Anabel

El asistente bajó las maletas de Fran, su madre y su hermana estaban en la puerta para despedirlo, pero Anabel se quedó encerrada en la habitación. No quería ver cómo se iba y la dejaba sola.

Al menos su suegra no la molestó obligándola a bajar . Matilde fue a verla hasta que ellas salieron. La encontró con los ojos hinchados de tanto llorar.

Matilde- Levántate y lávate la cara. Después baja a comer algo, te daré un analgésico para el dolor de cabeza.

Anabel le hizo caso, era mejor que bajara cuando las otras no están, no quería verlas, estaba demasiado deprimida para lidiar con ellas.

Le sentó bien charlar con Matilde, era un alivio tenerla cerca. Ya había desaparecido el dolor de cabeza y quiso leer un poco, su objetivo era hacerlo con fluidez y ya lo estaba consiguiendo.

Fran llamaba una vez al día a su madre y a su hermana y como casi siempre estaban fuera de casa, ella se quedaba sin hablar con él, hasta que se le ocurrió llamarla al teléfono fijo de casa, pero no era suficiente para ninguno de los dos.

Para colmo María despidió a Matilde, era realmente cruel, lo hizo solo para hacer daño a su nuera y demostrarle quien es la que tiene el poder- No puedo permitir que Matilde siga trabajando aquí, porque al igual que las otras sirvientas te ha faltado al respeto.

Anabel - No , Anabel es una persona integra , ella jamás haría eso .

María- Pretender ser amiga de su señora es la peor falta de respeto, cada uno debe saber a qué lugar pertenece. Recoge tus cosas y márchate de aquí.

Anabel por primera vez se enfrentó a su suegra - No lo pienso permitir , ella no ha hecho nada malo , no merece ser despedida.

Su suegra se rió con soberbia - ¿Tú no me vas a permitir a mí? Lo de que cada uno debe conocer su lugar , también va por tí,campesina. Tú no tienes voz ni voto.

Anabel se fue detrás de Matilde llorando - Llévame contigo , no quiero seguir en esta casa .

Matilde- No seas tonta mi niña , tu lugar está junto a tu marido , un día ese hombre abrirá los ojos y te tratará como te mereces , ten paciencia y no te preocupes por mí , estaré bien . Cuidate mucho y no te dejes pisotear por esas dos brujas .

Ahora sí, estaba completamente sola. Pero por fin había abierto los ojos , Matilde tenía razón , no sé dejaría pisotear nunca más.

Habían pasado seis días desde que Fran se fue de viaje. Una mañana llegó su asistente y pidió ver a la señora Anabel, le trajo un teléfono.

Asistente - Señora, el señor Salazar le envía este teléfono, él ha anotado su número en la agenda.

Anabel se quedó mirando sin entender nada, ella no sabía cómo utilizarlo.

Anabel - ¿Y qué hago yo con esto?

Asistente -No lo sé señora, yo solo cumplo órdenes, ahora sí me disculpa...

Anabel lo interrumpió - No, no te vayas, espera un momento. Me refiero a que yo nunca he tenido uno de estos, no sé cómo usarlo.

El hombre sonrió - Ah, es eso, no se preocupe, funciona igual que cualquier otro, es muy sencillo de usar.

Anabel se estaba desesperando - Usted no lo entiende, le estoy diciendo que nunca he usado ninguno, este es el primer teléfono que tengo en mi vida.

El hombre la miró atónito, llegó a pensar que le estaba gastando una broma, pero su mirada era sincera y se notaba preocupada.

Anabel - Por favor, enséñame como se usa. No tengo mucho tiempo, mi suegra llegará pronto, ayúdame.

El hombre se quedó embobado mirando a esa hermosísima mujer. Se sentía conmovido por el modo en que le pedía ayuda, una mezcla de lástima, preocupación y cariño crecía en él. Era la esposa de un hombre poderoso y no sabía usar un teléfono, no tenía sentido.

El hombre se sentó con ella en la cocina y le explicó detalladamente como realizar una llamada o una videollamada, a enviar mensajes de audio o por escrito.

No podía creer cómo ella ni siquiera sabía aceptar la llamada o cortar cuando esta finaliza .

Parecía una niña pequeña con un juguete nuevo, sus ojos brillaban de ilusión a pesar de la tristeza que reflejan. Se dio cuenta de que escribía y leía con dificultad - Lo siento, es que soy muy lenta porque aún estoy aprendiendo a leer y escribir.

El hombre no salía de su asombro, entonces ella lo notó - Por favor, es un secreto, no se lo digas a nadie o se enfadaran mucho conmigo. Ellos no saben que estoy aprendiendo a escondidas.

Asistente - Le doy mi palabra, todo lo que hablemos será secreto. Mire, esto es un buscador aquí puede escribir todo lo que desee saber o también puede pulsar aquí y buscar por voz.

Anabel pulsó donde le dijo - Quiero saber cómo ser feliz.

El hombre sintió una mezcla de tristeza y ternura - Diga solo lo que quiere saber, por ejemplo" Como ser feliz". Aquí puede ver videos del tema que desee y también series y películas. Este pequeño aparato tiene de todo.

Anabel - Ya viene mi suegra, ojalá pudiera quedarse más rato, aún tengo muchas preguntas.

Asistente - Le anotaré mi número también, no dude en preguntarme lo que sea, a cualquier hora, la ayudaré encantado.

Anabel - Muchas gracias, dime tu nombre, por favor, has puesto asistente en el contacto. Otra cosa ,no me hables de usted, ahora somos amigos.

El asistente sonrió - Mi nombre es Alejandro , ya sabes , estamos en contacto.

Anabel - Encantada, Alejandro.

Anabel se encerró de nuevo en su habitación, pero ahora se sentía poderosa, tenía un arma potente en sus manos, su esposo sin saberlo, le dio las alas que intentaba cortarle.

Ahora podía aprender todo lo que quisiera y saber lo que ocurre a su alrededor, ahora podía vivir de verdad, aunque fuera detrás de una pantalla.

Con su marido siguió fingiendo que no sabía usar el teléfono, él se reía de su ignorancia y luego intentaba explicarle su funcionamiento.

Saber que su madre había despedido a Matilde no le hizo ninguna gracia , intentó que volviera al trabajo , pero la mujer era demasiado orgullosa para aceptar , jamás volvería a un casa de donde la echaron injustamente.