NovelToon NovelToon
Prisionera De Sus Ojos

Prisionera De Sus Ojos

Status: En proceso
Genre:Embarazo no planeado / Embarazada fugitiva / Malentendidos / Traiciones y engaños / Matrimonio arreglado
Popularitas:45.2k
Nilai: 5
nombre de autor: Eliza Márquez

Jalil Hazbun fue el príncipe más codiciado del desierto: un heredero mujeriego, arrogante y acostumbrado a obtenerlo todo sin esfuerzo. Su vida transcurría entre lujos y modelos europeas… hasta que conoció a Zahra Hawthorne, una hermosa modelo británica marcada por un linaje. Hija de una ex–princesa de Marambit que renunció al trono por amor, Zahra creció lejos de palacios, observando cómo su tía Aziza e Isra, su prima, ocupaban el lugar que podría haber sido suyo. Entre cariño y celos silenciosos, ansió siempre recuperar ese poder perdido.

Cuando descubre que Jalil es heredero de Raleigh, decide seducirlo. Lo consigue… pero también termina enamorándose. Forzado por la situación en su país, la corona presiona y el príncipe se casa con ella contra su voluntad. Jalil la desprecia, la acusa de manipularlo y, tras la pérdida de su embarazo, la abandona.

Cinco años después, degradado y exiliado en Argentina, Jalil vuelve a encontrarla. Zahra...

NovelToon tiene autorización de Eliza Márquez para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

El regreso del principe

Durante días Zahra no vio a Jalil, una tarde Teresa pasó por la fonda a buscar un encargue.

— ¿Debes estar con mucho trabajo?, pregunto Zahra.— Tu nuevo jefe estuvo aquí.

— Pues ahora estamos con un poco más de trabajo, ya que hay empleados trabajando, van a montar una bodega, pero mi trabajo es controlar y darles de comer mientras don Ernesto regresa, está en la capital con unos encargues. Y el patrón se fue.

Zahra sonrió, tal como lo había pensado Jalil se había ido.

Estaba tan feliz que prepararía algo especial para festejar.

Por su parte Jalil observaba las camionetas, se encontraba en Buenos Aires, realizando varios tramites.

— Supongo que será la camioneta Ranger.¿ Tú que opinas?, pregunto Jalil mirando a Marcos.

— Que es una excelente camioneta dijo Marcos, él había llevado a Jalil a Buenos Aires en su auto y se estaban hospedando en la embajada de Durham, Jalil solo había tenido que llamar a su primo Kalen quien lo había autorizado sin dudar a quedarse ahi.

Horas después Jalil cerró los ojos y dejó que el agua caliente hiciera su magia. El jacuzzi de la embajada de Durham no era un jacuzzi, un pequeño templo donde se humedecía el aire con aromas de bergamota, ámbar y un toque de resina oriental. Las sales flotaban como cristales, y sus músculos recién llegados del castigo patagónico se aflojaban como si recordaran, de golpe, a qué clase de vida pertenecían.

Esa noche dormiría sobre sábanas confeccionadas en Italia, de algodón egipcio de más de mil hilos, tan suaves. La cama amplia, tenía mantas ligeras aromatizadas con cedro y un perfume casi imperceptible a azahar. Jalil apenas podía creer que, cuarenta y ocho horas antes, se había bañado con una cubeta de agua helada en un lugar que alguna vez fue un baño.

Para la cena, el chef de la embajada había preparado un menú reservado para visitas especiales;carpaccio de wagyu con trufa negra, seguido de cordero patagónico cocido a baja temperatura —ironía deliciosa del destino— acompañado por una emulsión de pistachos y hierbas frescas. Jalil comía despacio, saboreando cada bocado como quien recoge pedazos de sí mismo.

Marcos levantó la copa.

—Hay que reconocer que en medio oriente saben vivir—dijo, señalando la botella descorchada— Château d’Yquem. Dos mil catorce. Una copa sale más que mi auto.

Jalil probó el vino y dejó que la dulzura mineral le recorriera la boca. Sintió que el mundo volvía a alinearse; suave, caro, brillante.

Jalil respiró hondo, apoyando la cabeza contra el respaldar. Esa iba a ser su motivación. No iba a pasar el invierno bañándose con una cubeta, no pensaba conformarse con menos de lo que merecia, él era un hombre nacido en la realeza y viviría de acuerdo a su procedencia.

Jalil sonrió con esa arrogancia tranquila que había heredado, más que aprendido.

Jalil llego para presenciar el partido de polo poco después del mediodía. El sol caía limpio sobre la pista, y la entrada estaba llena de autos , y gente elegante moviéndose como si todos se conocieran desde siempre. Para él, era como abrir una puerta que había estado cerrada demasiado tiempo.

Apenas puso un pie en el césped prolijo, algo dentro de él se acomodó. Era su mundo, todo moviéndose a un ritmo que comprendía.

Caminó hacia las gradas altas, donde la élite argentina y europea se mezclaba entre copas de champagne y comentarios sobre caballos y handicaps. Pero Jalil no habia ido por la gente sino por los equipos.

Su principal objetivo, los Patagones Azzarini.

Desde arriba pudo verlos en la cancha de práctica. Los caballos eran impresionantes; musculosos, ágiles, entrenados para cambiar de velocidad en un parpadeo. Los jinetes se movían con una precisión casi militar. Jalil los miró con una mezcla de admiración y desafío. Sabía que para estar a ese nivel tendría que esforzarse mucho y le llevaria bastante tiempo.

