Capitulo 14 La inocencia de una Paloma.

Una estrategia utilizada para no dejar cabo suelto, Paloma la nueva víctima del asesino se encontraba en el parque, con su cuerpo cubierto de flores, vestida con un traje negro, con un disparo en la frente, en su mano está escrita una frase que decía, la inocencia de una paloma, sería motivo para seguir en la búsqueda del criminal, un ser que solo se ha dedicado a practicar el mal, ya habían dado parte a la policía para que se pusiera en marcha.

-¿Señor se ha enterado de la mujer que está muerta en el parque?- Decía un policía.

-¿Qué mujer, que sucedió?-Pregunta rápidamente Tobías.

-Un nuevo crimen una mujer esta vez, está en el parque- volvía a decir el policía.

-Vamos rápido- decía Tobías

Ellos salen de prisa a dónde se encuentra el cadáver de Paloma ahora, ya en el lugar Tobías observa todas las áreas allegadas y pernota que en la mano de la chica tiene una nota que decía.

-La inocencia de una paloma ¿Esto que significa? ¿A qué diablos está jugando este asesino?- Decía Tobías

Una nueva incógnita a la historia ¿Qué quería decir la inocencia de la paloma? Pues Paloma fue enviada por Rigoberto a la casa para que buscará unos papeles en su escritorio que estaba en su estudio en su casa, allí solo estaba María, muere de forma inocente y valiente por querer enfrentar y detener al asesino, como fue tan frágil, se convirtió en la inocencia de una paloma herida que no alza su vuelo.

Entre tanto estaban todos reunidos en la tienda, solo faltaba Adrián que llegaba de prisa.

-Lo siento, lamento llegar tarde, vine cuando pude ¿Qué han resuelto con lo del camión?-Pregunta Adrián.

-Todavía no se ha resuelto casi nada- contesta Blanca, que había llegado primero que el.

Pero Rigoberto se angustia por la demora de Paloma.

-Hubiese ido yo, Paloma tarda demasiado- Decía lleno de angustia Rigoberto.

Mientras Francia recibe una llamada de Tobías, que le da detalles de la muerte de Paloma, es inevitable que ella se asombre los demás chicos alcanzan a verla cuando dice.

-Algo terrible ha sucedido-dijo con cara de dolor Francia.

-¿Que paso?- pregunta Olimpia.

-Han encontrado muerta a Paloma en el parque- les da la noticia Francia.

-¿Qué? No puede ser- decía Rigoberto.

Para David esa situación era muy complicada, era su novia y la amaba a pesar de todo. Tanto como para Adrián que era su buen amigo.

-Es algo muy impactante, no sabes cuánto me duele- dijo Adrián.

-A mi más, era mi novia y la amaba con locura- Dijo David- no, no puede ser, ella no puede estar muerta, no- grita de dolor el chico que se desvanece.

-Cálmate se que es fuerte todo esto, pero saquemos fuerza para este momento tan difícil, esto nos duele a todos- dijo Blanca.

Todos han quedado desconcertados con la muerte tan repentina de Paloma, sin haber resuelto de lleno lo que había sucedido con el camión incendiado.

Entre el dolor, la intriga y el misterio en la cabeza de David no cabía la posibilidad de la muerte de su novia, era como una maldición la familia Rodríguez, todo aquel que se acerque a ellos puede terminar de la peor manera, porque ellos viven bajo la sombra que no los deja ser y todo ser que decida permanecer mucho tiempo con ellos tal vez no se librará de las garras del feroz asesino.

En el transcurso de los días han podido reponer lo que se ha perdido con el incendio, cómo esos dos camiones estaban asegurados no ha pasado mal alguno. Paloma fue sepultada dos días después y todos lloraban su partida, nadie se podría imaginar que su vida acabaría de esa manera. Al pasar los días María había decidido hacer una cena en casa, para darles a saber a todos que Blanca tendría un hijo de Fernando era la ilusión más grande que tenía y fue algo que le repuso él cuerpo, le daba alegría enterarse que va hacer abuela. Pero Blanca no quiere ir sola a la cena y decide invitar a Adrián quien en realidad siempre ha estado enamorado de ella y decide confesarle su amor en ese momento.

Llega Blanca a la casa de Adrián.

-¿Qué haces aquí?- pregunta Adrián.

-Vine a invitarte a una cena- le dice Blanca.

-¿Una cena tu y yo?- pregunta Adrián.

-Si una cena-aclara Blanca.

-Bueno no tengo nada preparado, pero siempre quise cenar contigo y poder decirte cuánto te amo- Se arriesga Adrián a confesar.

-Que lindo Adrián, pues la cena es en la casa de los Rodríguez me han invitado porque le daré un nieto, te quería invitar porque no quiero ir sola- le dijo Blanca, apenada con Adrián por no corresponder a lo expresado.

-Ha si, pues fíjate que no puedo ir, tengo que hacer unas cosas con papá- un poco molesto.

-No te pongas así Adrián, yo no te quiero como tú me quieres, eres mi amigo y eso nada lo cambiara, ahora que voy a tener este bebé quiero que seas mi compadre, ¿quien mejor que tú? – le dijo Blanca rompiéndole el corazón.

-Déjame pensarlo y te daría una respuesta lo más pronto posible- sintiendo que se quemaba por dentro al escucharla hablar.

-Bueno todo esto me sorprende, es mejor que me retire, no quiero romper la amistad que tengo contigo- se voltea con intención de marcharse pero Adrián la detiene diciendo.

-Ese hijo no es de Fernando verdad?- pregunta Adrián estando de espalda.

Blanca se da la vuelta y responde.

-¿De que hablas? Si es de Fernando- dijo nerviosamente.

-Se que les mientes- Agrega Adrián.

