El Nacimiento...

El Nacimiento.

Aquella mañana Nayeli amaneció con algunas contracciones, acompañados por Silvia  salieron  rumbo a la clínica. Horas más tarde el médico salía del quirófano. Era inevitable el engendrito nacería, había preferido mantenerme quieta, ya que Comandante Faverman había estado investigando sobre el accidente de la Belleza Imperial y aunque no tenia nada en concreto había dado con la camioneta, la cual tenía denuncia de robo por Sergio, por lo tanto este había estado escondido

.- ¿Señor Sanmillán?

ALEJANDRO.- ¡Si…!

SILVIA.- ¿Ya nació?

ALEJANDRO.- ¿Qué  es doctor?

.- Es una hermosa niña ¡muchas felicidades!

ALEJANDRO.- ¡Una niña…! ¡Una niña! ¡Dios gracias!

SILVIA.- ¡Hijo felicidades soy abuela!

ALEJANDRO.- ¡Soy padre…! ¡Soy papá…! ¡Y usted abuela!

SILVIA.- ¿Ya podremos verlas doctor?

.- En cuanto pasen a la señora a una habitación podrán pasar con permiso.

ALEJANDRO.- ¡Gracias Doctor!

Minutos después entraron a la habitación de Nayeli, fueron a llevar a la pequeña. Alejandro la tomo en sus brazos a la pequeña, estaba extasiado al ver a su pequeña

ALEJANDRO.- ¡Mi amor  no sabes lo feliz que me has hecho!

SILVIA.- ¡Es hermosa hija, se parece a ti…! Es como si hubieras vuelto a nacer en ella

NAYELI.- ¡No yo digo que se parece a su  padre…!

ALEJANDRO.- ¡No amor…! ¡Es igualita a ti…!

SILVIA -. ¿Y a todo esto como se va  a llamar?

ALEJANDRO.- Como su madre Nayeli…

NAYELI.- ¡No…! De ninguna manera quiero que se llame como tú

ALEJANDRO.- ¿Alejandro?

NAYELI.- No tontito…

SILVIA.- ¿Alejandra?

NAYELI.- Alexandra…

ALEJANDRO.- Me gusta… Alexandra Sanmillán…

En ese instante tocaron a la puerta Silvia fue abrir era Armando con un ramo de rosas blancas las preferidas de Nayeli, junto con unos chocolates. Saludo a Silvia, le dio una palmada en el hombro a Alejandro, en señal de felicitación observo fijamente a la pequeña y después se acercó a  Nayeli la cual beso en la frente.

ARMANDO.- ¡Es igualita a ti  Nayeli, ni como negarlo…!

ALEJANDRO.- Ya ves amor…

ARMANDO-. Sin duda alguna esta princesa será la próxima Belleza Imperial…  ¡Muchas felicidades a los dos!

Nayeli.- Gracias  y espero que el día de mañana se decida por alguna otra carrera y no por la de modelaje…

SILVIA.- Mira nada mas no quieres que tu hija sea  modelo y yo por más que te roge para que desistieras…

ALEJANDRO.- ¡No…no! Modelo no por favor…

Toque a la puerta de la habitación se abrió y el ambiente se sintió algo  pesado en cuanto entre, pude ver el enfado de Alejandro con mi presencia, tenía que conocer a su engendrito

SUSANA.- ¡Amiga! ¡Muchas felicidades!  Por… tu bebé…

NAYELI.- ¡Gracias es una nena!

SUSANA.- ¡Que gusto Alejandro felicidades… Silvia…! ¿puedo cargar a mi sobrina?

NAYELI.- ¡Amor…!

Alejandro no quería prestarme a la niña, se que era algo que lo incomodaba, tanto como el hecho de que quisiera hacerme tía de la niña, no puedo evitar prestármela, seguramente pero para sus adentros pensó que no iba a dejar que la niña me llamara tía y claro Alexandra jamás me diría  tía.

SUSANA.- ¡Que linda es tu hija querida…! ¡Es… como… si tú hubieras nacido en ella…!

SILVIA.- Ya ves hija, todos coincidimos en lo mismo…

NAYELI.- Yo que digo que se parece a su padre…

SUSANA.- No a él no se parece en nada… pareciera que no es el padre…

ALEJANDRO. - ¡Pero lo soy!