Mientras observaba el juego rápido, el pase limpio, las embestidas justas, sintió un pequeño pinchazo de realidad; su madre había dejado caer la hacienda. La producción estaba baja, las instalaciones viejas, los caballos lejos de la calidad de antes. No era culpa de ella, Raleigh le había pasado por encima.

Respiró hondo.

—Voy a levantarlo —murmuró, sin apartar la vista de la cancha.

El partido empezó, el relincho de los caballos se mezcló con los gritos del público, y por un momento Jalil ya no estuvo perdido en un bosque, ni bañándose con una cubeta, ni durmiendo en un establo.

Después de dos semanas Zahra habia recuperado la tranquilidad, Jalil ya no estaba y ella había ido a realizar las compras, paso por la hacienda de Don Miguel y luego se dirigió a la estancia.

Zahra conducía la Hilux gris por el camino principal, distraída en sus pensamientos, convencida de que Jalil ya estaría en Raleigh o, por lo menos, lejos de su vida. Después de dos semanas sin verlo, su mundo había vuelto a acomodarse; trabajo, Andy, la fonda… sin príncipes, sin problemas, sin pasado.

El portón de la estancia se abrió con lentitud. Había movimiento: camiones, hombres descargando materiales, caballos ensillados en fila. Zahra bajó la ventanilla.

—Buenos días, vengo por un pedido —dijo Zahra al primer empleado que vio.

El hombre iba a responder, pero una voz que ella conocía demasiado bien lo interrumpió como un golpe seco.

—No te preocupes, yo atiendo a la señora.

Zahra sintió un frío en la nuca. Giró lentamente.

Jalil estaba ahí.

De pie, a pocos metros. Chaqueta oscura, botas limpias, manos en los bolsillos y esa expresión entre serena y peligrosa que a Zahra siempre le había desacomodado el alma.

El mundo de Zahra se derrumbó en un segundo.

—Jalil… —su voz salió más baja de lo que pretendía.

Él inclinó la cabeza, estudiándola con descaro y una sonrisa divertida.

—Pero si es la señora Hazbun —dijo, saboreando cada sílaba—. Dime, ¿qué puedo hacer por mi esposita en esta fría mañana?

Zahra tragó saliva. Sus manos temblaron alrededor del volante.

—Pensé que… te habías ido —susurró.

Jalil apoyó una mano en la ventanilla del vehículo, inclinándose lo suficiente para que ella sintiera el calor de su cercanía y el peso de su mirada.

—¿Lloraste por eso? —preguntó con un brillo divertido.

Zahra lo fulminó con la mirada, pero no respondió.

Él sonrió más, como si acabara de ganar una pequeña guerra.

—No te preocupes —continuó—. Vine para quedarme. Indefinidamente, señora Hazbun...

1
Mabel Sandra Arias
Espero que no se cruce con Elena.....
Blanca Idalia España Lozano
Hoy me dió una alegría leerte , te extrañaba no se porque si escribes regularmente, Pero al ver el capítulo, me dió singular alegría , me hacía falta leerte
Blanca Idalia España Lozano
Creo que se le amargo la feliz mañana a Zhara 🤦, que pasará ahora ???.
Blanca Idalia España Lozano
Me encantó la frase, - Pero si es la señora Hazbun - Que bonito se oye 🥰 , estoy loca , Verdad ????
Blanca Idalia España Lozano
Apareció tu tormento Zhara , 🤦 que más puedo decirte 🥰
Blanca Idalia España Lozano
Me da mucho gusto que te Retes a ti mismo a salir adelante
Blanca Idalia España Lozano
Y no solo Raleigh, Kalill y todos ustedes , que no son una perita en dulce que digamos 🤦
Blanca Idalia España Lozano
Que bueno que te das cuenta , del reto tan grande que tienes por delante , déjate de ....... y se serio y trabajador y buena persona
Blanca Idalia España Lozano
Te darás cuenta, lo que cuesta ganarte esos privilegios, que gosaste siempre , sin que te costaran a tí . Eran privilegios de ser hijo de quién eres , Pero que no valoraste , ni supiste cuidar .
Blanca Idalia España Lozano
Para que te des cuenta , todo lo que perdiste , por pasarte de la raya en tu vida
Blanca Idalia España Lozano
Claro su primo Kalem no lo iba a desausiar , va ha estar a cuerpo de Rey 🤦
Blanca Idalia España Lozano
A de haber ido a comprar , cosas para la finca supongo 😅
Blanca Idalia España Lozano
Hay Zhara quisiera decirte que si se fue Pero no , se queda a vivir aquí 😍❤️
Elilu 🇲🇽
no, de hecho hizo platillos especiales el día que supo que estabas lejos. Pero me parece que alguien es feliz de saberse cerca de su ex!! 🎵🎶🎶🎶
Blanca Idalia España Lozano: Pienso lo mismo 😍
total 1 replies
Omi
De verdad Jalil es insoportable 🤭
Edith Villamizar
Gracias por excelente capitulo
Milcaris
Zahra estás acorralada a decir la verdad por las buenas o entrar en guerra cuando el la descubra y el caos sea mayor.
🩶Lis🤍🇻🇪
y le soltó el bombazo 🤣🤣🤣🤣🤣🤣
🩶Lis🤍🇻🇪
eres una ratifica peluda 🤣🤣🤣🤣
Milcaris
Cínico
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play