Dos bebés son separados al nacer, una se queda con su madre y la otra es robada por la esposa de su padre.
Una de las niñas sufre las carencias y humillaciones de la clase alta y la otra goza de dinero y comodidades.
Promesas hechas en la niñez, una cumplida y la otra olvidada, dinero y ambición hacen que los corazones más dulces se tiñan de negro.
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DONAR SUS ÓRGANOS. (Maratón)
Muy bien señora, ahora que está usted más calmada, le informaré lo sucedido con su hija y la decisión que usted debe tomar. - Dice el médico.
- Por favor sea breve y sin rodeos, me está angustiando.
- Está bien, señora su cerebro de su hija ya no está funcionando, su hija se mantiene con vida gracias al respirador artificial, su corazón y demás órganos, siguen con vida gracias a eso también.
- ¡No! ¡No! Mi hija reaccionará, por qué ella no me dejará, ella es fuerte y muy valiente.
- Señora lo siento mucho, Pero no sé engañé su hija ya no está, solo sus órganos reciben oxígeno por esa máquina, la decisión que debe tomar, es dar en donación sus órganos, para que ella siga viviendo en otros niños y dar la oportunidad de vida a otros niños que gritan y suplican una oportunidad de vida.
- ¡Acaso se volvió loco! Cómo me puede pedir que mutile el cuerpecito de mi hija, como lo despedazaría, ella es mi bebé, sé que ella reaccionará, me besara y abrazara como lo hacía antes. - Lucy llora sin control.po
- Como padre lo puedo entender, pero solo deseo que piense, que si usted decide que su hija se vaya con sus órganos, que todavía están vivos, su hija no vivirá en otros niños y negaría la oportunidad a otros niños de seguir viviendo, sé que su pequeña hija estaría decepcionada de usted.
- Por favor doctor, esperemos unos días, necesito tiempo para pensar que decisión tomar, si la decisión es dejarla ir a mi bebé, por lo menos deje que me despida de ella por favor.
_ Está bien señora, le daré unos días más para que piense que hacer, ojala y tome la decisión correcta.
- Gracias Doctor. - Lucy sale casi corriendo del consultorio y choca con un hombre alto, rubio y de ojos preciosos, ambos se quedan mirando por un breve momento, Pero Lucy reacciona y se aleja de él.
* El tipo con quién choco Lucy es Lucio Betancourt.
LUCIO BETANCOURT
Hola soy Lucio Betancourt, tengo 29 años y sí tuve a mi hijo a muy temprana edad desgraciadamente mi novia falleció dando a luz, Micaela en aquellos tiempos solo tenía quince años de edad, no soporto los dolores de parto, ella era todo para mí.
Micaela, era de condición humilde, su madre era mi Nana y ambos crecimos juntos, en mi relación con ella, solo me apoyaba mi abuelo que era el patriarca de la familia y mi padre, mi madre déjenme decirles que era una mujer despiadada, porque la descubrí tratando de matar a mi hijo a su propio nieto, mi padre se encargó de ella, no la volví a ver.
Tengo un gran consorcio internacional, soy dueño de minas y posos de petróleo, comercializó las más valiosas piedras a las mejores joyerías del mundo.
No me gusta alardear de mis riquezas, soy un hombre que tiene prioridades y una de ellas es mi familia, desde que falleció la madre de mi hijo, no he tenido una relación estable, solo pasatiempos, estoy esperando a la mujer correcta
Cristina mi ahijada, es como una hija para mí, desde que Esteban mi compadre se llegó a enamorar de su esposa, a la pobre de Cristina lo dejaron de lado, solo para ellos eran viajes y arrumacos, peor aún cuando Natalia Enfermó de ese penoso mal, prácticamente yo críe a Cristina, por tal motivo al encontrarse ella con este mal, me tiene destruido.
Mientras Esteban, acompañaba Natalia a regresar al hospital Oncológico, yo me dirijo para hablar con el director general sobre la situación de Cristina y también como conseguir pronto un donante de corazón, Pero al llegar a la puerta de su consultorio, una bella mujer choca conmigo, al mirar sus bellos ojos color azul zafiro, eso me transporta a Huánuco.
Se preguntarán ¿Por qué Huánuco? Bueno es que Esteban y yo, nos conocemos desde que éramos unos niños de cinco años, pero al cumplir diecisiete embarace a mi novia y mi madre me echo de la casa, así que me mudé a vivir con mi abuelo, en los Estados Unidos.
Luego de mudarme constantemente visitaba a Esteban y a su vez supervisaba las minas, una de ellas se encontraba en Huánuco y ahí también se encontraba Esteban, él estaba dirigiendo la obra de un hotel y restaurante turístico, una vez cuando me dirigía a revisar el estado legal de mi mina, tropiezo con una hermosa niña de ojos azules, ese acto fue presenciado por Esteban, que luego de ver ese contacto con ella, se queda mirándola muy extrañamente.
Ingreso al consultorio del doctor y lo encuentro en una llamada, donde decía a alguien, saca todas las pruebas para un posible donante.
- Dígame señor Betancourt, en qué puedo ayudarlo.
- Doctor soy padrino de la niña Cristina de La Cuba, sus padres como usted sabrá se encuentran atravesando otra situación de salud, así que yo en estos momentos estoy a cargo de mi ahijada, dígame doctor tiene algún resultado de las pruebas realizadas.
- Lo que me extraña, es que sus padres no se hayan acercado para preguntar eso, sé que la madre tiene una penosa enfermedad y el señor Esteban cuida de ella, Pero preguntar por el estado de salud de su única hija, no le quita más de diez a veinte minutos.
Señor Betancourt, con las pruebas que me trajeron de los Estados Unidos y la que obtuvimos acá, terminamos de confirmar el mal de la niña, lamento decirle que sin un transplante de corazón, la niña no vivirá más de tres meses, por el estado de los tejidos y músculos del corazón que no deja el correcto bombeo de la sangre.
- Doctor que puedo hacer para conseguir un corazón, doctor no sé que hacer, saquen el mío y dáselo a ella, Pero por favor sálvela. - Dios mío, mi princesa no puede morir, mi hijo también se iría con ella, ese par son tan unidos como lo era la madre de Felipe y yo.
- Señor Lucio, no sabe cuanto lo admiro, ni su padre vino a suplicarle ayuda por salvar a su hija y usted siendo solo su padrino súplica por la vida de Cristina, Pero déjenme decirle que no se trata de sacar su corazón y dárselo a ella, para eso deben ser compatibles y el donante debe ser más o menos de su edad.
Señor Lucio, mantenga la calma Dios es grande y misericordioso, que no se olvida de sus hijos, él se apiadará de usted y de la niña no pierda la fe.
- Doctor, una consulta Cristina está consciente y aparentemente bien, porque usted dice que solo tiene tres meses de vida, si no hay un donante para ella.
- Si ella aparenta estar bien, Pero su corazón está débil, en cualquier momento puede tener un paro cardíaco fulminante y morir en el acto.
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Sigamos con más capítulos, sigan votando por mi novela.