Johannes y sus hermanos llegaron a un mundo de fantasia.
Después de haber hecho un contrato, tenían una misión.
Uno, salvar el futuro de su hermana para apoyarla, dos cumplir el contrato.
Sin embargo, cuando abrí los ojos era un pequeño bebe.
¿Como es que termine de esta manera?.
Solo pude sonreir con incredulidad mientras por la ventanas miraba las montañas nevadas del gran ducado.
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Si no lo intento me arrepentiré
Al otro día entre los caballeros se susurraban sobre un niño con un fuerte poder divino.
Caminando hacia el campo de entrenamiento los escuche.
"¿Niño santo?".
Pregunte acercándose a ellos.
El caballero hizo una mueca y después respondió.
"Si, tengo un amigo en las costas, dicen que el niño tiene un gran poder divino".
"De hecho la sede esta en el sur del imperio".
"Ya el jefe de caballeros se lo dijo al duque, tal vez el niño pueda ayudar a la duquesa".
El caballero respondió y al final asentí con la cabeza.
"¿Un santo?".
Murmuré.
"Es posible, el duque mando al jefe de caballeros a investigar mas y apenas nos ha llegado el reporte, asi que hoy no hay entrenamiento al menos que quiera practicar con nosotros, joven maestro".
El caballero dijo esperando mi decisión.
"Entrenemos y háblame mas de ese niño".
Dije sacando la espada de practica.
Quiero saber mas.
"Bien".
"Se dice que el niño fue descubierto hace unos años pero como era muy joven no se le permitía salir".
"Escuche que vendrá a la sede para verificar su autentificación de poder divino, pero aun asi su poder es superior que los otros sacerdotes".
El caballero dijo en lo que empezábamos la practica.
"Si lo dices de esa forma, es posible que él".
El caballero asintió.
Joe, un caballero de ojos rojos y cabello gris miembro de unos de los clanes mas antiguos de Balam.
"Si".
Joe respondio.
"¿Cuando llega?".
Le pregunte.
"En dos días, el barco esta listo para que llegue en dos días".
Respondió una vez mas mientras las espadas chocaban.
"Dos días".
Murmuré.
Si el niño es un santo, entonces mi madre tendría una oportunidad de sobrevivir mas tiempo o incluso hacer que su enfermedad desaparezca, pero si no lo es.
Ella moriría de una forma dolorosa.
Suspire.
"Pero, si el niño no tiene el poder divino, entonces la iglesia de la luz estafara al ducado".
El caballero que estaba aun lado de Joe dijo, tambien estaba la posibilidad que todo esto fuera una estafa planeada aunque después de la primera interacción se habían mostrado preocupados por la salud de su madre, pero ahora que ella estaba en las últimas etapas era posible sacar todo el dinero posible antes de su muerte.
Las donaciones hechas por el ducado habían sido excelentes hasta ahora, asi que la perdida para ellos seria un golpe algo duro.
No pude evitar hacer una mueca incomoda.
¿Que hacer?.
Aun si el niño fuera un santo habría poca posibilidad que pudiera tratar a su madre a tiempo por todos los tramites que lleva.
"¿Mi padre?".
Pregunte, ¿Que es lo que él hara?.
"Se está preparando para salir hacia la sede quiere ser el primero en poder hablar con él niño esperando que coopere".
'Sede'.
'Puerto maritimo'.
Pensé al escuchar a Joe.
"Yo quiero ir".
Dije, tengo que hacer algo para poder ayudarla.
En mi mente tenia una idea.
Para poder traer al niño antes de que llegue a la sede.
Joe miro a otro compañero que se quedo un poco sorprendido.
Hans, el compañero de chisme de Joe.
"Si va a la sede la duquesa se quedara sola".
Joe dijo, Hans asintió como estando de acuerdo.
"No ir con mi padre, ir al puerto".
Dije, Joe y Hans voltearon a verme un poco sorprendidos y luego pensativos.
"El puerto no esta lejos usando el portal y es más fácil que pueda ir y regresar en poco tiempo, son dos horas de ida y dos de regreso si todo sale bien".
Joe murmuro.
"Creo que podemos llevarlo".
No pude evitar sonreir al escucharlos.
¿Me ayudaran?.
¿Solo asi?.
Los dos caballeros se quedaron pensando y al final asistieron estando de acuerdo conmigo.
La condición de mi madre cada vez empeoraba y no había suficiente tiempo para que pudiera recibir el tratamiento asi que estábamos un poco desesperados.
Después de esa platica y entrenamiento llegue a donde estaba mi madre.
La habían sedado para que no sintiera tanto dolor.
"Johannes".
La voz de mi padre se escucho en la entrada de la habitación mirando a mi madre en la cama.
"Iré por ese niño".
Mi padre dijo y asentí con la cabeza.
Si no salia mi plan, entonces el haría todo lo que pudiera en la sede asi que no le dije nada sobre ir al puerto, tambien Joe y Hans dijeron que no dirían nada.
"Si".
"Te encargo a tu madre".
Mi padre dijo tomando la mano de madre y besándola como una forma de despedida.
"Vengo, esposa mi".
Con eso solo puso su mano en mi hombro y salio de la habitación.
No pude evitar sentirme triste.
Al otro día en la madrugada.
"Hay que irnos rápido".
En la puerta trasera del castillo salí a buscar a Joe y a Hans que ya estaban listos para salir conmigo hacia el puerto.
"¿Joven maestro?".
El mayordomo que de repente apareció se quedo pálido al ver qué salíamos del lugar.
"Fred".
Fred el mayordomo del castillo nos miro con incredulidad y después frunció el ceño esperando una explicación.
"Vengo pronto, si sale bien en unas horas estaremos de regreso".
Dije, el mayordomo se quedo en silencio intentando procesar las palabras que había dicho.
Fred no tardo mucho en decir.
"¿Ira al puerto?".
Asentí con la cabeza y tome el caballo donde Joe estaba.
"Cuidaremos del joven maestro".
"No tardamos".
Con eso Joe empezo a cabalgar.
"Aceptaremos el castigo cuando volvamos, pero la orden del joven maestro es primordial por el momento".
Con eso los tres nos dirigimos al puerto.
"Seremos horriblemente castigados cuando volvamos".
Hans dijo, la expresión de Fred era oscura.
"Si".
Joe también asintió, el duque, el jefe de caballeros se enterarían a primera hora si Fred decía algo.
Ya se veía haciendo guardia durante los próximos inviernos en la nieve espesa.
Joe suspiro internamente solo de pensarlo.
"¿Saben como es el niño?".
Pregunte a los dos, pero ellos negaron.
"Me imagino que si tiene el poder de la luz, ha de ser rubio, ¿No?".
Hans se pregunto, ¿No es lo más lógico?.
Lo mire con incredulidad pero a la vez tenia sentido lo que decía.
Llegamos a donde estaba el portal y con eso rápidamente fuimos al puerto.
Hans y Joe ya habían hecho todos los arreglos y habían conseguido ayuda.
La mujer caballero solo sacudió su mano y después la puso en la boca como diciendo, nadie vio nada.
Ella abrió el portal con las coordenadas, asi que todo sucedió rápido.
