-¿Tienes dónde alojarte?
-No, por eso vine con tiempo, para buscar un lugar para estar antes de entrar. Tengo entendido que la milicia tiene su propia residencia y uno se puede quedar ahí.
-Estás en lo cierto. Conozco una parte en el que te puedes quedar y conozco a los dueños.
-No tengo mucho dinero.
-Son buenas personas, no te cobrarán caro, confía en mí.
Lo miro un poco dudosa, pero termino aceptando su propuesta. Discretamente, le pide un guardia que lleve los caballos al establo real. Yo al principio me opuse, pero no tenía otro sitio para que se pueda quedar mi caballo, por lo que no me quedó de otra que aceptar.
Caminamos por los puestos que están en la calle principal. Yo miraba fascinada cada uno de los productos que vendían. Tenían un poco de todos los pueblos que tenía el país, eso me explicó Runar. Observo a la gente pasar y todos sonreían, niños, jóvenes, adultos mayores, no había excepciones. Ese rey demonio sí que es un ser sin corazón, solo se preocupa por la venganza y no está interesado en las personas que salen perjudicadas. Me quedo parada en medio, miles de pensamientos invaden a mi mente. Estoy frustrada, quiero evitar una guerra, pero no se me ocurre ninguna manera.
-¿April?
Entro en razón por la sacudida que hizo Runar.
-April, te estoy llamando hace rato. ¿Está todo bien?
-Estoy bien, nada de que preocuparse.
Al menos eso quiero hacer creer.
Me indica que estamos a unos pocos metros de nuestra próxima parada. En el momento que llegamos, es fascinante su estructura, me recuerda a la arquitectura gótica de Europa. Él golpea la puerta y abre una señora ya avanzada de edad, su cabello gris y arrugas la delatan.
-Runar, que bueno que nos viniste a ver.
La señora lo abraza y él no sabe cómo reaccionar. Una risa discreta sale de mis labios, tapándolo con mi mano para no faltar el respeto.
-Quiero presentarte a April, es una amiga que conocí en mi viaje.
-Soy April Edevane, un gusto conocerla.
-Igualmente, soy Elizabeth Winston. Nunca he conocido alguna amiga por parte de Runar.
-Nana, no es necesario decir eso.
No sé si fue mi imaginación, pero en el rostro de Runar se puede notar un breve sonrojo.
-¿Nana?
-Así es querida, fue nana de este niño desde que nació hasta que partió en su viaje por todo el reino. Pero pasen, deben estar hambrientos, les serviré algo para que disgusten.
Veo que Runar se encoge de hombros y la sigue, yo voy detrás de él. El lugar es grande, veo muchos inmuebles que me recuerda a la época victoriana, pensaba que eso solo existía en los países de mi vida anterior. Nos lleva hasta un salón que es hermoso, la decoración no se queda atrás, blanco y dorado son los colores que prevalecen.
-Mi esposo ahora está trabajando, llegará más tarde. Estará gustoso de verte Runar.
-El señor Winston fue mi entrenador, hasta que por temas de edad jubiló y ahora se dedica a dar clases de historia a una escuela no muy lejos de acá.
-Entiendo.
-Entonces dime, ¿qué los trae por aquí?
-Nana, quería preguntarte si podías dejar que April se quede aquí hasta que pueda entrar al ejército. No confío en nadie más.
Ella me mira con sorpresa y a la vez admiración. Yo giro mi cabeza en el sitio en el que se encontraba Runar, surgiendo de inmediato una pregunta.
-¿No que me ibas a llevar a una posada?
-Sé lo que dije, pero son los únicos que puedo decir que son confiables y podrás estar tranquila. Nana, ¿qué opinas?
Ahora mi mirada se dirige a la señora Elizabeth, esperando su respuesta.
-Por mí, eres bienvenida a este lugar el tiempo que estimes conveniente.
-Muchas gracias, señora Winston. ¿Cuánto sería?
-Oh niña, no debes preocuparte por eso, tú solo enfócate de entrar al ejército y guarda ese dinero en caso de emergencia.
-Insisto. No me sentiría cómoda vivir gratis.
Ella queda un momento pensativa.
-En vez de dinero, qué te parece si me ayudas con las cosas de la casa.
-Muchas gracias.
Runar avisa que tiene que volver con su familia. Aún asimilo que es un príncipe, me imagino que vive en ese castillo gigante que uno entrando a la capital ya puede ver su estructura. Por dentro debe ser algo que mi imaginación no alcanza a visualizar completamente. La señora Winston comenta que debe hacer un papeleo en su oficina. Lo acompaño hasta la entrada.
-Espero verte pronto, April.
-Yo también lo espero. Cuando tengas tiempo ven a visitarme, aunque sé que estarás ocupado con tus obligaciones de príncipe.
-Me haré un tiempo. Cuando menos lo esperes nos volveremos a ver.
Se pone la máscara, la misma que anduvo cuando nos reencontramos. No pude darme cuenta, en qué momento la sacó.
-Cuando hagas las pruebas usaré esta máscara, los de menor rango no saben quién soy.
-Tranquilo, no revelaré tu secreto, pero no quiero que hagas preferencia solamente porque nos conocemos.
Su risa es un poco apaciguada por la máscara, aun así la escucho perfectamente.
-Seré totalmente objetivo. Me despido.
Hace una reverencia y yo le sigo el juego. Lo veo alejarse de a poco y desaparece entre las sombras, utilizó su poder para transportarse, es un tramposo. Tengo que hacer un plan para que él no muera y la única manera es que no se enamore de la princesa de Askar. Según escuché es una belleza particular, su cabellera y ojos azulados están equilibrados con su poder de aguar, el problema, es una arrogante que solo se preocupa por su hermosura, al menos así la describían en la novela. Tengo que encontrar la manera de retrasar su encuentro, pero no sabría cómo. Estos días que tengo libre antes de las pruebas de admisión aprovecharé para entrenar y encontrar una solución. Sé que en mis memorias hay algo que estoy pasando por alto y que me servirá para lograr detener la guerra que se aproxima.
Tengo un largo trabajo por hacer, menos mal que investigar es lo que mejor se me da.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 44 Episodes
Comments
Mabel Pines
no te preocupes, el ya está enamorado de ti mi pequeña😉😉solo que aún no lo sabes 😁😁
2022-07-27
1
FRH
Esta genial la novela.
Más capítulos por fis
2022-02-25
1
Yamilcadbr
Gracias por la actualización, súper buena está la trama.
2022-02-25
0