En cuanto tuve a la mocosa en mis brazos, se soltó a llorar, intente arrullarla pero la escuincla parecía que no dejaría de llorar nunca, en cuanto se la regrese a su padre dejo de hacerlo. Tal vez sintió todo el desprecio que no solo sentía por ella si no por su madre.

SUSANA.- No sabía que regalarle a tu  bebé por qué no sabía si iba hacer niño o  niña… pero mañana mismo mando que instalen una casa de muñecas en tu jardín…

NAYELI.- ¡Gracias no te preocupes…!

SUSANA.- ¡Si no consiento yo a mi sobrina quien…!

Nayeli.- Si  tienes la razón y siempre lo hablamos recuerdas…

SUSUANA.- Si… ¿Y Dessireé ya sabe que eres madre?

NAYELI.- ¿No has hablado con ella?

SUSANA.- ¡No hemos podido coincidir tú crees!  Supongo que ha de ser  la diferencia de horarios, cuando me llama estoy fuera y cuando la llamo no la encuentro. Seguramente por que anda cuidando que su maridito no ande buscando tipejos…

NAYELI.- Me comento alguna vez que no ha recibido respuesta a sus recados…

SUSANA.- Debe estar exagerando pero hoy en la noche le llamo… ¿Pero y como esta? ¿Cuándo viene?

NAYELI.- Pues  ahora no puede viajar…

SUSUANA.- ¿Su  maridito, sigue de volado buscando lo que ella no puede darle aunque quiera?

NAYELI.-  De eso no se que esta desesperada por que aun no ha podido  embarazarse…

SUSANA.- Pobrecita, como lo va hacer si él no la toca, lo que toca son hombres lo que debería es divorciarse su marido es… buscarse un hombre de verdad en fin

NAYELI.- Esos son rumores pero si le hablas no vayas a decirle nada deja que ella te cuente…

SUSANA.-  No son rumores lo vi coqueteando con un tipo el día de tu boda y Armando es testigo pero no te preocupes… pensándolo bien no le voy  hablar…  en unos días más voy air a Paris, y  le doy la sorpresa…

NAYELI.- ¿Vas a Paris?

SUSANA.- Si Armando me invito a conocer La Casa Millán, tal vez si me convence haremos negocios…

NAYELI.- Seria fabuloso que ustedes hicieran Negocios…

ARMANDO.- Pues  espero convencerla…

SUSANA.- Bueno tengo que irme y otra vez muchas felicidades a los dos es hermosa su hijita…

ARMANDO.- ¿Puedo acompañarte qué tal si  comemos juntos?

SUSANA.- Me encanta la idea, te espero abajo querido no tardes…

NAYELI.- ¿Parece que el señor Millán está enamorado?

ARMANDO.- No… se es una mujer que me encanta, una mujer hermosa…

SILVIA.- Pues a ella no le eres nada indiferente Armando y es una buena muchacha.

ALEJANDRO.- ¿Buena?

NAYELI.- ¿Por qué  siento que no te cae bien Susana?

ALEJANDRO.- No se, hay algo que no me convence de ella…

SILVIA.- No  Alejandro, es una buena muchacha, solo es que ha sufrido mucho la pobrecita estuvo a punto de casarse y la madre le armo un teatrito  ese día y esa noche se le muere la mamá

NAEYELI.- Es cierto sé que ha sufrido mucho su madre nunca la quiso…

ARMANDO.- Solo tienes que tratarla más Alex…

ALEJANDRO.- No… no  me interesa, no me cae amor, no la quiero cerca de nosotros no quiero que diga que es tía de Alexandra…

NAYELI.- ¿Qué pasa Alejandro?

ALEJANDRO.- ¡Nada amor, solo  no nos caemos bien y punto!

NAYELI.- ¿No se caen bien? Estas hablando por los dos, ella jamás me hecho algún comentario sobre ti, siempre es amable y educada contigo.

ARMANDO.- ¡No debes prejuzgar dale una oportunidad!

ALEJANDRO.- ¡Es una mujer falsa y tu no deberías insistir con ella vas a sufrir a su lado!

NAYELI.- ¡Hablas como si la conocieras…! ¿A caso la conoces de algún lado?

ALEJANDRO.- ¡No… no…! Ya olvidemos el tema ya no quiero hablar de Susana.

