Alexander Sullivan nunca deja que las emociones nublen su juicio. Todo en su vida es medido y calculado… hasta que llega Valentina Reyes, su nueva asistente, quien, con su torpeza y su encanto natural, pone a prueba su paciencia y despierta en él un deseo que no puede ignorar.
Valentina necesita este trabajo para ayudar a su familia, pero su jefe es el hombre más intimidante y exigente que ha conocido. A pesar de eso, no puede evitar sentirse atraída por él. Lo que comienza como una relación estrictamente profesional se convierte en algo mucho más peligroso cuando la tensión entre ellos se desborda.
¿Podrá Valentina derretir el corazón de Alexander?
NovelToon tiene autorización de Melizu para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 24
Después de ese almuerzo raro trataron de volver a la normalidad de sus tareas, aunque ambos se morian por encerrarce en esa oficina y devorarse en piel y alma, pero sabian que debian actuar como adultos profesionales.
Esa tarde, en una reunión con los socios franceses, Alex decidió reestructurar un contrato sin consultar con ella, quien había trabajado toda la semana en eso.
Cuando regresaron a su oficina, Valen cerró la puerta y cruzó los brazos.
-No soy solo tu novia. También soy tu asistente.,tu colaboradora. Y merezco que me incluyas.
-Tenés razón. Me cuesta soltar el control y me va a costar que nos amoldemos a esta nueva dinamica- afirma él.
-Estamos aprendiendo. Pero si vamos a hacer esto, lo hacemos como iguales. ¿De acuerdo?- dijo acercandose a él y colocando su mano en el pecho de su bello ogro. Lo que hizo que Alex la tomó de la cintura y apoyó la frente contra la de ella.
-De acuerdo- susurro él y sin más tomo su boca con demasiada demanda.
Cuando se separaron Valen le sonrió.
-No creas que con esto me vas a sobornar señor Sullivan.
-Y que debo hacer para sobornarla Señorita Reyes- dijo con picardía.
-Tal vez esta noche se le ocurre algo- y salio moviendo sus caderas de la oficina de su jefe.
Cuando llego la hora de salida del trabajo Alex se detuvo frente al escritorio de Valen. Ella tenía las gafas puestas, el cabello recogido con una lapicera y la mirada clavada en la pantalla.
-Estás hermosa -dijo con una voz ronca y sexi.
-Estoy hecha un desastre -respondó ella, sin mirarlo.
-Exactamente -sonrió él.
-Estas loco- dijo riendo ella-
-Vamos a casa.
-¿Juntos?- lo cuestiono
-Tengo que sobornar a mi bella asistente, ¿O se le olvidó Reyes?
Ella apago la computadora como si fuera una mujer con hipervelocidad y recogio sus cosas, el la tomo de la cintura y salieron juntos sin importarles la miradas del reto de los empeados.
La locura de los primeros dias al saber la noticia habia disminuido, ero obvio que seguían los susurros y miradas cómplices, pero ambos empezaban a encontrar su equilibrio.
Ambos supieron como separar lo que era la vida laboral de la personal y cualquier diferencia o pelea quedaba en la oficina una vez que salian del trabajo.
Si bien pasaban tiempo juntos al tener a sus suegros en la ciudad y la abuela Clara la cual requeria tratamiento medico no tenian mucho tiempo para ellos mas que el que compartian en el trabajo y Alex lo entendia perfectamente, pero Alex decidio que ese dia debia ser para ellos y olvidarse del mundo un momento. Asi que busco a Valen en su escritorio.
-Esta noche vení a casa. Nada especial. Solo una cena.
-¡¿Usted cocina?!- usa esa manera formal que sabe que lo pone a mil.
-No. Pero tengo servicio de delivery muy eficiente.- dice encogiendose de hombros
-Perfecto. Pero yo llevo postre.
Valen ya había estado allí antes, pero los nervios siempre estaban aunque ya hacia bastante que estaban juntos, su corazon golpeteaba como una adolescente.
Alex la recibió sin corbata, con una camisa arremangada y una copa de vino en la mano y a Valen se le mojaron las bragas ante semejante hombre, no se cansaba de admirarlo y el era conciente de eso y le divertia.
-¡Está cometiendo el delito de estar endemoniadamente atractivo en ropa casual!- dijo sin mas.
-Entrá antes de que me lo crea.. dijo soniendo.
Comieron en la barra de la cocina. Pasta con salsa y pan de ajo. Valen trajo helado artesanal para el postre y el ogro se decepciono ya que el penso que el postre era ella.
-No tenés tele -dijo ella, observando el lugar.
-No la necesito. Prefiero leer.
-Usted es de esos.- dijo usando esa frase que lo vuelve loco.
-No me provoques Reyes, estoy intentando ser un novio caballeroso.
-Y si no quiero que sea caballeroso SEÑOR.
Y eso fue el detonante para que se abalanzo sobre ella y le devore la boca sin compasión, la tomo en sus brazos y la llevo a su habitación, donde las manos no alcanzaban para arrancar la ropa de ambos cuerpos. Estaban ansiosos por saborearse y a Valen se le fue la timidez de golpe dejando que Alex la guie para regalarle la noche más sexi y fogosa de su vida, otra vez.
Despues de tener el mejor sexo de sus vidas Alex la abrazo y la llevo a su pecho mientras acariciaba su pelo y ambos sentian el sonido de la lluvia.
-¿Alguna vez te habías enamorado antes? -preguntó ella, sin mirarlo.
-No. Hubo gente importante. Pero nunca esto.
Valentina asintió contra su pecho.
-Yo pensé que no me iba a pasar. Siempre creí que el amor era para otra gente. La que no se tropieza tres veces con el mismo escalón. A la que no usan para sacarle provecho.
-Tu torpeza es parte del encanto. Pero no me gusta como sono eso ultimo- dice Alex preocupado.
-Es el pasado, no te preocupes ya lo supere y vos me demostraste que no todos son iguales.
Hubo un silencio cómodo. Y entonces él tomó su mano.
- Quiero que quede claro algo.No quiero que esto sea solo un momento. Quiero que aprendamos a vivirlo. A construirlo. Y que formemos un futuro juntos Valen, vos sos importante para mi, jamas te usaria.
Valentina sintió el nudo en la garganta.
-Lo se, me lo demostras todos los dias, y yo quiero lo mismo mi hermoso ogro.- Alex rio ante ese apodo.
Después de un rato Valen hizo el amague de levantarse, pero él la apretó más contra su pecho.
-¿A dónde vas?
-A casa- dice ella.
-Estás en casa nena, ni se te ocurra salir de esta cama y mis brazos.
Y asi durmieron juntos abrazados toda la noche.
Un amor de oficina con inicios escabrosos 🤭 ...pero muy intenso . ..Los más duros caen y los incrédulos vuelven a tener esperanzas 😍
💯 recomendada 😉👌🏼