Bienvenidas a esta nueva historia!
La vida de Katrina Harper directora del hospital y especialista en oncología.
Una mujer dedicada, para todos ella tenía una vida perfecta, el matrimonio soñado, un esposo esculpido por los dioses y un hijo prodigio.
pero ¿cual es la verdadera historia de Katrina?
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4
Katrina Harper
Sentía como cada músculo se tensaba al recordar el momento tedioso de la noche anterior, mi corazón parecía detenerse en cualquier momento.
Tantos años de mi vida, allí venían mis lágrimas, esa sensación horrible el dolor que por años cubrí con una sonrisa amable, hoy estaba saliendo, me cohibido de tanto y de nada sirvió, solo me hice daño a mi misma,pienso en todo y se me revuelve el estómago, porque fui una mujer cobarde y espere algo que nunca iba a suceder.
Toc, Toc… — ¿se puede?
Mi amiga del alma, Solansh, es la única que sabía mi verdadera historia de amor, corrí mis lágrimas y sonreí, — Adelante…
Ella negó con la cabeza — Sabes que no me gusta que hagas eso, llora y saca todo lo que tienes aquí.— Ella señaló mi corazón y me abrazó fuerte, sentía como me derrumbaba en sus brazos.
— Aaaa… — mi llanto desconsolado salió.
— Llora amiga, hazlo está permitido. — me aferré a ella y lloré amargamente, cuando me calmé, la miré a los ojos.
— me fui de casa…
Ella me vio de manera única, — Muy bien, es lo que tenías que hacer desde hace mucho tiempo.
Ella corrió mi cabello,— vamos cariño, dime qué más hay?
— Eleanor…
Ella se separó de mí y caminó hasta el ventanal, — ¡Esa maldita! Sabía que estaban los vi…— Ella estaba furiosa, guarde silencio. — Ellos estaban en el restaurante donde voy a veces con mi primo.
La miré sorprendida Alessandro Vannicelli es si primo, es un hombre guapo, empresario y la verdad es una tentación, tragué saliva, — vaya y no me dijiste nada que estaba de regreso!
Ella sonrió con tristeza — será tu paciente, está pasando un momento crítico de salud.
No podía creer, esta noticia me sacó de mi trance amargó. — ¿Qué? Dios Solansh, es un hombre tan lindo, dime y la prometida?
Solansh rodó los ojos, — Esa mojigata, apenas supo del cáncer de pulmón lo abandonó…— Ella soltó un suspiro cargado de angustia, era natural su única familia y eran muy unidos. — Kat, sabes que el tratamiento, la mayoría de los médicos usan un sistema de dos etapas que divide a los cánceres de pulmón microcíticos en etapa limitada y en etapa avanzada, pero me gustaría tu opinión, eres la mejor oncóloga acá. — Solansh tenía sus ojos cristalizados.
Me acerqué y la abracé. — Está bien, si quieres programar una cita hoy a última hora hazlo.— Ella me abrazó y sonreí llevando mi mano a su cabello. — Todo va a estar bien, tranquila, tengo noticias y creo que esto te va a animar un poco.
Ella me miró entrecerrando sus ojos — ¿ Qué es?
Sonreí ampliamente, me acerqué a mi escritorio sacando la prueba de embarazo y se la entregué. — ¡No! Kat! — Ella sonrió y asentí emocionada, — Dime que es broma, santo cielos nena, pero porque no me dijiste antes?
Levanté mis hombros, — Apenas ayer me enteré, estaba emocionada y pensé… — Un nudo se formó en mi garganta y no me dejó articular palabra alguna.
Ella levantó mi rostro. — ¿ Qué pasa? ¿Esperabas qué el cobarde de Giovanni se alegrará y que todo sea diferente?
Mis lágrimas comenzaron a caer. — Soy una tonta…
— No nada de eso, ¿sabes que pasa? Tú diste todo y esperaste algo que no va a pasar, olvídalo Kat…
— Lo sé, qué te parece si vamos a prepararnos, tengo una cirugía y tú estás conmigo…— deje mi chaqueta y entre al baño dejando entreabierta la puerta para poder escucharla.
