Mi Final Feliz

Álvaro sale del lugar triste, decepcionado y confundido con el decreto de su divorcio, mientras que el Barón y Paula se quedan conversando con sus Majestades y Altezas.

- Adamaris: has cambiado mucho en el tiempo que no te he visto, ya no eres una niña, me hubiera gustado que te casaras con Diego, serías una buena princesa, pero ese muchacho tomo a otra mujer, al principio esa señorita no me agradaba, ahora la tolero ha cambiado un poco, no tuvo otra opción que seguir las reglas de este lugar.

- Gael: madre, no hable al respecto, avergüenza a lady Paula con sus comentarios.

- William: no sabía que el segundo príncipe estaba interesado en mi hija.

- Adamaris: nos lo informó después de que la señorita se casó, claro mi hijo no sabía lo de su boda.

- William: fue un compromiso que acordé con el fallecido Duque debido a nuestra amistad.

- Adamaris: ¿Qué piensa hacer ahora? Si desea puedo recomendarle algunos conocidos, para un futuro matrimonio, excelentes candidatos.

- Paula: le agradezco el ofrecimiento, me iré una temporada del Imperio, no quiero escuchar los rumores que se dirán de mí.

- Adamaris: si necesita mi ayuda puede pedírmela.

- Paula: agradezco su amabilidad.

- Alan: quisiéramos seguir platicando, tenemos asuntos que atender. Le deseo una buena vida.

- Paula: le agradezco, nos retiramos.

- Diana: les pido permiso para reunirme un momento con mi amiga, ya que, se irá una temporada quiero despedirme.

- Adamaris: vayan, disfruten un momento.

- Gael: mientras ellas conversan, Barón podemos discutir algunos asuntos en mi oficina.

- William: con gusto.

Cada pareja toma caminos diferentes, mientras que Diana y Paula van a hablar y despedirse al jardín, William y Gael van camino a su despacho donde se encuentran con Diego, en cuanto él ve al Barón lo saluda de forma respetuosa y amable.

- Diego: Barón, que asuntos lo traen al palacio.

- William: vine acompañar a mi hija a obtener su divorcio.

- Diego: Paula, perdón la Duquesa Paula, no, ya no es la Duquesa – se muestra confundido.

- Gael: acabamos de concretar el asunto de la separación de lady Paula, no creo que estén interesados en un nuevo compromiso.

- William: no, mi hija asumirá mi título cuando sea apropiado, ya tuvimos suficiente con el Duque.

- Diego: creía que ella era feliz con él y lo amaba.

- William: no, el primer año fue un matrimonio respetuoso, no hubo un acercamiento como tal, el segundo año con la llegada de la concubina todo cambio y mi hija tomo la decisión de no seguir con el Duque, voy a confesar que me siento aliviado, en parte, fue mi decisión que se casaran, por fin ella es libre.

- Diego: lady Paula debe encontrarse triste…

- William: no, mi hija está tranquila.

- Gael: es bueno saber que las ideas de la señorita Paula son claras.

- Diego: Barón sé que es muy pronto para hablar de esto… - es interrumpido.

- Gael: ya lo mencionaste, es muy pronto Diego.

- Diego: su hija me agrada mucho desde que la conocí en la academia y no… - es interrumpido.

- William: creo que sé lo que desea decirme, tengo que ser honesto con usted, no permitiré que mi hija se convierta en la concubina de nadie, ser su concubina solo le traería humillaciones.

- Diego: si la señorita está de acuerdo, pensaría lo mismo…

-William: si mi hija insistiera en la idea, lo pensaría, pero no estaría de acuerdo con esa decisión.

- Diego: hermano luego vengo a verte, debo seguir con mis actividades, Barón ha sido un gusto platicar con usted.

- William: que le vaya bien príncipe.

- Gael: Diego – Diego no escucha a su hermano y decide marcharse.

