—Me parece una muy buena idea que estudies una licenciatura —dijo Macaria cuando, en la plática de sobre mesa, salió el tema a relucir—.¿En qué es la licenciatura?
—Aún no lo sé —respondió Erena, que disfrutó de ese postre de limón que había elegido cuando fueron a comprar los ingredientes de la cena—, como es en línea no tengo tantas opciones.
—¿Qué es lo que quieres estudiar?—pregunto Roberto, participante también de la conversación.
—Tampoco tengo idea —confesó la joven—.Cuando era pequeña había decidido ser médico, pero justo ahora no es posible, no hay medicina en línea, y es una carrera costosa y demandante, no le veo muchas posibilidades, así que me centraré en algo que pueda hacer y que me permita obtener un buen empleo a futuro.
—¿Y por qué no elige leyes?— Alonso preguntó que, sentado en la sala de esa pequeña casa, escuchaba a sus padres hablando con Erena mientras veía a sus hijos explicarle lo que habían hecho en su primera clase en el karate—.Cuando tengas un título puedes crecer con nosotros, además, puedes hacer tus prácticas y servicio social en el trabajo que ya tienes.
Erena le miró contrariada.No se había esperado semejante respuesta, y se asombró mucho más cuando el padre de ese sujeto loco le dio la razón a su hijo, invitándola a involucrarse un poco más en el negocio familiar.
—Yo no sé si esa sea buena idea —argumentó la chica, cohibida por la presión que estaba recibiendo.
—Yo creo que vale la pena pensarlo —intervino Macaria—, es decir, incluso si no terminas casada con Alonso, que es lo que estamos esperando todos, no es que se lleven mal, así que está bien si trabajan juntos, sobre todo si eso nos permite seguir de cerca el crecimiento de nuestros nietos.
Erena sintió cómo se abrió un hoyo en su estómago cuando la madre de Alonso señaló el matrimonio, porque definitivamente era algo que no sucedería jamás;así que solo sonrió, incómodamente, dejando pasar el tema para no tener que hablar de ello y solo dijo que lo pensaría.
Rato después, luego de hablar de algunas cosas más, cosas estrictamente relacionadas con los gemelos, los padres de Alonso se despidieron y se retiraron, entonces, luego de que Alonso llevara a los niños a dormir, también se despidió de la joven.
—De verdad creo que es buena idea que estudies leyes —dijo el joven, acercándose a la chica que le había acompañado a la salida de su hogar—;y, aunque este es solo mi deseo egoísta, ya pesar de que sé lo mal que te caigo, me gustaría que te dieras la oportunidad de conocerme mejor y me dieras una SEGUNDA OPORTUNIDAD.
—Aunque no recuerdo haberte dado la primera —respondió Erena, casi burlona, sonriendo cuando el chico puso esa suplicante expresión que casi siempre tenía cuando lo escuchaba agredirle, casi siempre inconscientemente—.Alonso, no me siento en las condiciones para jugar a los novios, solo quiero ser mamá y, ahora, de verdad me gustaría volver a estudiar para poder superarme, quiero centrarme en eso para que no haya oportunidad de que algo salga mal.
—Bien —dijo el joven—, pero no por eso tienes que rechazarme.Si no quieres ser mi novia está bien, no es lo que te estaba pidiendo, de todas formas, solo quiero que me des la oportunidad de demostrarte cómo soy porque, aunque no lo parezca y no lo quieras creer, sí maduré en todos estos años .
Erena le miró dudosa y el hombre le sonrió coquetamente, terminando por provocar que ella de nuevo negara con la cabeza, desaprobándolo por completo.
» Solo quiero que dejes de verme como el chiquillo inmaduro que hacía lo que fuera por obtener lo que quería —explicó el hombre—;quiero que veas lo mucho que me esfuerzo por obtener las cosas, por eso me esforzaré por obtenerte a ti, así que no me cierres la puerta, porque entonces no podré alcanzar tu corazón ni poniendo todo mi esfuerzo en ello.
Erena le miró fijamente.Alonso habló con tanta seriedad que incluso la había dejado sin aire, pero era verdad que ella no quería ser la novia de nadie en ese momento.
La castaña de ojos cafés de verdad quería ocupar en ser madre, empleada y en volver a ser estudiante así que, si no le representaba ningún compromiso, supuso que estaría bien observarlo de cerca un par de años y conocerlo mejor.
—Sin compromisos —pidió la joven, estirando la mano y provocando en quien la escuchaba una enorme y radiante sonrisa que casi le hizo arrepentirse.
—Sin compromisos —repitió Alonso, tomando la mano de Erena y sonriendo mucho más, terminando, en su emoción, por depositar un beso en ella.
**
El tiempo comenzó a avanzar y, con dos horas libres tres días a la semana, Erena comenzó a estudiar leyes, como le habían sugerido pues, además de que se había sentido algo presionada, entre las opciones que tenía disponibles fue la única que le llamó la atención luego de visualizar sus posibilidades futuras.
Como estudiante volvió a ser la mejor, la más diligente y más dedicada, así que no le costó acostumbrarse y volver a sentirse orgullosa de sí misma por todos los logros que iba alcanzando.
Además, con ese tiempo libre de cuidar a los niños, obtuvo incluso tiempo para ella, para trabajar en volver a verso como mujer, sobre todo con todas las atenciones que Alonso tenía para ella.