Alejandro se sentía nervioso, sabía que había hecho mal en ocultar esa parte de su pasado que lo unía conmigo, en su desesperación intento contárselo a  Armando, pero se dio cuenta que su amigo ya comía de mi mano, no le creería, por lo que prefirió seguir callando ocultando nuestro pasado

Días después del nacimiento de Alexandra,  era bautizada, aunque hubo una discusión entre ellos a la hora de elegir a los padrinos.se trataba nada más que de Armando y yo, Alejandro no tuvo argumentos para evitar que yo fuera la madrina de su hija, prefirió   seguir callando sin imaginar que  todo era una bomba de tiempo la cual estaba el lejos el día en que reventara.

En aquellos días empezaba a sonar en las noticias el apodo de la Reina como una de las principales cabezas del narcotráfico, si yo era la Reina, nadie se imaginaba que en el dobladilló de mis diseños que exportábamos a USA pasábamos la cocaína. Todo comenzó a dárseme,  dinero, poder y amor,  si el amor había vuelto a tocar la puerta de mi corazón, lo sabía lo intuía no tenia duda alguna de eso y gustosa lo deje entrar, pero no por que estuviera enamorada de él, si no porque me convenía en todos sentidos,  era un hombre millonario, bastante guapo, quien mejor que  él para tener un hijo. Si Armando me abriría las puestas de la fama en Paris, me daría prestigio le daría un nombre a Velarde´s  y sobre todo una inmensa fortuna, teniendo como su único heredero a su futuro hijo, si todo lo tenía fríamente calculado, pero aun tenía que hacerme del rogar un poco más, tenía que tener a Armando completamente loco por mí.

Fue un viaje corto a Paris, Armando intento muchas veces seducirme, pero no  consiguió mas allá de un beso,  Regrese él tuvo que quedarse por cuestiones de trabajo, tenía muchos pendientes en Paris necesitaba dar fin a muchas cosas porque quería radicar definitivamente en la ciudad de México.

Habían pasado casi dos años  era tiempo que todo terminara de cuajarse con Armando estaba harta de que Nayeli me restregara lo feliz que era, solo imaginarlo me volvía loca me sentía cansada de seguir fingiendo con ella, sentía que no era yo, que no era la Susana que realmente me había propuesto ser, y aunque podía perderlo todo con Armando, iba a jugármelo todo.

Sin pensar mucho tomo el sobre que tenía en un cajón de su escritorio, había pensado utilizar a aquellas fotos tiempo a tras pero a raíz de que le había pedido ser la madrina de Alexandra decidí no utilizarlas, pero ser madrina de esa cosa no era algo que pudiera ablandar, no había espacio para sentimentalismos baratos en mi corazón, así que esa mañana salí rumbo a la mansión Sanmillán… dispuesta a todo. Ahí Juana me llevo hasta el jardín donde se encontraba Nayeli con Alexandra…

NAYELI.- ¡Susana que sorpresa! ¿Cómo estás? ¡Mira hija tu madrina!

SUSANA-. ¿Qué grande esta?

NAYELI.- ¿Te ofrezco algo? ¿Te pasa algo te veo rara? ¡Extraña…!

SUSANA.- ¡No se… como empezar…!

NAYELI.- ¿Qué ocurre? Sabes que cuentas conmigo para lo quesea…

SUSANA.- ¡Te juro que ya no puedo más con esta farsa! te juro que intente no caer pero es algo más fuerte que yo… yo sé que somos como hermanas y por eso me duele pero…

NAYELI.- ¿Qué pasa me estas asustando?

SUSANA.- ¡Lo ame era el amor de mi vida…! Hace tiempo unas semanas desde que supo que Armando y yo vamos a formalizar, me busco, me propuso retomar lo nuestro…

NAYELI.- ¡Sigo sin entender!  ¿Te encontraste con aquel hombre con quien te ibas a casar?

SUSANA.- ¡Si…!  Sabes que me hice aun lado  cuando ¡Tú apareciste!

NAYELI.- ¿Qué…? ¿De qué carajos estás hablando? ¿Yo que tengo que ver?

SUSANA.- ¡Ese hombre es Alejandro…! ¡Nos conocimos en New York hace años! Antes de que tú aparecieras… mi madre me arruino la vida, le enveneno el alma hasta nuestro hijo perdí por…

NAYELI.- ¡No…no… puedes estar hablando en serio…!