— uyuyuy, ni lo digas, Estefan está emocionado…— Ella guardó silencio. — Hoy voy a la quinta sesión de quimio con Anthony, me llama la atención que él esté tan tranquilo.
Sonreí, sintiendo orgullo de que Anthony se mantenga firme.— es un amor mi niño…
Que sería de mí, Solansh sabía exactamente lo que me pasaba, ella no me juzgaba, solo me decía lo que era, una vez más me fui al baño me lave la cara, era casi la hora de entrar a cirugía, hoy cáncer de colon segunda etapa, estamos a tiempo de sacar otra vida.
Mi día comenzó con una cirugía a las 6:45 estaba en el quirófano, fue un éxito gracias a Dios, todo nos salió muy bien, una vida más en mi lista.
No pude ver a mi hijo, hoy llegó una familia con un niño de 8 años, gritando a todo pulmón y justo salía del quirófano con Solansh. — ¿Qué sucede aquí?
La recepcionista miró con desdén a la mujer y al niño, se notaba que eran de bajo recursos, — se lo súplica mi hijo tiene mucha fiebre…
Me acerqué con Solansh. — ¡Una camilla ahora! — Dijo Solansh comenzó a revisar al niño, éste lloraba de dolor. — peritonitis agudas a simple vista es eso,podrás con esto?
Asentí. — Diana toma los datos del niño, para que su madre firme la autorización.— la recepcionista me miró negando con la cabeza, Solansh rodó los ojos, ella no toleraba a Diana, siempre me decía que no era la persona adecuada para estar en la recepción — algo que te moleste?. — preguntó frunciendo el ceño ligeramente, vi que llevaron al niño, firmé una prueba de sangre y le di a la enfermera. — Esto que le hagan ahora, me acerqué al niño acaricie su cabello, — Tranquilo, todo va estar bien ¿como te llamas?
El niño con lágrimas en sus ojos — Teo. — respondió haciendo mueca de dolor.
— Muy bien Teo, eres muy valiente, haré todo para que estés bien muy pronto…
Se lo llevaron y regresé a la recepción viendo la mala atención de Diana a la pobre mujer.— La próxima vez vaya a un lugar que sea de su misma condición.
¿Qué? Dios cómo puede estar trabajando alguien así en mi hospital, que se creía,
me generó mucha indignación, me acerqué y Diana bajó la mirada. — ¡ Junta tus cosas! Al final de tu horario y puedes pasar por recursos humanos, no estás calificada para trabajar aquí, no tienes empatía y te crees superior por estar detrás de este mueble.
Ella bajó la mirada, — No señora, pero creo que debe ir donde están personas como ella…
Y como era la mujer, que tenía por ser bajo recursos, esta pasaba a no valer nada, la mujer se acercó con lágrimas en sus ojos sacó un manojo de dinero de su bolsillo,— es todo lo que tengo, no fui allá porque no lo quisieron atender me dijeron que vaya a casa y después de tres horas mi hijo lloraba de dolor y entre aquí, no quiero que haya problemas. — La mujer tenía la piel pálida, pero estaba bien limpia.
Negué colocando el dinero entre sus manos, — No me debe nada, yo lo hago porque soy la jefa de cirugía y los gasto no se preocupe, voy a ver a Teo, puede ir a sala de espera señora.
— Cataleya… — limpió sus lágrimas ligeramente — Soy Cataleya doctora.
Sentí algo cálido subir desde mis pies a cabeza, esto era obra del destino o no,sentí la necesidad de salvar a Teo, para ver sonreír a Cataleya donde sea que esté ella seguro estará orgullosa de mí, — haré mi mejor trabajo Cataleya…
Hubo una cirugía de emergencia, peritonitis agudas, daño en tejidos e intestinal, injerto en 10 partes, cirugía que duró 4 horas, todo salió bien gracias a Dios. Aunque nuestro hospital se especializa en oncología, tenemos otras áreas y pabellones, como maternidad, neonatal y atención general.
