MI VENGANZA

        PAOLO DI MARCO LUMBER

Hola soy Paolo, tengo 21 años y soy hijo del más temido magnate Valentino Di Marco, soy hijo no deseado de este magnate, cuando era tan solo un niño de ocho años, me enteré por casualidad que mi madre drogo a mi padre para egendrame, según Valentino fue así, pero déjenme decirle que no soy su hijo, mi madre jamás tuvo sexo con él, sino con el chófer ese chófer que Valentino tanto confía.

Carlos, mi padre biológico todo este tiempo ha estado cuidando que la verdad nunca se sepa, el mismo entrego el resultado de ADN falso a Valentino, desapareciendo el verdadero, yo siempre lo pago bien a Carlos, por siempre estar pendiente a mí.

Carlos me hizo saber la historia de Valentino y su gran amor, o sea la madre del monstruo, me dijo que esa mujer era el gran amor de su vida, que mi madre lo planeo todo buscando de ser millonaria, por eso mi madre luego de darse cuenta de que con Valentino no iba a conseguir nada, me abandonó siguiendo a otro hombre iluso.

Por mi parte, siempre finjo ser un buen hijo, estudie admisión de empresas para hacerme cargo de los negocios de mi querido padre, imagínense tuve que aguantar a la estúpida hija de su gran amor, cuando me enteré de que su padre es un gran empresario multimillonario, con muchos negocios, eso cambio mi modo de ser con la mostró, me propuse conquistar a esa niña estúpida, para luego despojarla de todos sus bienes.

Después de la muerte de su madre, tuve que hacer tripa y corazón, para no vomitar con su horrendo rostro, también debo de incursionar en la actuación, ya que a ella le tenía comiendo de mis manos, según ella era el único hombre que veía su interior y no su apariencia ¡Ja! Ilusa.

Todo iba bien, hablábamos siempre, en mis días de vacaciones universitarios siempre nos encontrábamos en el centro de concentración de la base de mi querido padre, ahí entrenábamos luego salíamos al cine y otras tonterías, como pasear en la playa, al zoológico, imaginen caminar de la mano con una mujer enmascarada, bueno todo sea por sus millones.

- Me faltaban tres meses, para culminar mi carrera, me propuse casarme con ella al salir de la universidad, luego iba a planear cualquier cosa para conseguir el divorcio y despojarla de todos sus bienes, pero se me adelantaron y la mataron antes de tiempo y ardo de ira porque mi trabajo de años se me fue al diablo, mi querido padre piensa que toda mi irá y frustración es porque yo amaba a Carolina, quien podría amar a semejante monstruo, que solo llegó a tu vida a quitarte el amor y atención de tu padre, aunque no lo era Pero así me lo adjudique yo.

En la actualidad, soy el CEO más joven del mundo empresarial, tengo tres administradores y un financista que me apoyan a manejar la empresa, nunca fui buen estudiante por tal motivo tuve algunos problemas para manejar la empresa eso nadie lo sabe, ya que pude solucionar rápido y con el personal de apoyo que contraté se pudo estabilizar el problema.

Hace unos meses me independicé, me compré mi Penthouse y me fui a vivir ahí, necesitaba mi privacidad y no la tenía en la casa de papá, todos los días tenía que escucharlo hablar de su ahijada Carolina, ese monstruo tuvo que nacer para quitarme todo, el sacrificio de mi madre de nada sirvió, por darme a un padre millonario porque vino esa estúpida de Carolina y me quito toda la atención de Valentino, felizmente que murió aunque no me hice de su fortuna, pero me libre de un matrimonio y de ensuciarme mis manos con sangre, porque si no conseguis el divorcio de hecho la terminaba matando.

POR OTRO LADO

Esmeralda pudo obtener sus documentos a base de amenazas, que si no se los entregaba lo denunciaban y no solo con la justicia, sino a los medios de comunicación, para esto también se sumó la ayuda del médico, quien se hizo amigo suyo, hasta su número de contacto se lo dio, por si en algo la puede ayudar posteriormente.

Ahora Esmeralda, va rumbo a Italia a encontrarse con la persona que le dio una nueva oportunidad de regresar a la vida, aunque la verdadera dueña de ese cuerpo se lo dio a cambio de realizar sus sueños, pero no hubiese obtenido nada, si su padrino no recitaba el mantra, así que ahora se va a su encuentro para obtener una nueva vida y en busca de Paolo, su único amigo y gran amor.

HORAS DESPUÉS

- Señorita Esmeralda, abroche su cinturón ya estamos a punto de aterrizar. - Gracias Moisés te lo agradezco.

- El hombre sonríe, recordando a su dulce niña Carolina, quien siempre le contestaba de esa manera dulce y sonriente, ahora está niña le dice las mismas palabras que lo decía ella, eso le da tanta melancolía que le duele su corazón.

- Minutos después, ya estoy en camino a la residencia de mi padrino, ahora solo espero ganar tiempo, mi venganza está próxima, solo quiero ganar gente de confianza y uno de ellos es mi papucho, así le decía cuando era Carolina a Moisés, el asistente de mi padrino aunque no entendía el motivo que a él no le gustaba mi cercanía con Paolo, él siempre decía que Paolo tenía una personalidad oculta, tengo una idea.

- ¡Papucho mírame! - Le digo para hacerlo voltear.

Enseguida le tomo una foto, eso siempre lo hacía, me gustaba hacerlo enojar, ya que odia las fotos y cuando era Carolina, siempre lo hacía para hacerlo rabiar.

- Carolina, cuántas veces te he dicho que nada de fotos. - Lo escucho decir, pero cuando sé da cuenta que a la persona que ha llamado Carolina, es otra y no su dulce niña, pobre su rostro de tristeza y veo derramar unas lágrimas, se lo limpia con su mano.

- Lo siento señorita, le confundí con otra niña que andaba mucho. - Me dice, con voz inter cortada.

- Llegamos a la residencia, niña Esmeralda.

- Me dice Moisés, bajo del auto y ya no aguanto más, me aviento en los brazos de Moisés. - Dime Papucho ¿hay alguien más que te llamaba así? Si me dices que si, me pondré celosa.

- Ni, ¿niña Carolina? - Acaso, ¿había otra quien te llamaba así?

- ¿Pero cómo? Eres más joven y… - Si Papucho, soy más joven y más bella. - Le digo, un poco fastidiada, no entiendo porque siempre las personas se dejan llevar por las apariencias.

- No mi niña, no decía por eso, lo digo porque tu edad es de una niña de quince años, cuando tú en realidad tienes dieciocho, eso me tiene confundido ¿cómo paso eso?

- Lo único que te puedo decir Papo, que ahora soy Esmeralda y así será desde ahora en adelante, quiero saber si seguiré contando con usted para todo, como lo hacías cuando era Carolina.

- Si mi niña, no preguntaré más, si Dios te envió de regreso, pero en ese cuerpo ¡Bendito seas Dios mío! Para estar de nuevo con nosotros, tenme en mí un servidor leal.

- Gracias Papucho, sabía que podía contar contigo.

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Un capítulo más de esta novela, que la escribí a petición de mi hijo, que me dijo mamá siempre escribe novelas de lobos y Dioses, porque no escribes, una novela donde existan protagonistas que son rechazados por su apariencia, eso me dió está idea, espero que les gusten.

Estaré actualizando, dejando un día, deseo terminarlo lo más antes posible, tengo otra novela que es de competencia sobre el hielo.