con Zel esperando a que llegues.

Rayan sonríe y me da un tierno y casto beso en los labios.

-Nos vemos en la noche princesa.

-Hasta la noche mi amor.

Este sale de la habitación y no pasan cinco minutos cuando Zel atraviesa la puerta.

-Cuéntamelo todo, que pasó anoche, funcionó los consejos que te di, le gusto el babydoll.

-Cálmate Zel dame un respiro.

-Pero cuéntame.

-Si, si le gusto y tus consejos funcionaron a la perfección. Digo con una sonrisa pícara.

Zel grita de emoción.

-Entonces ya voy hacer tía.

-Que exagerada eres no estoy embarazada.

-Usaron protección.

-He.. ahora que lo recuerdo no usamos protección.

-Entonces puedes estar embarazada, que emoción.

-Mierda, mierda no puede ser tengo que hablar con Rayan.

-No quieres tener hijos.

-No es eso, es que aún estoy muy joven, estoy estudiando y no sé si tú hermano quiera hijos.

-Entonces habla con el y decide.

-Pero no es seguro que este embarazada.

-No es seguro pero si no quieres estarlo por ahora será mejor que empieces a planificar.

-Me puedes llevar a la empresa de Rayan.

-Con mucho gusto te llevo.

Vamos en el auto y no sé cómo explicarle a Rayan que no quiero hijos en estos momentos.

-Llegamos Camí, pero no puedo entrar contigo, tengo que solucionar unos problemas de mi trabajo.

-No te preocupes, yo estaré bien.

Entró a la empresa y me dirijo hacia la recepcionista.

-Buenas tardes señorita en que le puedo ayudar.

-Buenas tardes necesito hablar con el señor Rayan Samour.

-Tiene cita.

-En realidad no sabía que tenía que agendar una cita para hablar con el.

-Son las reglas de la empresa.

-Le podría decir que yo estoy aquí, es algo urgente.

-Me dice su nombre por favor.

-Mi nombre es Camila Rodríguez.

-Ok, espere un momento.

Solo asiento y está llama por teléfono me imagino que a la oficina de Rayan.

-Buenas tardes señor disculpe que lo interrumpa pero hay una señorita buscándolo y dice que es urgente.

-Su nombre es Camila Rodríguez.

-Si señor yo le digo.

Cuelga el teléfono y me mira un con unos ojos de asombro.

-Jamas el señor Samour había dejado de trabajar para atender a alguien, dice que lo esperes aquí que ya está por bajar.

-Ok lo espero. digo con una sonrisa victoriosa.

No pasan más de dos minutos cuando Rayan aparece en el ascensor.

-Princesa que haces aquí, porque no me avisaste que venías. Dice dándome un beso en los labios.

-Disculpa es que no sabía que vendría.

-Que haces aquí, te sucedió algo.

-No es nada grave pero si tenemos que hablar de algo importante, ha y otra cosa no sabía que tenía que pedir una cita para hablar contigo.

-Si disculpa por eso son las reglas de la empresa pero ya mismo soluciono eso.

Están se acerca a la recepcionista y está lo mira con cara de susto y yo no puedo evitar reírme.

-Señorita fazilet le presento a la señora Camila Samour mi esposa.

Esta se puso muy nerviosa y no sabía cómo actuar.

-Muchi gusto señora, no sabía que usted era la esposa del señor Samour porfavor perdonarme.

-No se preocupe.

-Fazilet para la próxima hazla pasar cuando ella quiera si necesidad de anunciarla, entendido.

-Si señor, no se preocupe.

Subimos al ascensor y Rayan marca el piso número 13, llegamos a una hermosa oficina con un cristal detrás del escritorio por el cual se observa un hermoso paisaje de Ankara.

-Dime princesa que sucede.

-Rayan no sé cómo decirte esto.

-Que paso princesa me estás preocupando.

-No, no es nada de que preocuparse es solo que, anoche y esta mañana cuando hicimos el amor no usamos protección y es que no.

-Estas nerviosa porque puedes salir embarazada.

-Si eso, creo que es muy pronto para salir embarazada y no sé si tú quieras tener hijos conmigo.

-Princesa si para ti es demasiado pronto para tener hijos yo te entenderé pero yo sí quiero tener hijos contigo y no me parece mejor momento que este para ser padres.

-Estas seguro de eso.

-Claro que sí estoy seguro, mira tú eres la mujer que amo eres mi esposa la que quiero que esté conmigo para siempre y además necesito un heredero ya tengo 35 años y no tengo hijos.

-Rayan estás muy seguro de tener hijos conmigo.

-Muy seguro además tú me amas, yo te amo así que no vamos a divorciar.

-Esta bien te voy a dar un heredero.

-Enserio princesa.

-Si Rayan te voy a dar un hijo.

-Entonces esta misma noche comenzaremos con la tarea.

-Rayan porfavor. digo un poco apenada.

-Te amo Camila

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