Capítulo 16

...

Lejos de Rexulun, en la gran Inglaterra, posiblemente la nació más poderosa en cuanto al nivel de cazadores.

Raikam se encontraba en las oficinas de la gran organización en donde había logrado llegar para persuadirlos de pelear a su lado.

Sean tenía tranquila hasta que Sugo entró y se acercó hasta ella notoriamente nervioso.

— Al parecer... Ya llegaron a Rexulun los nuevos aliados. Atlantis, Bellator, y Dryadalis. Tenemos entendido que hay uno más por llegar . — Dijo Sugo. Raikam se noto molesta, se levanto y miró detrás de ella por la ventana la ciudad llena de luz y energía.

— No dejaré que ganen... Voy a acabar con ellos, no dejaré que más humanos... Parezcan ante esos monstruos..!.— Dijo Raikam.

— ¿Que haras?. — Preguntó Sugo.

— Atacaremos el bosque de las maravillas. Será un golpe bajo para Rexulum dado que dijiste una invitación llego a ellos no?. — Dijo Raikam. Sugo se noto sorprendido y solamente trago grueso.

— Pero... El bosque de las maravillas rechazo a Mary y además, ellos siempre se han mostrado buenos con los humanos — Dijo Sugo.

— Siguen siendo monstruos. — Dijo Raikam.

— No... no puedes hacer eso.. Piensa en que no es correcto!— Dijo Sugo algo alterado.

— ¿No es correcto?. Jaja, Sugo... Nada de lo que has echo hasta ahora es correcto, no quieras verte bueno ahora — Dijo Raikam caminando hasta el.

— Son... Personas inocentes... — Dijo Sugo agachando la cabeza.

— Y a cuantas personas inocentes no mataste antes..?— Preguntó ella. Sugo trago grueso, sintiendo un nudo en la garganta, se notaba realmente devastado.

— Todo lo hice por ti... Por que te amo. — Dijo Sugo. Raikam tomo sus mejillas con sus manos y sonriendo se acercó a besarlo.

— Y yo a ti. Así que por ese amor que me has jurado... Haz lo que te digo — Dijo Raikam alejándose para caminar hacia la puerta.

— ¿Acaso no he echo suficiente?...— Preguntó casi sollozando.

— No, aun falta mucho. — Dijo Raikam saliendo de allí.

Sugo trago saliva y después puso su mano sobre su pecho.

— ¿Por que duele tanto amarte...?— Dijo Sugo mientras una lagrima caía por su mejilla. Miro sus manos mismas que el veía manchadas de la sangre de inocentes personas...

...

Raikam por otro lado salió a la ciudad, misma que atravesaba un alegre fiesta. Era vísperas de noche buena, por lo que había gente por todos lados riendo y cantando.

Con una sonrisa Raikam admiraba todo, los niños que jugaban y corrian por las calles, los adultos que celebraban y reian con sus familias, todo lo que ella extrañaba.

— Voy.. a protegerlos. — Dijo Raikam.

...

Al día siguiente...

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Durante la mañana, Mary desayunó en su habitación. En el comedor; Priscilia, Ezequiel, Roxana, Trixiaana y Angelina; comian confundidos sin saber por qué no había venido.

— Quizá se siente mal.?— Preguntó Angelina.

— últimamente esta mal todo el tiempo. Ya ni siquiera la reconozco. — Dijo Priscilia.

— La otra noche, pasaba por su habitación y la escuché gritar como si hablara con alguien.. entre y ella estaba... muy alterada. Parecía que decía que alguien tomaría el control de ella. — Dijo Ezequiel.

— Que le estará pasando...?— Preguntó Priscilia preocupada.

— Hihi~... Es su Dualidad~ por fin rindiendo frutos~ — Dijo Kanack con una risilla de por medio.

— ¿De que hablas...?— Preguntó Priscilia.

— Todos los zorros de nueve colas constan de una Dualidad, dos personalidades. Siempre una esta al frente, mientras que la otra se mantiene oculta y se construye a partir de sus eventos "traumaticos". En este caso~.. Hihi~... La rabia~... La ira, la sed de venganza~ HAHAHA!. — Dijo Kanack riéndose.

Todos los demás se miraron sorprendidos, sabian que eso ya podría traer serias consecuencias...

...

Mary por otro lado estaba en su habitación, estaba enojada con su cabeza por jugarle tan malas pasadas con su doble personalidad.

— Callate... No te escucharé...— Dijo Mary temblando mientras se apoyaba sobre una mesa.

...

Pasando algunas horas; las alarmas de que alguien nuevo había llegado, comenzaron a sonar. Mary miro a la distancia y sabía de quienes se trataban.

Eran los del reino de Dryadalis...

...

Los del reino de Dryadalis comenzaron a entrar, en un caballo en medio de varios guardias se encontraba Daha quien miraba el enorme árbol con una gran confusion.

— Ese árbol... — Dijo Silfide a Daha que venía a su lado también miraba al árbol con nervios.

— Es el que se menciona en los escritos del hechicero difunto... Tambien es idéntico al que pinto. — Dijo Daha.

— Eso significa que... Se está cumpliendo la profecía?.— Dijo Silfide mirandole. Daha trago saliva, temía que asi fuera.

— No lo se... Pero ahora más que nunca... Creo que deberemos de tener cuidado. Si esto es lo que decía la profecía, el fin de los tiempos está cerca — Dijo Daha.

Finalmente llegaron hasta las puertas del palacio en donde los guardias abrieron las puertas para ellos. Daha y Silfide acompañados de sus guardias entraron siguiendo la alfombra, frente a ellos se encontraba el trono con un vitral en forma de zorro detrás de ellos y allí Mary estaba sentada.

Al verla, ambos se sintieron más que sorprendidos, esa escena era perfecta a la que se encontraba en lo que fue pintado por el hechicero de Dryadalis como una profecía.

Además de eso, Daha sintió una conexión con ella; la misma que sentía con Kalo de quien se había imprimado. Pues al igual que a los lobos, a los elfos Dragón tambien les pasaba esto.

— Rey Daha de Dryadalis, es un placer tenerlo aquí. — Dijo Mary con una pequeña sonrisa...

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