Gabriela

Traté de levantar rápido a don Samuel, pero no reaccionaba. Estaba nervioso y yo a la vez ahogada de tantas personas rodeandome en un espacio cerrado. Había desarrollado una fobia. Los años viviendo en un espacio de dos por dos, me había creado un trauma.

Escuchaba a los hermanos discutir y Don Samuel debía firmar y debería acercarme a uno de los hombres que arruinó mi vida. Me agaché y le hablé despacito a él. Que quiere hacer? Quiere firmar? O nos vamos? Yo también me siento mal. Por favor 🙏 decida pronto.

De repente siento una mano en mi hombro, siento un escalofrío y rápidamente me levanto. Miró a los ojos al que oso tocarme. Era el maldito abogado que con su estúpida cara me pregunta si mi tío se siente bien. Trato de disimular mi odio, lo que más puedo, me tendré que bañar a ver si así logro limpiar lo sucia que me siento.

Me vuelve a tocar el brazo ahora. Al que yo quito con rapidez.

--Necesito que su tío firme por favor.

--Deme unos minutos por favor le respondo, mi tío está muy nervioso y entre tanto bullicio de la familia de la esposa de "mi tío", no se puede concentrar.

--No se preocupe tómese todo el tiempo que necesite.

Hans...

Veo que Parra camina donde el tío y le pone una mano a mi morena en el hombro. Me paro para hacerle ver mi molestia, que esa pequeña es mía. Cuando veo que ella se incorpora y saca la mano de él rápidamente, como una gata rabiosa. Me río y pienso, cada vez ésta mujer me gusta más. Es única. La sigo mirando y veo que ella exuda sensualidad naturalmente, sin esos gestos falsos que hacen algunas féminas, para parecer más interesantes. Ella es natural.

Nuevamente El abogado le toma el brazo. Definitivamente tendré que aclararle por las buenas o por las malas que está mujer ya tiene un propietario. Pero sin necesidad nuevamente se sacude el agarre. Cómo si tuviera lepra el hombre.

Le pediré la dirección de ella a Parra. Realmente me gusta.

José Luis Parra...

Traté de tocarla y que bien me sentí, corrió mi adrenalina por mi cuerpo con solo tocar su hombro. Cuando sentí que se soltó. Lo volví a intentar ahora en su brazo desnudo, que placer.... Habían habido mujeres que se le habían negado, pero después de unos regalitos y atenciones todas terminaban cediendo.

No sabía cómo pero, está hembra sería mía. nunca me habían fallado mis planes y cuando deseaba algo lo obtenía si o si.

Ni siquiera sabía su nombre pero debería ser tan hermoso como ella.

Finalmente pude convencer a don Samuel y tomó la decisión de firmar. Me sentía ahogada. Ese asqueroso con darle con tocarme y el grandote que sentía su mirada en mi. Muchas veces sentí esa mirada y no me gustaba. Me sentía sucia. Por lo mismo siempre me vestía muy tapada y con ropa oscura.

Firmó varias veces, yo lo asistí en todo. Don Samuel me habla bajito y me dice que quiere que él dinero sea depositado en mi cuenta. Yo me negué, una, porqué tampoco tenía ni una cuenta. Así que el grandote que se presentó como Hans Vanderbick gerente del Banco, que llevaba la cuenta de doña María. Le explicó que necesitaba una cuenta para depositar..

Vanderbick???? no era ese el apellido de uno de los sicópatas que me metió presa? Ósea aquí algo me huele raro muy raro. No quería pensar, para mí era muy difícil falsear mi rostro.

Le pidió que el lunes a primera hora debía ir al Banco a realizar el trámite y que el personalmente lo atendería. Jamás dejó de hostigarme con su mirada. Le pidió a "mi tío" que por favor yo lo acompañara, y si podíamos reunirnos mañana sábado para arreglar unos papeles. Y si el no podía asistir que podía enviar a su sobrina.

Éste hombre será tonto, no soy una niña a quien quiere embaucar, que banco trabaja un día sábado? que se vaya a la mierda con sus lujos y sus aires de grandeza.

Conversé bajito con don Samuel y le dije que no. Que todo lo arreglaramos el lunes.

Mi tío le contestó que no era necesario y que el lunes nos veíamos. Me tomó del brazo y salimos con la frente en alto. Cuál de los dos más nerviosos.