SUSANA.- ¡Nos amábamos!  Íbamos a casarnos, pero creyó en la infamia de mi madre. Bofetearme no va a borrar mi pasado con tu marido…

NAYELI.- ¿Por qué me haces esto?

SUSANA.- ¡Desde un principio le pedí te contara la verdad!, se lo pedí desde el día en que nos rencontramos en el desfile… y él me pidió que callara me amenazo con golpearme si yo te decía algo

NAYELI.- ¡Mientes tienes que estar mintiendo! ¡No puede ser verdad!

SUSANA.- ¡Ahora quiere que vuelva hacer su amante, su mujer!

NAYELI.- ¡No… mientes…!

Le avente las fotos de nosotros juntos en New York, de aquellos días en que fuimos felices, donde todo parecía, estar a mi favor.

SUSANA.- ¿Qué mas prueba quieres?

NAYELI.- ¿Cómo pudieron burlarse a si de mí? ¿Cómo fuiste capaz? ¡Éramos hermanas! ¡Qué estúpida fui…!

SUSUANA.- ¡Fuiste tú la que se metió en medio de nosotros! Alejandro fue mío antes que tuyo…

NAYELI.- ¿Y por qué diablos no me dijiste quien era Alejandro?  Yo me hubiera hecho a un lado yo habría sabido compórtame, no como tú…

SUSUANA.- ¡Tienes que entender…! Yo…

NAYELI.- ¡Cállate quieres…! no quiero escucharte mas, no quiero saber de ti en mi vida lárgate de mi casa…

SUSANA.- ¡Te juro que…! Lo único que deseo es que deje de acosarme

NAYELI.- ¡No me jures nada…! Por mi no te preocupes querida yo no voy a mendigar el amor de Alejandro… Yo  no voy a rebajarme como tú, no voy a retenerlo a la fuerza eso te lo juro ahora solo lárgate de mi casa…

Me fui contenta si con una bofetada, vaya que la infeliz golpeaba duro pero no importaba no sabía que alcances tendrían esas fotos, solo sabía que conociendo como conocía a Nayeli ella echaría de su lado a Alejandro. Sabía que él me buscaría, aunque solo para reclamarle pero con el hecho de saberlo lejos de Nayeli era más que suficiente.

El día fue muy largo para Nayeli, le dio infinidad de vueltas al asunto  tratando de buscar una respuesta pero aun que la hubiera, sabía que no había marcha atrás.

Por fin el día había terminado, Alejandro llegaba a su casa después de un día pesado de haber batallado con algunos proveedores. Se acercó a Nayeli trato de saludarla con un beso, ella lo esquivo…

ALEJANDRO.- ¿Y la niña?

NAYELI.- Ya está dormida…

ALEJANDRO.- ¿Qué pasa amor, que tienes? ¿Por qué te siento molesta?

NAYELI.- ¿Hasta cuándo ibas a seguir viéndome la cara de estúpida?

ALEJANDRO.- ¿Qué? No te entiendo… ¿De qué hablas?

NAYELI.- ¿Cuándo es que pensabas abandonarnos?

ALEJANDRO.- ¡Abandonarlas! ¿Me quieres explicar de qué estás hablando?

NAYELI.- ¡Que sínico y cobarde eres Alejandro! ¡Ya sé que tú y Susana estuvieron a punto de casarse que iban a tener hasta un hijo…!

ALEJANDRO.- ¿Quién te conto?

NAYELI.- ¡Quien! me conto ¿Quien más sabe que tu y ella fueron amantes?

ALEJANDRO.- ¡Amantes! ¡Por Dios ella y yo no somos amantes!

Nayeli tomo las fotos y se las aventó… en aquellas fotos, tan solo mostraba una parte de nuestra historia, suficiente para que quien las viera, se percatara de que habíamos estado muy enamorados..

NAYELI.- ¿No son amantes?  ¡Y entonces estas malditas fotos…!

ALEJANDRO.- ¡Esto es una maldita mentira de Susana…!

NAYELI.- ¿Cómo sabes que fue ella quien me dio estas fotos?

ALEJANDRO.- ¡Porque solo ella sería capaz de hacerlo te juro que es mentira…!

NAYELI.- ¡Tan poco hombre eres! ¡Vas a negar! ¿Que ya se conocían?

ALEJANDRO.- ¡No…!