A pesar de que había prometido hacerlo sin presiones, Alonso no se quedó de brazos cruzados viendo la situación, se dedicó a darle atención y tiempo a la mujer de su vida pues, aunque ella no lo notó jamás, posiblemente porque, tal como lo había dicho, nunca le había dado una oportunidad, él siempre estuvo enamorado de ella.
En la preparatoria, cuando la conoció, se enamoró a primera vista, pero ella le cerró la puerta en la nariz o, mejor dicho, el cuaderno;luego de ello, a pesar de que estuvimos juntos tres años, Erena se dedicó a sacarle la vuelta a pesar de su insistencia y, al final, él desistió.
No era sano para él insistir en obtener algo que no le daría, por eso le sorprendía demasiado cuando, en esa fiesta en que la chica no debía estar, hizo algo que no se esperaba de ella y se emborrachó.
Él quiso salvar la de alguna situación peligrosa o ridícula que dañara su reputación, porque su reputación era algo muy importante para ella, pero, al final, no pudo resistir la tentación, pues, entre lágrimas, la joven ebria había confesado que él le gustaba mucho , pero que le caía super mal porque tenía una personalidad horrible.
Erena le había regañado por ser tan inmaduro, le dijo que, si él fuera serio y responsable definitivamente habrían sido buenos amigos, pero que como no podía con su personalidad lo único que podía hacer era alejarse para que no terminara odiándolo, causando que él la odiara y lastimándola.
Alonso confesó entonces que no lo odiaba, que ella le gustaba, y mucho, y terminaron enredados en la emoción del momento, la ineptitud de la adolescencia y los efectos del alcohol.
Alonso había pensado que ella se comportaría diferente con él después de eso, incluso había decidido portarse diferente luego de todo lo que escuchó, pero Erena siguió ignorándolo, haciéndolo sentirse herido, y luego solo desapareció.
No la buscó.Él sabía de los planes de la chica para irse de esa ciudad a estudiar medicina, así que pensó que todo había terminado hasta que le parecía que se la estaba imaginando llorando en esa plaza en su ciudad natal.
Pero no era una alucinación causada por la nostalgia, de verdad era ella frente a él, de nuevo, mostrándose tan indefensa que nació en él un sentimiento que no había tenido jamás: la necesidad de protegerla;y, cuando conoció a sus hijos, ese sentimiento se reafirmó.
Sin embargo, por lo que la conocía, no quiso presionarla.Buscó acercarse naturalmente para que ella lo fuera aceptando gradualmente y se acostumbrara a él en su vida.Pero ella siguió rechazándolo, y eso le hizo explotar.
Quería ayudarla, hacer todo por ella, quería que se apoyara en él, pero ella seguía mostrándole todo lo que era y que podía hacer suficiente sin él, así que pensó en rendirse y lo descartó inmediatamente, pues no era algo que hacer pudiera, no con lo cerca que la tenía y lo unidos que estaban por ese par de críos que amaban tanto.
Su madre le había aconsejado no rendirse, y le aconsejó ser paciente, así que decidió hacerlo, pero decidió hablarlo primero con ella y, cuando decidió, se convirtió en el hombre más feliz del mundo entero.
Erena le había anunciado que no tenía tiempo para él, porque sus objetivos eran otros en ese momento, pero Alonso no tenía problema en esperar si al final podría estar a su lado, así que seguiría empujándose lentamente dentro de la vida de la mujer hasta que no la concibiera sin él a su lado.
Y ahora estaban ahí, dos años después, con ella a punto de concluir una carrera que les acercaba un poco más, aceptando que los niños pasaran tiempo con él de vez en cuando y pasando mucho tiempo en familia, sin molestarse porque él aparecía de la nada en su casa o porque los invitara a tal o cual lugar.
Habían progresado mucho, aunque aún nada romántico ocurrió entre ellos, sin embargo, Alonso estaba seguro de que su tiempo llegaría, y que Erena lo aceptaría finalmente porque, aunque no lo había dicho de nuevo, algo dentro de él le aseguró que ella le veía con buenos ojos tambien.
Eran una buena familia, lo hacían bien estado juntos así que, estaba completamente seguro de que, cuando ella tuviera tiempo de pensar en eso, lo consideraría como parte de su familia también.
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Comments
Elvira Fretes
me encanta, como va la historia, como toda relación van forjando sus destinos, necesitan tiempo, Erena estuvo mucho tiempo siendo solo ella con los niños y ahora entro el padre de los niños en sus vidas, ella se siente invadida por él, pero ahora ella comienza a formar su vida personal y profesional y ahi está el esperando quizás unos escalones más arriba, esperando que ella llegue y se de cuenta quien está esperándola, espero que se de cuenta que muy pasar de lo que ella piense que el ha madurado y reconozca el cambio
2024-04-29
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Melisuga
Las relaciones personales, al igual que las personas, necesitan un tiempo de forja, desarrollo y maduración. Si es una relación de pareja, estos fenómenos son mucho más complejos, porque implican a la familia precedente y a la que se pudiera formar. De alguna manera, Erena y Alonso están en la misma escalera, pero no acaban de llegar al mismo escalón, al menos no al mismo tiempo. Van avanzando de a poco, y espero que pronto logren el equilibrio entre sus personalidades individuales y lo que pueden llegar a ser como pareja y como familia.
2022-06-24
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