- Cómo lo sabes?- de repente cambia de parecer- no sabes cuánto lo siento, pero tengo que seguir con esta mentira, que en realidad me come por dentro- desvanecida lo decía Blanca.

-No vallas entonces quédate conmigo- le pido Adrián.

-Lo siento, el también es un Rodríguez y tengo que ir- se anima blanca.

-Lo vas a lamentar, te lo aseguro- dijo Adrián.

-No lo voy hacer, continuaré con lo que inicie- Tenía la claridad Blanca- mejor me retiro, adiós Adrián- se despide y se retira del lugar.

Entre tanto la familia Rodríguez animada toda por el hecho de que Blanca les daría un hijo de Fernando, la cena estaba lista, comida era lo que no faltaba, dulces, bebidas, las mejores vajillas había puesto María en compañía de Salomón para celebrar la noticia venidera, los demás miembros lucían trajes elegantes destinados para la ocasión, hasta Roseta había llegado a esa cena, no sé la perdería por nada en el mundo.

-Falta la más importante- Señala Roseta.

-Si Roseta, ella ya debe de llegar- Dijo María mientras pone los últimos detalles de la cena.

- Veo que esto te ha animado María- observa Paulina, que se termina de colocar un arete.

-Pues si, se que perder a dos hijos duele, pero en realidad esto me anima mucho, es como volver a tener algo de Fer cerca de nosotros-Decía muy ilusionada María.

Blanca hace entrada a la casa y Sergio que venía bajando por las escaleras le dice.

-Miren ha llegado la homenajeada.

-Te estábamos esperando, pasa hija, se bienvenida- le dice María aproximándose a ella y tomándola del brazo para ayudarla a sentarse en el comedor-Pasemos al comedor, solo esperábamos por ti

Ya en el comedor, estaba toda la familia completa y como dije Roseta que es una amiga nada más, estaba allí también.

-Como sabemos, me contenta que está noche estén todos para festejar la llegada del bebé de Blanca- decía María.

-No ha nacido todavía mamá- dijo Francia.

-Lo se pero en nosotros nace la luz de tener algo de Fer entre nosotros- decía María.

-Fer era la luz de esta casa, todos lo adorábamos, era una gran persona- expone Rigoberto.

-No pongo en duda eso, lo quise hasta que me enteré que le dañó la vida a mi hija, que en gloria esté- dice Rubén.

-No viene al caso- dice María.

-Si viene al caso María, porque le dañó la vida a mi hija, y lo vamos a recordar cómo un santo, no me parece- lo dijo enojado Rubén.

-Basta tío, lo que vamos a celebrar es que Blanca tendrá un hijo de él- Trata de calmarlos Santiago.

-Cierto, no empañemos esto, mejor dejemos que la celebrada nos de unas palabras ella si tendrá que decir de mi Fer- propone María.

Después de pensarlo bien, no quería soportar más la mentira, era la hora de la verdad y Blanca pondría a la familia a enfrentarse a un más.

-Lo que diré lo hubiese evitado si no hubiera mentido, mil perdones, pero basta que todos piensen que Fernando fue un santo, que fue un gran hombre correcto, basta el no era así, cuando en realidad me amargó la vida, no saben cuantos golpes recibí de su parte, cuántas humillaciones tuve que calarme y lo callé todo, porque pensaba que cambiaría algún día, pero no lo hizo. No tenía corazón, no amaba a nadie, y este bebé no es de él, es de Sergio, me pidió que mintiera y lo hice como una tonta, pero no aguanto más, estoy harta de Fer, estoy harta de todos. Se que yo no merezco esto.

Todos se quedaron mirando sorprendidos, jamás pensaron que Blanca había vivido un verdadero infierno al lado de Fernando, solo Roseta a puede salírsele una leve sonrisa.

-Lárgate de aquí-llorando fue lo que alcanzó a decir María.

-No es necesario que me eché me voy- dijo Blanca y salió de la casa.

Cómo toda familia del mundo, quedaron comentando lo que había sucedido, mientras Sergio sale a detenerla.

-Espera Blanca ¿Que has hecho?- le dijo Sergio.

-No te preocupes, te he liberado de esto, no te pediré nada a cambio, tendré al bebé yo sola-dijo Blanca y sigue su camino, mientras Sergio vuelve a la casa.

La noche cada vez más oscura, mientras se ha despejado el verdadero rostro de Fernando, la familia estaba indignada sobre todo María, por haber puesto en ridículo todo lo que ella había preparado. Entre tanto Blanca camina sola por la calle oscura en dirección a su casa, Salomón había salido a acompañarla pero no la había alcanzado, Blanca tenía un poco de miedo al caminar por esos lugares, pues piensa que algo malo ha de ocurrirle, un movimiento brusco ha de sentir, lo cual hace que se ponga nerviosa, tocándose la barriga dice.

- Tranquilo bebé, nada ha de pasarnos- y continúa caminando.

Hasta que el asesino arremete contra ella, ella no lucha, ni se opone, solo cierra los ojos para darle todo el poder a el, haber dónde puede llegar, el asesino cuando se disponía a inyectarla con la intención de eliminarla, oye los pasos de Salomón y le da un empujón a Blanca tirándola en el suelo, esto hace que ella se golpee la barriga, el joven sordomudo se acerca a ella con la intención de ayudarla.

-Atrápalo Salomón, atrápalo-Decía mientras se quejaba del dolor.

Salomón esa noche no pudo hacer nada más, solo buscaría ayuda para que ella no perdiera al bebé.

Podría decirse que se ha despertado la furia de este ser endemoniado, que solo quería paz o tal vez solo venganza.

Cómo dijo Chespirito en su programa la venganza nunca es buena mata el alma y la envenena.

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