-Ugh…ahhh. ¿Qué? ¿Ra…Rafael hijo? ¿Hijo estas bien? Ugh.
-Los hemos encontrado, trae el equipo vamos a sacar a la conductora.
-¿Qué… Ugh quién? ¿Rafael amor…Hijo?
-¡Señora! ¡Señora ¿me escucha?!¡No cierre los ojos, mi equipo viene en camino la sacaremos del vehículo de inmediato pero no se mueva, trate de quedarse lo más quieta posible hasta que podamos sacarla! ¡Estamos al borde del barranco así que evite hacer muchos movimientos!
La mujer observo a un bombero mirarla por la ventana del vehículo mientras este abría cuidadosamente la puerta para sacar a la mujer del interior del auto.
-No…no por favor mi hijo, saquen a mi hijo primero.
-¿Hijo? Espere.
El bombero colgándose por unas cuerdas para mantenerse en pie y no caer por el barranco observo los asientos traseros del vehículo, quedándose completamente en silencio.
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Episode 9
Dijo la jefa de las mucamas de forma severa mientras se frotaba la nuca molesta.Al terminar la discusión la jefa se fue de la cocina dejando a Ivyn sola en esta, Ivyn que no pensaba seguir el consejo de la jefa de mucamas, tomo dos papas cocidas y un huevo duro para llevársela al niño para que este pudiera comer “las papas son cocidas con cascara así que no estarán en mal estado cuando él deba de comer… no pienso dejarlo solo ”pensó Ivyn al recordar el abrazo que ambos se dado antes, al salir de la cocina Ivyn corrió hacia la habitación de Joseph y nuevamente guardo algo de comida para él.Al pasar los días Ivyn seguía viendo como la duquesa gritaba y regañaba a Joseph, por cosas sin importancias solo para tener alguien con quien desquitar sus frustraciones.
-¿Qué le pasa a esa mujer?
Se preguntó Ivyn mientras caminaba hacia su cuarto, fue entonces que después de días sin encontrarse frente a frente Joseph lo vio, este estaba parado frente el jardín mirando hacia la ventana del estudio del duque “¿hacia dónde está mirando Joseph? ... ese que está parado frente a la ventana ¿es el duque? ”pensó Ivyn mientras observaba a Joseph mirando a su padre quien también lo observaba desde su oficina "parece ser que el duque no es tan indiferente con Joseph como yo pensaba" se dijo a si misma Ivyn sonriendo hacia la dirección a la ventana, fue entonces que Joseph vio a Ivyn y una hermosa y tierna sonrisa se formó en su rostro mostrando dos margaritas al costado de sus mejillas, este corrió hacia Ivyn y la abrazo por la cintura mientras ella sonreía feliz al sentir su calidez.
-¡Señorita Ivyn!
-Señorito Joseph, tantos días sin vernos ¿Cómo ha estado?
Pregunto Ivyn al pequeño niño quien la miraba con ojos brillantes de alegría.
-Bien señorita, tenía muchas ganas de verla mire venga conmigo.
Dijo el pequeño mientras tomaba la mano de Ivyn y corría por los pasillos llevándola hasta el ático de la casa.
-Eh… Señorito ¿Qué hacemos aquí?
-Mira ven Ivyn, mira encontré esto ayer y quería mostrártelo.
Hablo el pequeño niño mientras pedía ayuda a Ivyn para levantar una sábana que cubría un gran piano.
-Un… un piano, pero no se dice que la duquesa odia la música.
-Si, a mi mamá no le gusta la música pero yo… lo encuentro muy bonito.
Dijo Joseph mientras baja la cabeza y pasaba sus dedos por las teclas del piano, Ivyn quien vio a su hijo tan desanimado sacudió el taburete del piano y se sentó invitando a Joseph a sentarse a su lado, esta lo miro unos segundos y luego le sonrió con ternura.
-A usted le gusta la música ¿verdad?
-Eh… si, pero mi mamá no me dej…
-Shhh… tocare algo para usted.
Respondió Ivyn mientras recordaba “mi hijo adoraba tocar el piano a mi lado cuando yo practicaba, creo que eso no ha cambiado en ti mi niño” pensó mientras comenzaba a tocar nota a nota haciendo bailar sus dedos sobre las teclas inundando la habitación de una melodía cálida y serena, Joseph parecía dejarse llevar por tan hermosa melodía mientras se apoyaba en Ivyn relajándose por completo “parece tranquilo” Ivyn sonrió al ver a su niño tan relajado y sereno.
-¡¿Qué es esto ?!
Se escuchó un estruendo y la voz de un hombre resonó en las paredes del ático, fue entonces que Joseph se levantó del lado de Ivyn y se paró mirando hacia la entrada.