NAYELI.- ¿Cómo pudieron? ¿Cómo pudiste hacerme esto?

ALEJANDRO.- Mi único error es…

NAYELI.- ¡Cállate…! No quiero saber más, con lo que ella digo fue más que suficiente…

ALEJANDRO.- ¡No…!

NAYELI.- ¡Voy hacerte las cosas fáciles Alejandro!  No pienso retenerte lárgate con ella si es lo que deseas, quiero que me des el divorcio…

ALEJANDRO.- ¿Qué? Así de fácil…

NAYELI.- ¿Qué quieres? que me hinque y te suplique que no nos dejes, no  Alejandro  y si tienes razón no tienes por qué irte de tu casa la que se va soy yo…

ALEJANDRO.- ¡No voy a dejarte ir…!

NAYELI.- ¿Qué quieres entonces? Voy a dejarles el camino libre para que sigan...

ALEJANDRO.- ¡Necesito que me escuches!

NAYELI.- ¿Para qué? Tú y ella pueden irse al diablo juntos  ¡Haaa…!

Alejandro la tomo del brazo a Nayeli y la jalo hacia el… podía darse perfectamente cuenta, que haberse callado, era el peor error, que no hay nada más fuerte que la verdad, la verdad libera de muchos problemas, pero era tarde para arrepentimientos, haberse callado lo ponía al filo de perderlo todo.

ALEJANDRO.- ¡Vas a escucharme  quieras o no! ¡así como dejaste  que ella te envenenara el alma, así de la misma forma vas a escucharme…!

NAYELI.- ¡Suéltame…!

ALEJANDRO.- ¡Que te calles con un carajo! Si  es cierto que un día iba a casarme con ella pero no por amor, si no porque  que estaba embarazada yo…

NAYELI.- ¡Ya lo sé, ya sé que…!

ALEJANDRO.- ¡Con mil demonios cállate!  ¡Solo fue una vez la que estuvimos juntos! Eran muy inmaduro no estaba preparado para un embarazo con ella ni con nadie. Fue un impulso, sexo  de una borrachera, de una noche, jamás le hable de amor, si la pasábamos bien, éramos amigos… era mi hijo el que estaba en juego, no iba a desentenderme por mi estupidez,  el día de nuestra boda apareció un tipo reclamando la paternidad de mi hijo,  lo único que hice si fue huir, ella sigue asegurando que era mío por desgracia lo perdió no hay forma de probarlo, si hay algo de lo que me tenga que arrepentir, es eso haberme metido con ella, tal vez haya sido un cobarde, por salir huyendo, no voy a mentirte, me aproveche de esa confusión para largarme, me fui a Paris, a ti te conocí mucho después de eso, no tenía la maldita ida que tu y ella eran amigas o que al menos podían conocerse si quiera, el día del desfile no percate, era muy diferente a la mujer que había conocido, yo solo pensaba en ti en proponerte matrimonio, me di cuenta hasta que nos presentaste, me dio miedo no supe como reaccionar…

NAYELI. – Debiste haberme dicho la verdad desde un principio, me mentiste, ahora entiendo porque no te caía bien, porque tu repulsión hacia ella, el día que fue a ver a la niña, te lo pregunte, y te atreviste a negarlo… te pedí una razón para no pedirle que fuera la madrina de nuestra hija y te callaste…

ALEJANDRO.- fue la sorpresa que no supe reaccionar y  al ver que ella tan poco se lo esperaba caí en su juego, sé que en ese momento debí decirte la verdad pero también fue el miedo de perderte, tú solo tú eres el amor de mi vida…

NAYELI.- ¿Y las fotos?

ALEJANDRO.- ¡Porque éramos amigos, éramos vecinos en el mismo edificio de apartamentos, un día tropezamos, cuando yo entraba y ella Salía, fuimos varias veces a comer, al café, llegue a ir por ella a la escuela de diseño, te repito mi único error es no haberte dicho que ya la conocía, esa noche yo jamás, óyelo bien jamás volvería a cometer la estupidez de meterme con ella…

NAYELI.- ¡No debiste callar!

