Atrapado En Una Novela Cliché

-Lo se, este lugar no es el indicado para un girasol, pero eres muy buena al quedarte de todas maneras a pesar de estar lejos del sol -ella era de verdad muy amable al no haberse quejado hasta ahora.

-Ademas tengo hambre, la comida es malísima y escasa -se siguió quejando, tal vez no debería beber antes de dormir pero aqui parecía que beber licor caliente era lo normal antes de dormir.

-Ok...esa parte no es verdad, la comida es abundante porque durante el verano se cosecha suficiente y las bestias no venenosas proveen suficiente carné, además hay suficientes frutas frescas invernales y secas que se guardan del verano.

-¿Entonces porque me dan de comer una rodaja de pan con 4 centímetros de carne y 1 rodaja de la más insulsa fruta? Hace mucho frío y necesito alimentarme mejor.

-Es porque las damas no comen más que eso -esto último no lo escucho Eran que se quedó dormido entre los brazos de Ezri, se había asegurado de que los brazos de este quedarán sobre los suyos y así si quería bajar el sentiría. Pero de esa manera parecía que lo estaba abrazando y eso tenía el corazón de Ezri latiendo a mil por hora que nisiquiera se movió para no despertarlo, era verdad que ella necesitaba su calor pero ella calentaba su alma asi que estaban a mano.

***

Un fuerte ruido despertó a Eran que se sentó asustado en la orilla de la cama, se suponía que el se iba a levantar temprano para evitar que alguien viera la carpa bajo su vestido porque por la mañana era imposible no despertar con una erección pero era de día ya que la luz se filtraba por el vidrio de una ventana.

-Lo...lo siento -el ruido había sido provocando por una sirvienta que derrame los platos del desayuno, esta sirvienta era nueva ya que no la había visto antes-. Ya vuelvo con su desayuno.

-Esta bien ¿Dónde están... -lo dejo solo.

-Marquesa -Ana entró a la habitación, la jóven mujer era sumamente útil para Eran que nisiquiera se podía vestir adecuadamente sin ayuda-. El gran duque acaba de regresar de luchar contra el ataque de las bestias en las puertas de la ciudad, Saja y Fry lo están atendiendo por eso enviaron a alguien más con su desayuno pero al parecer fue un error -miro la comida en el suelo.

-¿Está herido? -no presto atención a nada más que a la parte de Ezri.

-Supongo...están en la antesala ...-Eran no dijo nada sino que corrió descalzo y vestido únicamente con el grueso camisón hasta la oficina, el lugar estaba cerrado pero empujó con todas sus fuerzas la puerta.

-¡Fuera! -el mayordomo grito antes de ver quién era.

-¡Cielos! -Eran se asustó al verlo desnudo de la parte de arriba y muy herido.

-Dejala en paz -la voz de Ezri se escuchaba muy diferente y cuando Eran lo vio a los ojos notó que estos eran completamente negros sin nada de blanco en ellos lo que era ... aterrador, más aterrador era el zarpazo que iba después su cuello hasta sus costillas dejando expuesta la carne e incluso los órganos de Ezri que nisiquiera se quejaba mientras la sangré escurría.

-Marquesa no puede estar aquí -Saja la tomo de la mano con delicadeza.

-¿Va..va..va a estar bien? -talves ser el héroe que lucha contra monstruos no era buena idea.

-Si, ahora venga conmigo -intentaba llevarsela.

-¿Puedo ayudar? -se paro firme.

-Pero se va a ensuciar -el ama de llaves dijo.

-¿Y eso que? -de verdad quería hacer algo por Ezri, el tipo era bueno por lo que había visto y si estaba en ese estado la criatura debe haber sido enorme y fuerte.

-Esta bien, sostenga esto -le dió un plato lleno de espinas-. Tenga cuidado de no botarlas porque son venenosas y estará en problemas si una la toca.

-Entonces no la pongas a hacer algo tan peligroso -Ezri tomo el plato y lo sostuvo el mismo.

-Creo...creó que no soy muy útil, Ezri lo siento -de verdad se sentía inútil-. Estaré afuera -salio del lugar no sin antes ver los huesos expuestos de Ezri.

***

-¿Eso es todo? -Eran hablaba con Ran que había vuelto de investigar el estilo de vida de un país vecino, necesitaba tener un lugar a donde escapar si algo salía mal.

-Si, es un lugar tranquilo y hermoso, el costo de vida no es muy alto por lo que sería factible si la marquesa va a escapar.

-¿Quieres venir conmigo?.

-Si -se acerco más a ella-. Estoy muy agradecido, haré lo que quieras si me sacas de pobre.

-Recuerda que estás diciendo lo que sea -Eran sonrió.

-Lo que quieras, después de todo no puedo hablar con nadie más sobre esto y servir a una linda chica es agradable.

-Sobre eso...

-¿Eres una chica verdad?.

-... -el silencio fue su respuesta.

-Pero no es un bl.

-Lo se...¿Por qué estás triste? -Pregunto al ver el rostro angustiado de Ran.

-Pense que tal vez eras para mi, estoy esperando que algo pase conmigo y nunca nada pasa, pero los hombres no son lo mío así que no es posible, estoy arto de no saber que hago aquí -suspiro resignado.

-Lo siento, yo desearía estar en tu lugar.

-¿Para que?.

-Para al menos ser un hombre.

-Creeme ser un hombre sin propósito en este mundo es horrible -se podía ver su frustración-. Solo vivo por vivir sin ningún propósito, no me importa sufrir si ese sufrimiento será recompensado con al menos un amor bonito, pero yo no tengo un propósito.

-Lo siento -Eran lo abrazó porque su frustración era palpable.

-Tu comportamiento con tu ama es inapropiado -Ezri lo aparto-. Alguien podría verlos y sería mal interpretado -se puso frente a Eran.

-Lo siento, Ran está triste por su familia -Eran trato de arreglar las cosas.

-Entonces envíalo a casa para que vea a su esposa.

-No estoy casado,  se trata de mi madre, era mi único familiar y está muerta -Ran mintió.

-Lo lamento, te daré lo que necesites para ir a su funeral -era claro que lo estaba hechando.