Lo que debería ser un simple trabajo arqueológico...termina en un enredo sentimental. Los espíritus del pasado utilizan a los vivos para reparar un daño. Qiang quiere ser perdonado y pide ayuda a Lin a cambio de ayudarlo con revelar la historia. Mei quiere huir de Qiang y se refugia en una extranjera ¿Logrará Qiang obtener el perdón de Mei?
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Lin no pudo dormir muy bien, el sueño fue pesado, las escenas de las batallas eran sangrientas, las luchas cuerpo a cuerpo parecían una pesadilla, los filos de espalda, los gritos, la ferocidad con la que atacaban, brazos y piernas cortados, pero valió la pena, los Song recuperaron las 16 prefecturas y la paz es relativa. Los Liao adoptan la cultura China en múltiples factores.
Esos datos históricos tienen coincidencia ahora. Los Song ganaron no solo por el convenio cultural, sino que Qiang y Zhao se inspiraron en la lucha por conquistar el corazón de Mei. Lin esta muy cansado como para levantarse y escribir, se vuelve a acostar y vuelve a dormir.
Llega la paz para ambos imperios, los soldados están en retirada. Qiang desarma su tienda hace su mochila y en silla el caballo de Mei, ahora las cosas han cambiado, Mei sube a su caballo y Qiang va a pie, tomando las tiendas del animal para guiarlo de camino a casa, el camino dura varios días, hacen paradas para descansar.
Mei no conoce el lugar, tiene miedo pero Qiang está allí, debe protegerla de los ojos del nuevo general. Por lo tanto, Mei debe hacer caso a Qiang, por poca que sea la confianza que le tenga. Durante la semana que duró el trayecto, Qiang pudo mantener escondida a Mei de los ojos del nuevo general. Llegan a la ciudad, y cada soldado debe esperar para recibir su paga e irse a casa. Por su seguridad, Mei debió esperar en las afueras de la ciudad.
Qiang lleva a Mei a su casa, hay mucho que hacer, estuvo tiempo deshabitada, para poder pasar la noche, se limitan a limpiar el ambiente que estaría dedicado a la habitación. El hecho de que hayan hecho paradas no significa que hayan dormido bien, así que ni bien quedó lista la habitación, se fueron a descansar. Mañana sería otro día.
Así fue la noche de Lin, hasta allí fue el sueño, son detalles íntimos, familiares. Necesita registrar esa información, escribe en su cuaderno, abre su portátil por si alguien se anima a colaborar con la redacción de una historia sobre Qiang y Mei, pero nada, retiró el anuncio, fue una ilusión y nada más.
Ahora, Qiang detuvo la revelación de la verdad hasta el inicio de convivencia, ¿que otras cosas puedo haber pasado? Lin quiere ser un intento de escritor, ha hecho investigaciones ha presentado escritos, material educativo, pero no literario, como construir un personaje, como describir las emociones, las situaciones, que reglas debe seguirse para la narración , como y cuando hacer que los personajes intervengan, es un sin fin de preguntas.
Pensar en Ana, quizás ella lo pueda ayudar, pero ¿La diferencia horaria permitirá? ¿Tendrá tiempo suficiente Ana para hacer algo? Y la pregunta más importante ¿Aceptará colaborar en un proyecto de esta magnitud? ¿Y el idioma? Ella es hispano parlante, pero su inglés no es tan fluido, ella puede que tenga problemas para usar los términos adecuados. Una vez que ella haga el boceto, hay que traducir al chino, y el trabajo se complicaría. Piensa y piensa, pasan los minutos y no se le viene ninguna idea
Qiang al verlo tan pensativo, le pregunta.
-¿Te sientes bien?
- Pensaba en un proyecto, pero nadie está dispuesto a colaborar.
- No te olvides de buscar a Mei, tengo algo importante que decirte, quiero conocer a mi hijo, Mei y yo no lo vimos nacer, especialmente yo. Solo quiero saber dónde está para llorarlo, que Mei venga y lo conozca también, si es que ella no lo ha visto.
-¿Tuviste un hijo con Mei? – se alteró Lin.
- Ésta noche te daré detalles de todo lo que sé, pero ayúdame a encontrar a mi hijo.
- Pero se necesitaría una ubicación exacta, no puedo decir que hay un bebé que buscar y mandar a todos a remover tierra y ya, se encontró el niño.
- ¿No me vas a ayudar?
- ¿Acaso tienes una idea de dónde está? No. Eso lo hace mucho más difícil.
- Quiero conocerlo, aunque sea ver sus huesos, que importa. Pero quiero pedirle una disculpa para el también pueda descansar en paz.
Lin se siente presionado en buscar ese niño, han pasado mil años, no quiere ser pesimista, pero debe sincerarse con Qiang
- Han pasado más de mil años para ser exactos. Y un bebé no tiene huesos, sino cartílagos de crecimiento. Eso desaparece en poco tiempo, no hay esperanzas de encontrar los restos del infante. Salvó que se le encuentre momificado, pero lo dudo.
- ¿Es una excusa para no ayudarme?
- Es la verdad, no te puedo prometer nada, sería como alimentar falsas esperanzas, alimentar ilusiones, al final es como jugar con los sentimientos. Eso está mal.
- Tal vez tengas razón. Me tendré que resignarme.
- Lo siento Qiang, pero yo no hago milagros. Lo único que puedo hacer es ser sincero.
Qiang guardó silencio, ya entendió que la esperanza de ver el cuerpo de su pequeño es técnicamente imposible.
A Lin le gustaría poder saber dónde está el niño, pero sin una pista y con tantos años de antigüedad sería como buscar una aguja en el pajar. El arqueólogo no tiene familia, solo puede imaginar cosas pero entender será muy difícil.
Lo otro que le queda a Lin es intentar convencer a Mei a que perdone a Qiang y así descansar en paz. Por ahora quiere descansar, tiene tanto estrés que su psoriasis está bien avanzada. Quiere despejar su mente y piensa organizar un fin de semana de trekking, distraer la vista, oxigenarse un poco, desconectar su cerebro de la tecnología y ser normal un fin de semana.
El fin de semana fue exclusivo para su salud mental, llegó de trekking bien relajado y sin psoriasis, su piel está limpia. Se acordó de Ana, pensó que sería una buena idea contarle de su estupidez de escribir un libro tipo novela. Toma su celular, lo pone a cargar, y selecciona los mensajes a leer y los de eliminar, terminada con esa labor, le escribe a Ana.
“Buenas noches, señorita Ana ¿Cómo le fue en el trabajo? Espero que haya sido un buen día. El motivo de escribirle estas líneas es que tuve en mente un proyecto, pero fracasó, no tuve apoyo de nadie. No sé cómo lo tomaría usted, pues tenía pensado escribir un libro con toda la información que he podido obtener sobre el triángulo amoroso con mil años de antigüedad. Hice trabajos de investigación, pero nunca uno literario, cuanto más lo pienso menos soy capaz de escribir una palabra. Espero que mis ideas no vayan a interferir con su trabajo y/ o proyectos personales."
Atte: Lin Kong