Capítulo IX

Narra Rayan

No puedo creer que le dije la verdad a Camila pero ahora será más fácil enamorarla, sé que al enterarse del resto de la verdad va a sufrir mucho pero yo voy a estar hay para ella. Salgo del baño y Camila está mirando por la ventana.

-Que pasa princesa.

-Oh... Nada solo estoy viendo el paisaje de Estambul.

-No será la última vez que lo veas, tengo muchos negocios aquí pronto regresaremos.

-Oh no Rayan no quiero ver un avión por un buen tiempo.

Rió en tono burlón.

-Esta bien princesa.

Salimos de la habitación y yo no puedo evitar sonreír al ver a mi hermosa esposa, te vas a enamorar de mi Camila eso no lo dudes.

Vamos en el auto y Camila no ha dicho nada en todo el camino.

-Que piensas princesa.

-Rayan tengo algo que decirte.

-Te escucho.

-Rayan yo quiero terminar mis estudios, mira que solo me falta un semestre.

-Camí ahora eres mi esposa no necesitas estudiar.

-Rayan si lo necesito, necesito graduarme para ayudar a mi padre, por favor Rayan.

-Esta bien si eso te hace feliz.

Camila suelta un chillido de emoción y se abalanza sobre mí y me abraza.

-Disculpa Rayan me emocione.

-No te preocupes princesa.

Camila solo asiente un poco nerviosa y yo le brindó una sonrisa.

......................

Llegamos al aereopuerto y noto que Camila está nerviosa.

-Tranquila yo estaré a tu lado.

Ella solo asiente aún nerviosa y yo tomo su mano y Camila me mira directo a los ojos.

-Tu vas del lado de la ventana.

-Es enserio Camila. Digo riendo.

-Muy enserio.

-Esta bien. aún riendo.

El jet despega y no pasa mucho tiempo cuando Camila se queda profundamente dormida.

......................

-Camila llegamos, Despierta.

-Que paso.

-No paso nada solo que llegamos.

-Mm OK.

Yo solo asiento, bajamos del jet y Camila está pálida.

-Que tienes princesa.

-Nada, solo estoy un poco mareada por la altura.

-Vamos al doctor.

-No No, estoy bien ya se me pasará.

-Estas segura.

-Si estoy segura, no te preocupes.

-Bueno entonces subamos al auto.

Ella asiente y camina delante de mí, se nota muy nerviosa y estoy seguro que es porque va a conocer a mi madre, llegamos al auto le abrí la puerta, ella entra.

-Gracias Rayan.

-De nada princesa.

El chofer se pone en marcha y Camila cómo siempre va en silencio y mirando por la ventana.

Narra Camila.

Estoy muy nerviosa no se lo que me espera en casa de Rayan y tengo un mal presentimiento, espero que solo sea eso y no me valla a pasar nada. Voy mirando por la ventana y se me aparece rente a mi vista una lujosa casa muy grande con una hermosa entrada llena de árboles.

-Camí llegamos.

-Esta es tu casa.

-Si pero si no te gus....

-¿¡Que no me gusta!? Esta hermosa. digo interrumpiendo.

-Entonces bajemos y te la enseño.

-Ok.

Bajemos del auto y Rayan me guía por toda la casa, llegamos a un hermoso jardín con una fuente divina en el centro de este, Rayan se para frente a mi.

-Te gusto princesa.

-Si está muy bonita.

-Camí si no estás cómoda con que durmamos juntos, yo puedo dormir en otra habitación.

-No te preocupes ya dormíamos juntos en Estambul, y si vamos a fingir que nos amamos hay que hacerlo bien.

-Yo no estoy fingiendo Camila.

Sonrió nerviosa y agachó mi cabeza, Rayan levanta mi rostro con su mano y se acerca lentamente puedo sentir su respiración y su nariz chocar con la mía hasta que sus labios conectan con los míos, nuestros labios se mueven al compás, Rayan introduce su lengua en mi boca, encajamos a la perfección nos separamos por falta de aire, vuelvo a bajar mi cabeza y sonrió.

-Entremos a la casa princesa.

-Estoy muy nerviosa.

-No te preocupes, yo voy a estar a tu lado.

Rayan agarra mi mano entrelazando nuestros dedos, caminamos juntos hasta la puerta de entrada a la casa.

-Estas lista princesa.

-No pero acabemos con esto de una buena vez.

Entramos a la casa y es mucho más hermosa por dentro, tiene hermosas pinturas en sus paredes blancas con muebles en tonos pasteles y está llena de luces, los padres de Rayan y creo que su hermana estan parados en el medio de la sala de estar.

-Buenas tardes. Dice Rayan.

-Buenas tardes hijo que bueno que estés de vuelta. Dice su madre acercándose a el para abrazarlo y darle un beso.

-Mama ya porfavor. Dice Rayan apenado.

Su padre se acerca y le extiende la mano.

-Hijo me alegra que estés aquí.

-Gracias papá.

-Hermanito ya te extrañaba.

-Y yo a ti hermanita.

-Lo se, tú no puedes vivir sin mi.

-Estas loca. Dice Rayan riendo.

-Sabes que tengo razón.

-Si eso es lo que quieres creer.

-Bueno familia les presento a mi esposa Dice Rayan cambiando el tema de su hermana.

Extiendo mi mano hacia su madre y está la toma.

-Mucho gusto Camila.

-Mucho gusto Camila, soy Sila la madre de Rayan.

-Yo soy Zel la hermana de Rayan.

-Mucho gusto Zel. Le extiendo la mano pero está me abraza.

-Entonces tú eres la que va hacer que mi hermano cambie.

-Zel porfavor. Dice Rayan.

-Como así no entiendo, como que cambiarlo, contesto yo.

-Si que deje de ser amargado y estricto él nunca se ríe desde que...

-Zel ya vasta.

-Esta bien me quedo callada.

No logro entender muy bien que sucede pero prefiero no preguntar, a Rayan no le gustan las preguntas. Pasamos un rato hablando y ya está llegando la hora de la fiesta y estoy muy nerviosa.

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