ALEJANDRO.- Lo sé  y no sabes cómo me arrepiento por eso fue que intente contarle la verdad a Armando para evitar que ella le contara su versión… pero me di cuenta que esta vuelto loco por ella…

NAYELI.- ¡Dios mío…!   Ella asegura que desde que sale con él, la has vuelto a buscar que la acosas… que quieres regresar con ella…

ALEJANDRO.- ¡Mentira como puedes dudar de mi me duele que desconfíes así de mí…! Me preocupa Armando es mi amigo pero esta ciego…

NAYELI.- ¡Entiéndeme! ¿Qué hubieras hecho tú?

ALEJANDRO.- ¡No se  amor! Tal vez dejar que me contaran la otra parte de la historia antes de tomar una decisión como la tuya… con permiso que pases buenas noches…

NAYELI.- ¡Alejandro…!

ALEJANDRO.- No amor, no debiste dudar  de mi en esas malditas fotos no hay nada comprometedor, lo único que prueba es que si ya nos conocíamos, mi único error solo fue callar, hoy no quiero saber más  nada estoy cansado, dolido necesito estar solo… voy a dormir en otra habitación…

Aquella fue la primer y única noche que durmieron separados aunque realmente lo que hicieron fue dormitar, ambos no deseaban otra cosa más que amaneciera, él iba a buscarme necesitaba ponerme en mi lugar según él… ella creía en la versión de Alejandro verlo a los ojos sabia que ese hombre no tenia amor para nadie que no fuera ella, se sentía culpable pero con la cabeza caliente, se había dejado llevar.

Vaya que había sido una noche larga pero en cuanto el amanecer llego  Alejandro no espero ni un segundo más, también fue la primera vez que salió sin despedirse de su mujercita, Salió muy temprano de la casa sin desayunar si quiera… fue directo a la mansión Alcántara.

ANA.- ¡Alejandro que sorpresa!

ALEJANDRO.- ¿Dónde está Susana? Necesito verla…

ANA.- ¡Esta desayunando en el jardín pasa te llevo…!

SUSANA.- ¡Mira nada mas quien está aquí nana!  ¡Sí que es una sorpresa pero anda nana que le sirvan de desayunar…!

ANA.- En seguida…

ALEJANDRO.- ¡No se moleste Ana! Voy a estar lo suficiente nada más…

SUSANA.- Déjanos solos nana…

ANA.- ¡Con permiso…!

Alejandro se acercó me tomo por los brazos me  levanto de la silla, pude ver ese fuego en sus ojos su rabia sus deseos de querer matarme, y más vale que lo hubiera hecho se hubiera ahorrado mucho dolor…era tanta su rabia que me aventó sin poder evitarlo fui a dar al suelo.

SUSANA.- ¡Me lastimas! ¡Suéltame!¡Imbécil…! ¡Poco hombre…! ¿Cómo te atreves?

ALEJNDRO.- ¡Porque soy un hombre no te pongo una mano encima! como mereces… porque soy un hombre es que no voy a permitirte quieras pasarte de lista, eres una estúpida Susana…

SUSANA.- ¡Deja de insultarme! Aun no tienes idea de lo que soy capaz…

ALEJANDRO.- ¡Por Dios Susana  yo pensé que eras más inteligente! ¡No pensé que fueras tan estúpida…!

SUSANA.- ¡Basta! Lárgate de mi casa…

ALJANDRO.- ¿Cómo pudiste decir que yo te he vuelto a buscar?  ¡Crees que yo Alejandro Sanmillán podría volver a equivocarse con una mujer como tú! ¡Si es asco es todo lo que puedes inspirarme!  ¡no sé cómo es que Armando puede fijarse en una mujer como tú…!

SUSANA.- ¡Cállate… cállate…!

ALEJANDRO.- ¡Solo voy a decírtelo una vez, no te quiero cerca de mi familia! ¡Porque entonces no voy a responder maldita loca…!

SUSANA.- ¡No estoy loca,  voy   a decirle  Armando  que…!

ALEJANDRO.- ¡Que vas a decirle maldita loca! ¿Las mismas estupideces que a Nayeli? ¡Hazlo! ¡Sirve que abre los ojos y termina de darse cuenta la basura que eres!

Sabía perfectamente que eso no me convenía serio perder el camino andado con Armando y no podía darme ese lujo. Necesitaba no solo un hijo suyo, si no que darme con toda su fortuna.

SUSANA.- ¡Esto no termina aquí Alejandro juro que vas apagármelas!

