La Villana Falló En Abandonar Al Protagonista

Después de pensar durante un rato, ví como el caballo de Elian saltó un obstáculo y aterrizó maravillosamente. Aplaudí lo suficientemente fuerte, cómo para que Elian me escuchará. Él giro sobre el caballo y se dirigió a dónde me encontraba. Cuando llegó, bajo del caballo y se detuvo a mi lado.

Elian: ¿Quieres montarlo?

Alexandra: ¿¿Huh...??

Quedé completamente atónita ante sus palabras, nunca había montado a caballo, así que vacilé un poco mientras miraba al caballo y a Elian.

Elian: Puedes mirar lo que hay detrás de la montaña si subimos por allá.

Ante sus palabras no pude evitar volver mi mirada a la montaña, luego hable sinceramente emocionada.

Alexandra: ¡Quiero ir!

Elian: ¿en serio? Entonces...

Alexandra: Erick, súbeme al caballo.

Levanté mi brazo hacia Erick, quien abrió los ojos un poco, era claro que no esperara que le dijera eso, lo llame una vez más. Si le pedía a Elian que me llevará él debía ayudarme ya que no sabía montar a caballo, para hacerlo tenía que tocar su cuerpo, simplemente no podía pedirle a Elian que hiciera eso, no podía hacer eso.

Miraba a Erick, este inclino su mirada y abrió la boca.

Erick: Será un honor para mi, señorita.

Erick se bajó del caballo y extendió la mano con una rodilla en el suelo, sujete su mano y él me levantó con cuidado para que me subiera al caballo.

Alexandra: ¡Wow, esto es increíble!

Por primera vez desde que estaba ahí, sentí que mi personalidad era la de una niña, el lomo del caballo era demasiado alto para el cuerpo de un niño, por lo que me daba un poco de miedo, pero eso no le quitó lo divertido, ya que gracias al caballo parecía más alta que los demás.

No siquiera tuve que preocuparme por Erick, ya que él se había sentado en la parte de atrás, ayudándome a no caerme.

Alexandra: ¿Elian?

Pero él no monto al caballo, solo se quedó quieto, cómo si fuera una estatua. Él simplemente estaba mirando mi mano por alguna extraña razón "¿en qué estará pensando?" volví a llamarlo, entonces sin ninguna expresión, él levanto su cabeza y subió al caballo.

Elian: Vámonos.

Cuando Elian golpeó al caballo con las espuelas, el caballo comenzó a correr a gran velocidad.

Erick hizo lo mismo, sentía que mi cuerpo flotaba en el aire y como el aire rozaba mi cara a gran velocidad.

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Después de que todo el entrenamiento terminó,los caballeros se organizaron para marcharse, Erick que se encontraba al lado de Elian dijo de repente recordando algo.

Erick: Ahora que lo pienso...

Erick miro a su alrededor, abrió su cabeza hacia un lado y abrió la boca.

Erick: ¿Griselda está al tanto del entrenamiento de hoy? Solía venir cuando su horario cambiaba repentinamente, pero está vez... No pude verla.

Erick hablo como si fuera algo inesperado, Elian se encargaba de su horario de entrenamiento, pero todo lo demás, se encargaba Griselda. Si había algún cambio que ella no supiera venía rápidamente con todas sus fuerzas para poder detenerlo.

Además, eso era algo que todo el mundo sabía ya que todos trabajaban para la familia del Duque.

Griselda siempre intentaba entrometerce en todo lo que hacía Elian. Erick quien quería preguntarle más cosas, se detuvo. Elian tiene apenas 10 años. No importa lo mucho que lo cuidara, era extraño que actuará firmemente todo el tiempo. Pero.. Era una idea posible para cualquiera que no fuera Elian.

Elian apenas se había dado cuenta de lo que había dicho Erick, a él en esos momentos no le importaba, ya que su espíritu estaba en otra parte. Más sin embargo, su nerviosismo y sus pensamientos estaban puestos en Alexandra, quien de repente entendió que ella era su esposa.

Quizá por eso, no entendía cómo iba a pasar el tiempo con ella. Elian había sufrido pesadillas gracias a Griselda y cuando se calmo, recién se dió cuenta que no había visto a Alexandra en varios días. Con la cabeza revuelta, Elian se daba cuenta por primera vez, que aquella niña estaba marcando su vida.