Capítulo 17

—¡Keila no entiendo, sí es una broma, caí en ella! —Sonrió no muy convencida que lo sea.

—¡Por Dios Stella! eres muy ingenua de verdad. Yo nunca he querido ser tu amiga, jamás sería amiga de alguien como tú... — lo espeta con rencor.

—¿Entonces por que te hiciste pasar por una? —mi corazón se siente roto, por que siempre está luchando por conseguir buenas amistades, pero tengo oportunidad de sólo conseguir gente falsa.

—Sólo quería burlarme de ti, quería saber que era tenerle lastima a una pobre venezolana, que huyo de su país, porque pasaba hambre. — miente ¿pero no entiendo por qué?

—¿Qué dices? Yo nunca he pasado hambre y tampoco huí de mi país. —le digo sabiendo que miente. Observo la fría noche y diviso en medio del hermoso jardín, una fuente de agua con un delfín azul de marfil, debe ser magnífico estar aquí sola o acompañada, pero en este caso no es para nada bueno estar aquí.

—¿Qué me dices de las ultimas veces que me pedías dinero para comprar comida por que en tu casa no tenías? —miente —Es más James, se canso de ti, se fue con Jennifer, la verdad tu sólo fuiste un simple objeto, nadie querría estar contigo es más... — veo que se voltea y se aleja a unos cuantos pasos. Veo un círculo de gente a mi alrededor con tobos, espero no sean de agua ni de pintura, intento escapar pero no logró hacerlo.

—¡Ey, Keila¡ —escuchó su voz y sé que es Jonathan.

—Oh por Dios que asco — escucho decir a una chica, soy alta pero tanta gente nubla mi vista y no logró ver nada.

Siento que todos se quitan de en medio y veo a Clara, bañada en ponche crema de pies a cabezas.

Veo reírse fuertemente a Jonathan, mientras Robert lo sigue — son unos idiotas — una enfurecida Keila los ve, chillando por su estúpido vestido y rubio cabello.

Empiezo a reírme descontroladamente de Keila, mientras ésta me fulmina con la mirada,  —estúpidos, dejen de reírse, no se queden parados allí, echenle la pintura.

—Bien señorita Harrison, — todos volteamos y vemos a la Directora parada en medio de todo este revuelo, al subdirector, a los coordinadores y a un sonriente James, junto a un serio Albert, este al ver a Keila se ríe, antes habían sido novios pero las cosas nunca funcionaron como él esperaba. — estás no son conductas aprobadas por nuestra institución. Sus padres se sentirán muy decepcionados al saber que no podrá graduarse como todos los demás por su falta de respeto a nuestra institución y a los estudiantes del plantel.

—¿Qué? —chilla enojada la rubia.

—Que no te graduaras por ser tan irritante, querida —le dice un burlón Ángel.

Ella lo mira con total rabia —esto no se quedara así, me las pagaran.

—Gracias a Dios he gravado todo en mi precioso teléfono, evidencia por sí las necesitamos —dice Robert sonriendo.

—Bueno, sigamos con la fiesta, que la noche nos espera. —dice James

Todos entran, cuando paso junto a James, éste me toma de la mano y me lleva a la fuente.

—Pensé que no vendrías, creí que Keila tenia razón, que tal vez.. — las lágrimas amenazan con salir. Bajo mi mirada, pero la sube con sus cálidas manos —pense que tal vez te habías hartado de mí, que solo era tu juguete.

—¿Eso te lo dijo ella? mírame — demanda y pone su frente junto a la mía — no eres una farsa para mí, no eres un juego, eres mi Pradera, todo lo que te he dicho es verdad, te Amo. Cuando Jonathan me dijo que te harían una broma me ingenie un plan para que ellos pagarán por lo que te han hecho, tarde fue por eso, no huí, nunca lo haría y menos cuando se trata de ti.

Lo miró y se que dice la verdad — yo también te Amo.

—¿Quieres bailar? No dejemos que nos arruinen la noche, ya se la arruinamos a ellos — sonríe, mientras pone una mano en mi cintura para empezar a bailar al ritmo de la música.

Bailamos, reímos, disfrutamos todos juntos.

Ángel con Dulce.

Robert con Blanca.

Jonathan con Jenna.

Albert con Bianca.

Y James conmigo.

—Creo que llego el momento — Se detiene y yo también, lo miró confusa.

—¿Él momento de qué? —Preguntó mientras toma mi mano y nos dirijimos a la hermosa fuente de agua que hace un rato admiraba.

—Ya es hora de decir lo que queremos estudiar — Allí caigo en cuenta, esté es nuestro último día en el instituto a parte de nuestra condecoración, así que es verdad, ya no pienso esperar más.

Necesito saber si nuestro futuro es estar juntos o vivir separados, no podría vivir días o meses sin él, pero tampoco sería tan egoísta como para impedirle cumplir su sueño y se que él también piensa lo mismo.

Entonces lo diremos al mismo tiempo — le afirmó.

Uno.

Dos.

Y.

Tres.

—Psicología —decimos al unísono.

Y nos quedamos con la boca abierta, pensaba que él estudiaría medicina, pero veo que me equivoque y mucho.

—Pensaba que estudiarías, arquitectura — me dice James.

—No, jamás estudiaría esa carrera, yo creía que estudiarías medicina — meditó, esta vez pienso que guardamos bien nuestro secreto.

James se ríe — ¿medicina? No, eso va fuera de mis limites, abrir cuerpos, hacer diagnóstico, ver sangre y órganos, operaciones. No, no eso sí que no es lo mío — lo menciona con total repugnancia, no todos podemos ser médicos, eso lo sé.

—Así que, estudiaremos lo mismo — meditó.

—Sí ¿en dónde piensas estudiarla?— me pregunta.

Pues si me aceptan en....   — le respondo.

Siempre he querido estudiar allí, seremos compañeros de nuevo. — lo dice sonriendo y sé que al igual que yo está feliz.

—Sí ¿Sabes? tú felicidad es mi felicidad — le digo antes de darle un cálido beso.

Esta es nuestra noche.

Sé que a pesar de que el trayecto a sido un poco difícil, sé que lograremos enfrentar los siguientes obstáculos en victoria.

Aunque a veces siento miedo del futuro, de la mano de James puedo enfrentarlos.

A pesar de que en cada capítulo enfrento una emoción distinta como tristeza, alegría, rabia, celos, felicidad... sólo a pesar de eso, esta es mi vida.

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