Fénix

Luego de un rato en esa posición abrió los ojos a ver qué semblante tenía Rodrigo, pero el enigma seguía en la misma posición, nada en él había cambiado. Entonces Fénix se paró del sillón y camino hacia su marido, lo rodeo como gato mimoso, su mano acaricio desde la mano derecha, siguió por su espalda, y su brazo izquierdo, se movía seductoramente, contorneaba sus caderas y liberaba sus Feromonas, pero Rodrigo no se inmutaba, pensaba como sacar información de sus hijos, y volver rápido con ellos para ver a Félix, que ya por el tiempo estaba trasplantado. Respiro profundo y tomo la mano de Fénix cuando lo acariciaba. Le sonrió y con voz gruesa y profunda le dijo, cuál es tu trato. Fénix se sintió triunfante, le dio un suave beso en los labios y le susurró, mañana tengo mi RUT, si lo pasas conmigo te doy a los bebés. Rodrigo se tensó, apretó sus puños, pero terminó aceptando, sus hijos lo necesitaban, más sabiendo la falta de sus Feromonas. El enigma le sonrió al delta y le dijo que si a cambio de conocer a sus hijos. Fénix movió su mano haciendo una señal y un alfa apareció descolgandose dé un helicóptero, a los pocos minutos, bajaba en una canasta de socorrismo a Kanin y Kahel, que dormían por efecto de las feromonas que Fénix había impregnado antes de la llegada de Rodrigo. Al ver a sus cachorros, comenzó a llorar emocionado, tomo con cuidado a uno, el que tenía más cabello plateado y Fénix le dijo él es Kahel, Rodrigo libero feromonas y los bebés sonrieron y se acurrucó en brazos del padre, Kanin al no tocar al delta comenzó a llorar, Rodrigo lo tomo con su otro brazo y los dos bebés se acurrucaron en él, lo reconocieron instintivamente, tal vez recordando las veces que su padre les hablaba recostado en el vientre de su madre y les cantaba o les liberaba feromonas para que nacieran fuertes.

Fénix los abrazo, como si fueran su familia, amaba a los cachorros y a su esposo y ver esa escena le daban más ganas de secuestrar a los tres y tenerlos junto a él hasta que lo amaran y nunca más se separaran. Rodrigo quería escapar, tenía a sus bebés, pero había muchos hombres del delta al rededor, y podía herir en la fuga a uno de los cachorros, tenía que hacer que el delta confiara y escapar los tres para ver a su delta amado.

Después de ese momento emotivo, Fénix hizo una señal y un dardo tranquilizante le dio en el cuello al enigma, luego otro y al tercero cayó, intentaba no soltar a sus hijos, pero la droga hizo efecto y quedó inconsciente y los cachorros fueron arrebatados, beso en la frente a los dos Fénix e hizo que se los llevarán a la plataforma donde lo tenían oculto, quien diría que casi ocho meses después de nacer allí en ese lugar, volvían a vivir allí. Con un grupo de hombres llevaron a Rodrigo a un camarote y todos abandonaron la embarcación, dejando solos a Fénix y Rodrigo, sabían de lo peligroso que se volvía el delta en sus RUT, llegando a matar con sus feromonas o sus actos sádicos para con sus parejas de ocasión.

Rodrigo estaba encadenado con una cadena a la pared de su pierna izquierda, podía caminar e ir hasta el baño del camarote, pero la cadena no era tan larga como para que pudiera salir de allí.

Dos horas después se despertó y vio confundido a su alrededor, junto a él Fénix dormía desnudo, boca abajo, dejando sus glúteos redondos y bien formados al descubierto y bien parado, tantas Feromonas y esa imagen le estaban jugando en contra y por momentos no sabía si era Félix o Fénix, pero esos glúteos lo llamaban, más cuando se giró dando la espalda y sus posaderas rozaron la entre pierna de Rodrigo. El enigma tragó saliva y se giró, dando la espalda al delta y vio la puerta del baño y se fue allí así no caía a la tentación, no quería caer como la primera vez que de ese momento de debilidad provocó el nacimiento de un niño hermoso, pero sin madre hasta que llegó Félix de nuevo a su vida, y ya no quería más hijos con Fénix, solo quería cachorros con su amado Félix. Sentía que por el trato traicionaba a su amor, intentaría estar alejado lo más posible, así no caía al estasis y placer traicionero. Durmió en la bañera del camarote, al día siguiente salió y Fénix no estaba, eso le dio un poco de tranquilidad. Se acostó en la cama y se durmió pensando como escapar.

Mientras eso sucedía Félix lo trasplantaron y paso las primeras horas recuperándose, pero entro en coma, sin ninguna explicación. Por algún motivo se durmió y no despertaba.

Napoleón perdió contacto en alta mar con su yerno y lo buscaba con prefectura y mercenarios, pero nada. Seguían buscando.

Josefina no se separaba de la entrada de la terapia intensiva, esperando que su hijo se despertara, seguís esperando noticias de Su esposo y su yerno, pero nada, eso la destruía, por más fuerte que sea, la verdad era una Omega con muchos miedos, sin su enigma, y eso la hacía sentir más sola y más débil, y con los días se iba intensificando su estado, ya no comía, no dormía y luego de veinte años, volvió a fumar, para intentar calmar sus miedos y temores, no quería volver a perder a Félix, no otra vez, más ahora que era tan bueno y frágil, tan dulce y cariñoso, nada que ver, al monstruo que se transformó mientras se hacía pasar por Fénix. Una semana después del trasplante, la Omega colapsó y termino en terapia intensiva por una descomposición hemodinámica, madre e hijo compartían unidad. Solo ellos dos inconsciente se hacían compañía silenciosa, nadie más era parte del momento de vacío y soledad.

Napoleón sintió una punzada en el pecho, algo se desgarró y no sabía que era, llamo a su esposa y nadie contestó. Llamo a la nana y ella le dijo que estaba en la mansión arreglando ropa para llevar a Josefina, ya que no se separaba de la puerta de la terapia, esperando que su hijo se despertara, Napoleón le ordenó que fuera al hospital y lo llames desde allá, para informar como estaba su esposa, el dolor era grande y necesitaba estar seguro de que su amada Omega estaba bien, al igual que su hijo.

la nana confirmo la orden y se fue al hospital junto a Octavio, que la cuidaba por no quedar casi nadie en la mansión, ya que todos los hombres estaban desplegados buscando a Rodrigo y los gemelos.