Hay alguna edad para amar? la edad importa?
Vamos a descubrir la historia de Paul Sheridan y Rosmery Sáenz, dos personas con historias similares, hijos mayores, nietos y una edad en donde es muy poco creíble que puedan volver a enamorarse.
Descubramos juntos el final de la historia de estos dos personajes.
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Nuevo trabajo
Llegamos a mi departamento y la conversación entre mi jefe y yo fue muy amena, tenemos muchas cosas en común.
_ así que aquí es donde vives?
_ así es señor
_ y dale con eso de señor, señor, señor, ya te dije que me llamaras por mi nombre.
_ bueno está bien.
_ ahora dime una cosa, te gustaría tener otro trabajo? Uno donde puedas estar más relajada, no olvido que el doctor te dijo que debes cuidarte y pensando en eso estos días, quise cambiarte de trabajo
_ y eso de que sería?
_ yo vivo solo, y la persona que limpiaba mi departamento, era una joven que recibió una excelente propuesta de trabajo y ahora quedé sin trabajadora doméstica.
_ gracias por preocuparte por mí, y está bien, acepto el trabajo, quiero cuidar mi salud por mí y por mis hijos. Hago silencio y es que recuerdo lo que sucedió hace un par de horas atrás y me da vergüenza, parece que él lee mis pensamientos.
_ tranquila, olvida lo que pasó en el restaurante, recuerda que debes cuidar tu salud, tu hijo y mi ex son adultos.
_ si, lo sé, pero madre es madre y nunca dejamos de cuidar de nuestros hijos.
_ tienes razón y por ahora no vamos a hablar del tema, entonces mañana comienzas a trabajar conmigo, te enviaré a mi chofer.
_ gracias y estaré temprano para hacerle el desayuno.
_ bien, me parece perfecto.
Subo a mi departamento y vuelvo a pensar en mi hijo Alejandro, busco mi celular y le marco, pero no recibo respuesta.
Al principio mis hijos no querían que yo trabajara, pero de pronto Naomi y Alejandro han notado cierto poco interés por mí, solo mi hijo Iker está pendiente, siempre fue así, siempre he sido una madre dedicada a mis hijos, los he amado con mi vida, pero veo que mis dos pequeños hijos no ha valorado eso.
Un nuevo día comenzó y el chofer de Paul llegó a buscarme, me puse algo cómodo y bajo.
_ buenos días, señora Rosmery
_ buenos días, muchacho
_ me llamo Cris, señora, estaré a su orden.
Yo asiento y emprendemos nuestro viaje al departamento de Paul.
_ señora, el señor Paul salió temprano, me dijo que le dijera que a mediodía estaría.
Llegamos al lugar, y es un hermoso lugar, el departamento es enorme, todo lujoso, me pierdo en este lugar, después de quedarme mirando todo, comienzo a limpiar, y aunque todo se ve limpio quise darle una manita, puse la ropa a lavar y comencé a preparar un caldo de pollo con vegetales, no sé si el coma este tipo de comidas, pero lo intentaré.
Después de varias horas y dejar todo más limpio, escuché que la puerta es abierta y allí veo a Paul que se queda mirando a todos lados.
_ que huele tan rico?
_ no sé si te guste, pero preparé un caldo de pollo con vegetales
_ waoo, desde que mamá murió no he vuelto a tomar una sopa casera.
_ entonces siéntate y te serviré un poco.
Desde que conozco a Rosmery, me parece una buena mujer y excelente madre, sin importar el rumbo que claramente llevan sus otros hijos, mandé a investigar un poco de ella en unos días me dan información, me gustaría ayudarla y por lo pronto le ofrezco trabajar como empleada doméstica, es mejor que estar de un lado al otro en el restaurante, noté tristeza al ver a su hijo con mi ex, trato de darle ánimos con mis palabras, pero igual sé que le duele muchas cosas.
He mandado a seguir a mi ex y también al hijo de Rosmery, no sé en qué anda ese muchacho, no me importa la vida de Amelia, pero tengo que estar al tanto porque si algo pasa, mis hijos sufrirán, y esa relación con ese joven, no va a terminar en nada bueno.
Me parece una mujer guapa, y cariñosa, y veo que Iker, su hijo, la adora.
_ aquí tienes, espero te guste
_ y tú?
_ al rato tomaré un poco de caldo
_ no, anda sírvete y acompáñame
_ está bien
Me sirvo un poco y me siento en el comedor.
_ y qué tal el nuevo trabajo? Te gusta?
_ oh, si claro, pero iré a avisar al señor Duncan
_ no te preocupes por eso, ya lo hice, está al tanto.
_ muchas gracias, de verdad te agradezco mucho
_ puedes salir cuando gustes, y los fines de semana estarás libre.
_ sí, está bien, y aunque no tengo nada que hacer los fines de semana, me hará bien, también tomaré tiempo para visitar a mis nietos
_ eso está genial, los nietos dan alegría, los consentimos como si fueran nuestros hijos, yo si soy así muy consentidor con los míos
_ si también lo soy y más con las niñas de Iker, la más apagada a mí es Guadalupe, la mayor, es muy guapa, se parece físicamente a mí cuando era joven
_ aún eres guapa
Me pongo como tomate al escucharlo decirme eso, me levanto disimuladamente para evitar que vea el color de mi rostro, y claro es imposible.
_ no te avergüences, aunque seas una mujer adulta, eres guapa.
Yo sonrío y voy a lavar los platos, después de un rato Paul se marcha a la compañía, yo dejo todo listo y decido irme a mi pequeño departamento, la verdad fue más tranquilo el trabajo.