Me quite el gorro quirúrgico, me acerqué al espejo de mi lavatorio y sonreí un niño muy valiente y con muchas ganas de vivir, miré mi reloj, ya eran las 16 horas tenía que atender en el consultorio, primero iré a ver a Cataleya, salí del pasillo de cirugía y Cataleya se levantó de un solo brincó, — Tranquila señora Cataleya, su hijo está fuera de peligro, puede ir al piso de abajo, en la habitación 139 va estar ubicado.
Ella limpiaba sus lágrimas ligeramente — Gracias a Dios, que puso unas manos que supo hacer el mejor trabajo, gracias doctora…
Sonreí negando con mi cabeza — Nada que agradecer es mi trabajo, venga la acompañó al ascensor, mañana paso a verlo a la mañana, usted se puede quedar en la cama de al lado, — Ella asintió con una sonrisa amable. — También le darán la cena, no tiene que gastar nada, quédese tranquila Cataleya.
La abracé, en lo que el ascensor llegaba, y me separé de ella, — Muchas gracias doctorcita, Dios se lo pague.
TIN… El ascensor llegó, presione el botón y le entregue una tarjeta.
— cualquier duda me llama…
Fui al consultorio, me senté y me dejé caer en la silla, mis ojos se me cerraban, recordé que estoy embarazada y debo alimentarme , llame a mi asistente.
●Amelia, puedes traerme frutas y un licuado de fresas…
●Enseguida doc…
●Amelia cuando vuelvas me traes la lista de pacientes…
●Sí, señora quédese tranquila…
Ser dueña de este lugar, no me hace menos exigente con el trabajo, todo lo contrario amo hacerlo, estoy a la par de muchos, prefiero ser jefa de cirugía y no ser dueña, mucho trabajo aparte de estar al frente de todo.
Toc, Toc … “Tan pronto volvió Amelia” me pregunté sin abrir mis ojos ,me apresuré a dejar que entre, — Adelante! Amelia tan pronto…
Las palabras quedaron atoradas en mi garganta, al abrir mis ojos me encontré con Eleanor y Giovanni, “ Dios que quieren ahora” pensé en mi interior. Pero mis palabras salieron fluidamente —Ya he aguantado suficiente, Giovanni. ¿Por qué la traes a mi trabajo?
—¿Qué? Después de todo sigues siendo mi esposa, además solo vine a decirte…— Giovanni hizo una pausa ,mientras que note la risa burlona de Eleanor, — ¿Quién se queda con la villa después del divorcio?
La pequeña luz había en mí corazón se apagó. Si él no me quería, ¿entonces por qué me tenía a su lado y hacía el amor cada vez que estaba en casa? Como debería haber sido repugnante para él ¿no? Bueno, ya que él ya tenía la intención de divorcio no me quiso nunca en su vida, — Quiero un divorcio, Giovanni, pero no compartiré mi hogar con otra mujer, lo siento pero ella no puede estar en mi hogar.
Giovanni se sorprendió por mi elección, pero su expresión se mantuvo tranquila. No esperaba que eligiera esa opción, ya que sabía cuánto lo amaba. — Está bien Kat…
Eleanor estaba boquiabierta, cuando todo lo que quería era herirme y alejarme.— Gracias, ahora si me permites tengo pacientes…
Mis lágrimas estaban escondidas detrás de mis ojos, era mi realidad pero debía mantenerme firme. Giovanni salió del consultorio y caí rendida, llevé mis manos a mi rostro, todo acabó tan rápido y era como si estuviera consumiendo parte de mí alma, unos brazos me rodearon, causando tanta paz, — Shiii, tranquila Kat ¿ Qué te hizo este estúpido?
Esa voz, levanté mi mirada y me encontré con ese hermoso hombre, Alessandro Vannicelli, estaba consolándome.
Mis queridos lectores espero estén disfrutando, les dejo los personajes mis amores...
Katrina Harper
Giovanni D ' Agostino
Anthony D' Agostino
Solansh Vannicelli
Alessandro Vannicelli
Eleanor Vitales
Cataleya