ALEJANDRO.- ¡No me amenaces!  ¡Soy yo el que jura por Dios que haces  algo más en contra de nosotros y te mato…!

SUSANA.- ¡Lárgate… de mi casa! ¡Qué esperas lárgate!

Reventaba de coraje, subí a mi habitación para cambiarse e irme a Velarde´s pensando en que, ahora más que nunca Alejandro tenía que sufrir tenía que llorar lagrimas de sangre; termino de vestirme para irme al grupo textil.

Para colmo de mis males Nayeli no iba aquedarse tranquila le pidió a, a Martin, que tuviera listo el coche por que iría  al grupo textil Velarde´s.

LAURA.- ¡Nayeli buenos días!

NAYELI.- ¿Dónde está  Susana?

LAURA.- ¡Debe estar en su despacho…! ¿Isabel esta Susana?

ISABEL.- Pidió no ser molestada por nadie…

LAURA.- Pero Nayeli… no es nadie, pasa…

NAYELI.- Gracias…

Nayeli se en camino hacia el despacho de Susana, entro aventando las puertas… y vaya que sacaría las garras, me había equivocado en subestimarla pensé que era tan frágil, como una princesita de cuento.

SUSANA.- ¿Qué demonios…?

ISABEL.- Perdón señora yo…

SUSANA.- ¡Eres una imbécil Isabel lárgate, déjanos solas eso también es para ti Laura… lárgate!

NAYELI.- No sé en qué momento dejaste de ser… aquella mujer, buena aquella que siempre buscaba de hacer algo por los demás, ¿Qué te paso porque hoy eres esto?

SUSANA.- ¿Qué quieres aquí?  ¿No te fue suficiente con lo de ayer?

NAYELI.- ¡No te confundas Susana, no soy tan estúpida como crees! ¡Aquí la  estúpida y desgraciada eres tú…!

Era el momento de devolverle su bofetada pero Nayeli era una fiera y no iba aquedarse con los brazos cruzados me regreso esa bofetada. Fue una sorpresa, no conocía esa cara de Nayeli, vaya que iba a pelear con garras y dientes por su hombre.

SUSANA.- ¿Cómo fue que te dejaste en volver por él?

NAYELI.- Si tienes la razón no sé cómo fue que me deje en volver pero por ti… por estas malditas fotos no demuestran nada eran amigos él jamás te hablo de amor…

SUSANA.- ¿Y entonces? por que fue hoy Alejandro…

NAYELI.- ¡No más Susana! No voy a dudar de mi marido  otra vez, si estoy aquí es solo para que te des cuenta que tus malditos enredos no resultaron…

SUSANA.- Jajaja que lastima me das…

NAYELI.- ¡Aquí la única que da lástima eres tú!  ¡Quien tiene que mendigar el amor de un hombre eres tú! Él nunca te hablo de amor y lo sabes deja de engañarte, si iba a casarse era por que querías achacarle el hijo de otro…

SUSANA.- ¡Cállate… cállate…! Era hijo de Alejandro y por él lo perdí…

NAYELI.- ¡No quiero volver  a saber de ti…! No te acerques a mi casa, porque no respondo…

SUSANA.- ¡Lárgate… si no quieres que llame a seguridad…!

NAYELI.- ¿Por qué  no me sacas tú? ¡Atrévete anda para que sepas quien soy de que soy capaz por defender lo mío!

SUSANA.- ¡Maldita seas…! ¡No me retes  por qué realmente no conoces…! Eres tú la que no sabe de lo que soy capaz!

NAYELI.- ¡No me amenaces! ¡No te tengo miedo, por mi hombre, por mi familia soy capaz de todo, capaz de dar la vida!

SUSANA.- Jajaja… ¡Qué bueno que estés dispuesta a dar tu vida! ¡Que así sea  entonces!  ¡No tienes la menor  idea de quién soy y de lo que soy capaz! ¡No conoces mis alcances! ¡Pero te juro que lo vas a lamentar! ¡Lárgate ahora que puedes, no retes a tu suerte no se que en una de esas n vayas a salir viva de aquí!

NAYELI.- ¡Qué pena me das, hasta nunca Susana…!

SUSANA. – ¡No sientas pena por mí, porque no soy yo la que tiene los días contados!

NAYELI. - ¿Te atreves a amenazarme?

SUSANA. - ¡No soy una mujer de amenazas de eso puedes estar segura!

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***