Herencia Rusa (Vendida A La Mafia Rusa 2)

(Narra Isabella )

Me sentía tan cómoda, Miles de imágenes surcaron mi mente, estaba soñando pero era como si me viera a mi misma en el pasado, una pareja me cargaba tenía alrededor de 1 año, la voz de la mujer me parecía tan familiar, me llamaba su hermosa bella, después la imagen cambio, íbamos en una camioneta, mi padre manejaba y mi madre , tarareaba la canción que sonaba en el radio, yo corriendo en una playa hermosa.

Una mujer cargandome en brazos, yo lloraba, mientras era subida a un autobús, la mujer dándome un refresco, total oscuridad, autos y más autos, la mujer corto mi cabello dejándolo demasiado pequeño, parecía un niño.

Días después la mujer me entrego a una pareja, la negativa del esposo al saber quién era, "tardaste demasiado" fue lo que le dijo y finalmente yo sentada junto a un basurero sola, nadie a mi alrededor, me había abandonado.

Mi abuela cargandome y diciendo que todo iba a estar bien.

Abrí los ojos, porque todo ese sueño se sentía tan real, a caso así era como termine sola, así fue como mi abuelita me encontró, pero en qué pensaba era un sueño, no podía ser verdad o si?

No encontré a nadie a mi lado, la habitación estaba desierta, las dudas en mi cabeza solo serían resueltas por ella, mi abuela sabía la verdad, debía regresar y encontrar la verdad.

Tome la almohada con cuidado y la abracé, el olor era delicioso, extrañamente mi corazón se estrujó, la idea de irme era un tanto difícil, por primera vez lo entendí, que sin importar como había terminado en la vida de Yareik mi corazón lo quería, no entendía por porque pero no podía odiarlo, sus ojos, sus labios, todo el me había ganado, lo amaba y aunque sonara difícil de entender yo quería conocerlo más, sabe que ocultaba debajo de esos temores, tenía que ir, tenía que escapar y no por miedo, si no para saber la verdad.

Tome la ropa que estaba en el buró y me vesti, salí sin impedimento, camine hasta la puerta, no había nadie más, eso era extraño, mire a lo lejos, había guardias custodiando cada parte de la casa, suspiré frustrada y regrese con paso lento, la voz de Yareik en su oficina, me puse junto a la puerta y escuché su conversación.

(Llamada )

Yareik: Pero no quiero viajar, al menos no ahora

...

Yareik: Lo se, mis padres también están en México y entiendo que es una oportunidad para verlos

....

Yareik: Cómo que la ingenieria nunca llegó, pero tomo el vuelo, si lo sé, algo pasó, seguro está paseando

....

Yareik: Oye creí que no usaba el sarcasmo, se que su vuelo fue hace una semana.

...

Yareik: Bien, está noche viajare a México, si la buscaré y además quiero ver cómo va el negocio

...

Yareik: Si amigo, me debes una, además sabes que tengo que ver cómo van los negocios.

...

Yareik:. Lo sé pero padre está muy ocupado, tardará más que si yo lo resuelvo.

(Fin de la llamada )

El viajaría a México, sonreí, está era mi oportunidad, tenía que ir con el, solo esperaba que me dejara seguirlo, sonreí ampliamente y corrí a la cocina, tome la cacerola y empecé a preparar unos huevos mexicanos y café, puse todo en una bandeja y con una sonrisa enorme camine hasta su oficina, toque varias veces y la puerta se abrió de golpe.

Yareik me miró, yo contuve la respiración, era tan guapo, este me miró perplejo y me dejó entrar acomode el desayuno en el escritorio y con la mirada en el suelo atiné a decir.

Isabella: Que te pasa, te veo pensativo, algo te preocupa.

Yareik: si algo así,es solo que haré un viaje está noche y tú quedarás al cuidado de mis empleados

Isabella: Nooo

Yareik: Que paso, que no estás feliz, iré a México por negocios y no estaré aquí para lastimarte

Isabella: no digas eso, llévame contigo.

Yareik: porque tanto interes, es mejor que yo esté lejos, lo que te hice no tiene perdón

Isabella: Deja de lamentarte, me gustó me oyes, me encantó sentirme solamente tuya- cubrí mi boca con mi mano y salí corriendo.

Subí tan rápido como pude y suspiré, esperaba que decir la verdad hiciera que Yareik me llevará con el, quería saber la verdad y esa era la única manera.

(Más tarde)

La puerta se abrió, Yareik vestía su traje imponente, me miró y me dijo que preparara todo, que me llevaría con el pero que no intentará nada, al menos no sin su consentimiento.

El me llevaría con el, yo lo sabía, sabía que debajo de esa cara de seriedad absoluta se escondía el corazón más hermoso, me había bañado rápido, ahora seguia en silencio a Yareik, subimos a una especie d e avioneta, estaba nerviosa, por fin volvería a mi hermoso México.

El vuelo despegó y yo me acosté en el asiento, Yareik puso mi cabeza en su hombro, sería un viaje largo, el viaje fue tardado y durante un rato me sentía aburrida, podía ver cómo Yareik planeaba su ingreso.

Unas horas más tarde entrad ala noche el piloto anuncio que sobrevolabamos la ciudad de Guadalajara, mire a Yareik sorprendida, no dijo que llegaríamos a la ciudad de México, mi abuela se encontraba ahí.

Yareik: Es más difícil aterrizar en México, hay que ser cautelosos, llegaremos a la casa que tiene mi padre en Guadalajara y mañana nos iremos a la ciudad de México

Asentí, al menos ya estaba en México, era un alivio, bajamos del avión, era una pista clandestina, subí a un auto y después de un rato llegamos a una hermosa casa, era tan grande, seguí a Yareik con una sonrisa, amaba mi país, el olor a tierra mojada me lleno de nostalgia, una manguera regaba el jardín.

Subimos a la habitación y Yareik me dejo acomodarme en la cama, sonriendo me lance a la cama, estaba descalza y el aire caluroso entraba por la ventana, Yareik se iba de la habitación y yo con rapidez tome su mano, este me miró perplejo mientas se detenía.

Isabella: No te vayas, porfavor - dije suplicante

Yareik: Pero lo que te hice no estuvo bien, mereces tu espacio, yo dormiré en la habitación continua.

Isabella: No me dejes, no pienses así, no fue horrible cómo tú piensas, porfavor no te vayas.

Me abrazo y beso mi frente, su olor era tan relajante, lo abrace y lo conduje a la cama conmigo, nos acostamos y yo abrace con fuerza su cuerpo, tenerlo conmigo me causaba seguridad, el era bueno, si no no me hubiera traído, gracias a él yo estaba aquí y podría encontrar la verdad.

Cerré los ojos mientras el sueño se apoderó de mi, el me había robado el corazón era un hecho y yo ya no podía ocultarlo, pero en mi mente solo quedaba la idea d e la mujer perdida, quien era la ingenieria y lo más importante porque viajar hasta México, dijo que sus padres estaban aquí, eso me lleno de nervios, conocería a sus padre y así podría ver si Luna solo compartía el físico con Ann o porque eran tan iguales

"Tiene un lindo corazón como su padre"