- William: puedo preguntarle, si en algún momento su hermano y mi hija tuvieron algún tipo de relación.

- Gael: como lady Paula es la mejor amiga de Diana, y Diego mi hermano se encontraron varias veces, llegaron a tener una amistad, nunca hubo algo comprometedor, luego se alejaron debido al casamiento de su hija.

- William: entonces ira a buscarla, para intentar convencerla de que se convierta en su concubina.

- Si desea podemos ir junto a ellos.

- No, confió en las decisiones de mi hija, intuyo que no lo aceptará.

- ¿Por qué?

- Si fuera ese el deseo de Paula, no se marcharía del Imperio. Bueno, concentrémonos en los asuntos por los que me citó.

- Por supuesto.

Como ellos lo intuyeron, Diego comenzó a preguntar por el palacio si habían visto a la princesa consorte, hasta que por fin le dieron una respuesta clara, enseguida fue al jardín a encontrarlas.

- Diego: cuñada, lady Paula – hace una reverencia ante Diana, y Paula se pone de pie para hacerle una reverencia a él -, Paula no es necesario.

- Paula: es necesario príncipe, no quiero que se expandan rumores negativos dentro del palacio.

- Diana: Gael debe estar buscándote, para que cumplan con sus funciones.

- Diego: no me necesita, vine porque me enteré de buenas noticias, por fin se divorció del Duque, nunca lo amaste, es porque tampoco has podido olvidarme – Paula sonríe.

- Paula: me separé del Duque, pero no es por los motivos que usted piensa.

- Diego: por favor, fui tu primer amor.

- Diana: Diego por favor no seas impertinente.

- Paula: está bien Diana, es mejor aclarar este asunto. Me separé porque tuve algunos altercados con el Duque y su concubina, no hay otro motivo, usted si fue mi primer amor, pero ya no tengo ningún sentimiento por usted. Debe entender que en ese entonces éramos muy jóvenes para entender bien lo que es amor, tuvimos momentos felices, cada uno tomo caminos diferentes, nos casamos, en su caso formó una familia, si algún momento nuestras vidas coincidieron, ahora ya no lo hacen, por ese cariño del pasado, le pido que nos tratemos con respeto y amabilidad.

- Diego: todos cometemos errores, no permitas que una equivocación del pasado, nos vuelva a separar, cuántas veces tendré que decirte que te amo para que en verdad me creas.

- Paula: no importa cuantas veces me lo diga, no pienso volver a tener una relación amorosa con usted, ame a su esposa y sea feliz con ella.

- Diego: cómo puedo ser feliz con alguien que no amo…

- Paula: sin amor pudo acostarse con ella, aprenda amarla.

- Diego: si fuera verdad que la puedo amar, porque no aprendiste amar al Duque.

- Paula: por esa experiencia le pido que conozca a su esposa, van a tener un hijo, intente darle un hogar digno.

- Diego: pero…- es interrumpido.

- Paula: por favor, no busque más excusas, no me molesté más con ese tema, no voy aceptar ser su concubina, ni su esposa, ni amante, ni nada, antes prefiero la muerte.

- Diana: Paula no digas eso.

- Diego: tanto te desagrado.

- Paula: no, por eso le pido que tengamos una relación respetuosa. Si va a buscar la manera de obligarme a estar a su lado, solo provocara que lo odie, y que en mi desesperación la única salida que encuentre sea la muerte.

- Diego: está bien, no pienso rendirme, sé que puedo recuperar el amor que tuvimos, ahora que es libre no hay nada que me impida buscarla libremente. Me retiró, que tengan un buen día.

Aunque Diana insistió que se quedaran en el palacio Paula no deseaba volver a tener un encuentro desagradable con Diego, por lo que, con su padre decidieron quedarse en una posada, para el día de mañana al amanecer partir de nuevo a la Baronía, lo que no esperaba es que Álvaro los estuviera siguiendo y en la noche interrumpiera en su habitación.