MIS HERMANAS

FRIDA

Después de dos días hospitalizada, Vale fue dada de alta, la estabilización de sus niveles de

oxigenación fue exitosa por lo que me la pude llevar a casa, sin embargo, tendrá que usar muletas ya que tiene la pierna enyesada y deberá reposar al menos tres meses para poderse recuperar.

Debido a su buen rendimiento académico ha podido exentar materias (2, tal y como ella me había dicho), para el resto, está tomando clases en línea, incluso con sus compañeros del ajedrez juega a través de videollamadas, aunque no le gusta mucho. La tecnología hizo de las suyas para favorecer a mi hija así que ese tema no me

preocupa.

Me he encargado personalmente de suministrarle los medicamentos y me he asegurado de que se

alimente bien y a sus horas. No estoy dispuesta a correr el riesgo de alguna recaída.

Julio César me ha estado marcando y escribiendo para preguntar por su salud y no pienso

contestarle ¡es un maldito desgraciado! se metió con lo más sagrado para mí y eso jamás se lo voy a perdonar. El conoce perfectamente la condición de mi hija, sabe que no puede estar bajo estrés y al muy infeliz no le importó.

Valeria me aclaró que trabajaba repartiendo publicidad en vía pública, la tenían recorriendo los

vehículos cuando el semáforo marcaba rojo y exponiéndose al sol quemante y a la lluvia por $150 diarios, ¡por $150 malditos pesos estuvo en riesgo!, y la hermana de Julio César no se va a quedar impune, le voy a meter una demanda que

Dios guarde. No me voy a quedar quieta. Esos dos van a saber quién soy yo. A mi hija la defiendo con uñas y dientes.

De Mauricio sé que está bien, por comentarios de mis compañeros, parece que ya no ha habido incidentes y que está viviendo en casa de su hermano. De acuerdo a una plática que tuve

con mi jefe, el padre de Mauricio ordenó que se siguiera con la asignación. Es todo lo que me enterado. No he querido preguntar más, me quiero dedicar a la recuperación de mi hija.

Diego y Lily han venido todos los días a visitarla y aprovechan el tiempo para divertirse, ¡los tres

son dinamita!. Lillian y Verónica en la medida de lo posible también vienen a verla y de paso nos ponemos al día con nuestras vidas, sobre todo con Vero, que estuvo de luna de miel un par de meses por Europa y Asia y no estaba enterada de lo que nos había sucedido, yo le platiqué de mi reencuentro con Mauricio y Lillian le dijo que había visto un par de veces a Marco, ella, como siempre, escucha sin juzgarnos.

En todos estos años de convivencia nos hemos hecho más que amigas. Somos hermanas, somos una familia. Hemos cumplido a cabalidad nuestra promesa de apoyamos mutuamente, ser solidarias y cuidar a los hijos de las otras como si fueran propios (así cada una de nosotras tenemos tres), todo esto son lecciones que aprendimos de nuestra Directora Rosario en nuestros días en el Centro Santa Teresa.

-Entonces Burbujita, ¿Qué nos trajiste?  -preguntó Lillian

* ¡Ni se imaginan que bellezas! -dijo Vero, mientras sacaba de una bolsa oscura unos conjuntos de

lencería.

-¿Eso compraste para nosotras? -Lillian señalaba divertida.

* ¡directamente desde Milán! ¿Qué acaso no usan calzones? ¿Ustedes dos son extraterrestres, zombies, o algo así?

Con ese comentario, estallé de risa, hace mucho que no me reía así, en definitiva necesitaba ese momento de diversión.

Solíamos sentarnos por horas a hablar con una copa de vino en la mano y cantando a todo volumen nuestra canción favorita:

...Like a flower waiting to bloom...

...Comouna flor esperando a florecer...

...Like a lightbulb in a dark room...

...Como una bombilla en una habitación oscura...

...I'm just sitting here waiting for you...

...Sólo estoy aquí sentado esperándote...

...come on home and turn me on...

...Para volver a casa y encenderme...

...Like the desert waiting for the rain...

...Como el desierto esperando la lluvia...

...Like a school kid waiting for the spring...

...Como un niño de la escuela esperando la primavera...

...I'm just sitting here waiting for you...

...Sólo estoy aquí sentada esperándote...

...To come on home and turn me on...

...Ven a casa y enciéndeme...

...My poor heart, it's been si dark since you been gone...

...Mi pobre corazón, ha Estado tan oscuro desde que te fuiste...

^^^After all, you're the one who turns mejor que off^^^

...Después de todo, tú eres el que me apaga...

...You're the only one who can turn me back on[10]...

...Tú eres el único que puede volver a encenderme...

Nos sentíamos tan felices que no escuchábamos las risas de nuestros hijos burlándose de nuestra

forma de cantar.

Somos una familia.

Por otra parte, desde hace varios días he notado que un hombre me sigue, lo he observado colgado en los postes arreglando cables de luz, manejando una bicicleta de reparto de comida y hasta pidiendo limosna. El cree que no me he dado cuenta y dejo que piense que me tiene vigilada, en realidad es lo contrario; le pedí a un amigo de la Universidad que trabaja en el área de Investigación de la Policía que me debe un favor que me buscara información sobre el sujeto y ya me llamó por la mañana, así que hoy iré a verlo.

-Hola Gus -me acerqué para darle un abrazo-

-¡Fridita! ¡Que gusto verte amiga! Eres una ingrata, si no es porque me necesitas ni te acuerdas de

mi -habló con reproche-

-Perdóname pero ya sabes con ando de trabajo.

-Si, te entiendo -mientras dijo eso me hizo una seña para que lo siguiera-

Entramos a su oficina, me ofreció una silla, el también se sentó y me dijo:

-Bueno, entremos en materia, mis hombres buscaron en la base de datos y en el programa de

reconocimiento facial al sujeto en cuestión. Esto fue lo que encontramos de él -me entregó unas hojas con información-.

Comencé a leer, su nombre: Ulises Plata, -¿investigador privado?-.

-Y de los mejores -contestó mi amigo, su trayectoria laboral es destacable. Trabaja para

políticos y empresarios.

-No entiendo para que me está siguiendo, ¿a quien le puede interesar mi vida?  –me sentía confundida por lo que estaba hablando con mi amigo-.

-Sigue leyendo, busca el dato de las últimas personas que han contratado sus servicios.

Tal como dijo mi amigo, localicé en el papel el dato y vi algunos nombres conocidos, pero el

último me dejó sin palabras:

-Supongo que sabes quién es -expresó Gustavo-

-Andrés Belmont.

[10]Canción “Turn me on” Norah Jones, Come away with me, 2006.

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