Por Ti

Alexandra y Mónica comparten horarios de clase por lo que les queda de maravilla cuadrar sus horarios con el trabajo el lunes después de clases y almorzar se dirigen a la empresa para revisar el contrato y confirmar sus horarios, como casi todas sus clases son en la mañana, trabajaran en la tarde y el día jueves tienen clase en la tarde por lo que lo repondrán el sábado en la mañana, decidido una vez firmado el contrato las dirigieron al área donde se desempeñarían.

- Buenas tardes directoras, estas son las nuevas asistentes contratadas ellas estarán medio tiempo en la jornada de la tarde, quedan a su cargo.

- No sé porque me envían jovencitas inexpertas e inservibles, acaso creen que mi área es guardería. – responde bastante enojada la directora de diseño, que es una mujer joven, muy bella, pero con un carácter horrible, extremadamente prepotente, eso si la mejor en su trabajo, pero un ser humano horrible, además sobrina del esposo de la dueña lo que genera que se crea aún mejor.

- Directora son ordenes de la gerencia.

- Muy bien, muy bien no diré más, déjalas aquí, ya vere que hago con ellas.

Alexandra y Mónica quienes estaban ahí escuchando todo entendieron que no sería nada fácil estar ahí nadie dijo que lo fuera, estas solo se mantuvieron en silencio mientras la responsable de recursos humanos se despedía con una mirada de disculpa y lastima, pues les espera un difícil camino.

- Así que tu como te llamas. – Pregunta la directora a Alexandra

- Mi nombre es Alexandra Larios, mucho gusto. – responde esta con una sonrisa amable.

- ¿Y tú? - Pregunta dirigiéndose a Mónica.

- Mónica Suarez. – Responde esta con firmeza.

- Muy bien Alexandra tus iras a la bodega a hacer inventario de telas y tu Mónica iras a archivo ara revisar todos los bocetos descartados de los últimos 10 años y quiero informes de esto lo más pronto posible, a trabajar.

Estas solo se miraron la una a la otra y asintieron, salieron rumbo a hacer sus tareas, claro esto sin tener muy claro a donde deberían dirigirse, de lo único que estaban seguras es que lo mejor era no preguntarle a la directora, por lo que salieron sin decir más.

Fuera se les acerco una chica de apariencia amable.

- Creo que ya conocieron a la directora.

- Algo. – respondieron esta.

- No se preocupen así es con todos, al principio es duro luego te acostumbras, si necesitan algo o duden en buscarme.

- Gracias. – respondieron juntas y se alegraron de encontrar a alguien tan amable que las pueda ayudar, así que aprovecharon para preguntarle por donde debían empezar con sus tareas, Laura al escucharlas pensó que en serio a la directora le tuvieron que caer muy mal para enviarlas a eso. Pero no pudiendo hacer más las guio y les explico lo que debían hacer.

Un comienzo algo difícil, pero para Alexandra era un reto y a ella le encantan los retos, siempre ha vivido como una princesa con todo al alcance de su mano, así que vivir esto es un mundo nuevo y quiere aprender de este mundo real, donde no depende de su apellido para todo.