Regreso

Erwin:

Llegué muy agotado del viaje tanto así que no fui capaz de salir de noche y visitar a Amelia. Deseaba verla con impaciencia y averiguar qué le sucedió mientras me fui por solo 2 días.

Tenía la inquietante sensación de que habían ocurrido algunos problemas relacionados con el supuesto compromiso, lo cierto es que, aunque tengan la fecha, ese matrimonio nunca será, ya que Polonia caerá ante el régimen nazi.

No tengo como tranquilizar ese temor en la mente de Amelia, ella no puede saber lo que planea hacer mi país, tampoco es que ella sea una espía pero si lo hiciera se me podría descubrir y acusar de traición. La gente del sector me mira con recelo, les parece extraño que no sea alemán cuando tengo rasgos que los caracteriza, y hasta el momento Amelia descubrió que lo soy, sin embargo no lo ha comentado con nadie más al respecto.

Tendré que averiguar el tema más tarde supongo, mamá estaba feliz de que llegara, quiso saber la razón del porque mi padre había pedido que viajará, pero no podía darle una respuesta completa a lo que me límite a qué muy pronto ella tendría que volver a Alemania.

- ¿No te dijo tú padre porque debía viajar? me he sentido muy a gusto aquí_ dijo con una ligera mueca

- De seguro echa de menos tu compañía_ argumenté

No me comentó más detalles del tema, usted sabe cómo es, bueno iré a descansar_ terminé de decir

Mamá me dió las Buenas noches y antes de subir las escaleras menciono algo que me llamo la atención:

- Mañana en el desayuno hay una cosa de la que debemos conversar_ dijo mientras se retiraba

No me dió tiempo para preguntar más

No me costó dormir, a penas puse la cabeza sentí que él cansancio me dominaba. Al desayuno descubrí que mi madre estaba ahí, tenía una postura erguida y una expresión sería que anoche no había visto:

- Buenos días madre_ le di un beso en su rostro

- Buenos días querido, ¿pudiste descansar?_ comentó

- Si estaba muy agotado y me dormí casi al instante. Prefiero mi cama la verdad_ dije tomando un bocado de los ricos alimentos puestos, me servi algo de leche.

- Hijo recuerdo haberte comentado que no te acercaras a esa joven de la casa vecina_ dijo de pronto sería

Me puse nervioso de pronto ante su repentino cambio en su tono y postura:

- Somos vecinos y amigos, así que naturalmente conversamos un poco_ respondí

- Esa joven es muy linda lo reconozco, es educada y respetuosa. Tengo la sensación de que sabe quiénes somos_ comentó preocupada

Pero ella no podría tener una relación contigo. Hace poco vino aquí preguntando por ti, no sabía que decirle así que le comenté que tú padre te llamó con urgencia. Necesitaba urgente ubicarte_ mamá me miraba con atención mientras termino de hablar

No podía evitar sentirme emocionado porque Amelia me fue a buscar, debío haber sucedido algo con la boda. Quizás sus padres adelantaron la fecha y sería antes, incluso de la operación Caso Blanco.

Me levanté sin poder evitarlo

- ¡Erwin! ¿¡Qué acaso no escuchas lo que te digo!?_ hablo mi madre

- Lo siento mamá, pero esta joven me importa más de lo que te imaginas_ le respondí y salí del comedor hasta llegar a la casa de Amelia

Deseaba verla con impaciencia, sentía que ya no era yo mismo.

Amelia:

No podía creer que había ido hasta la casa de Erwin por su ayuda, pero sentía que mi situación era desesperante mis padres no escuchaban razones.

Para mí sopresa salió su madre a recibirme, le pregunté por él joven que vivía aquí, que necesitaba de su ayuda de manera urgente. Ella fue muy educada y amable, le agradecí que me comentará que Erwin tuviera un asunto urgente por el cual salir con su padre. Le pedí que le avisará de mi situación cuando llegará:

- Srta Amelia, mi hijo es una persona ocupada y tengo entendido que usted se encuentra comprometida. ¿No cree que es malo para su imagen que se le viera con Erwin?_ comentó la mamá de Erwin

- Créame con todo respeto que no es un compromiso que me agrada, cómo usted también sabrá él joven en cuestión se le ha visto en lugares que simplemente me avergüenza reconocer_ le respondí sincera

La mujer me observó con calma y asintió, entendía mi indignación, ya que en el pueblo se comentaba el asunto con Isaac Hasson. Durante esos días las hermanas de él fueron llevadas lejos con sus abuelos a otro país, para no ser blanco de habladurías.

- Comprendo su disgusto y me imagino que la ayuda que necesita es con relación a ese asunto. No me imagino en que podría ayudarle Erwin_ respondió con calma

- No conozco a nadie de confianza como para pedir orientación. Erwin me ha dado buenos consejos_ y no sabía que más agregar, a parte de que me besó para llamarme la atención.

Recordar aquel incidente me hizo sonrojar y la mamá de Erwin lo percibió:

- Cuando llegue le diré que le busca, sin embargo le recomiendo por su bien que no se enamoré de él_ dijo sería

- Le agradezco mucho su ayuda y su consejo_ respondí

Me retiré pensando en su pedido tan curioso, no es que me interese su hijo, estoy acudiendo a él simplemente porque me gustaría su opinión sobre escapar hacía otro país. En la noche no quise comer con mis padres porque aún seguía molesta con lo del compromiso, tuve que acordar que lo haría sólo porque me tendrían encerrada y sin probar bocado alguno en mi cuarto. Pero ya tenía una estrategia con él cuál podría librarme de Issac, quién ha manifestado un repentino interés hacia mi persona que me desagrada, además él día en que acordé aceptar, intento besarme, lo que por supuesto no permití. Mamá me miró con rabia al ver que lo rechace con cortesía:

- Lo lamento soy muy tímida con las muestras en público_ me disculpé fingida

- Oh por supuesto querida. Ella aún es joven y tímida_ respondió Issac

Me daba asco siquiera imaginar que me toque, ¿cómo podría ser la esposa de él? No, debía ponerle fin al tema.

A la mañana siguiente para mí sopresa, sentí que golpeaban la puerta. Estaba sola en casa porque mis padres habían salido a la ciudad por compras y llegarían tarde, me advirtieron de no recibir a nadie ni siquiera a Issac.

Erwin estaba parado afuera con la respiración agitada.

- Erwin le pedí a tu madre que te avisará que necesitaba verte_ comenté a penas abrí

Él se me acercó de pronto y me abrazo con fuerza, estaba asombrada. No sé cómo fue cuando inclino su cabeza y me besó por segunda vez en los labios.

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