María Cavalcante, una joven de 19 años que perdió a sus padres en un accidente hace 3 años, tiene una amiga, la mejor y única, Beatriz Menezes. Se conocieron en la facultad donde María es becada, muy estudiosa siempre fue muy esforzada y la mejor de su clase, no dejó que el dolor la consumiera. Ella heredó un apartamento de sus padres y se quedó sola, ahora, en la etapa final de la facultad, necesita un empleo, y ¿quién la ayudará? Su amiga, que viene de una familia acomodada, y su tío, un solterón convicto, decepcionado de la vida por encontrar a su novia con su primo, Júlio, en una despedida de soltero pocos días antes de la boda... Hoy, a sus 39 años, no quiere más relaciones a pesar del vacío y la soledad, ha decidido que las mujeres son solo por una noche... Hasta que una pequeña morena aparece... parece frágil... pero es un huracán...
Tu amigo Gael también tendrá algunas sorpresas...
Los espero...
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cap 19
Mary
Lo miro incrédula, pero entro y me quedo de pie esperando.
Rafael
¿Qué pasó afuera? ¿Ya estás creando enemigos sin ni siquiera llegar?
Mary
No hice amigos, fui a tomar un café con Michel de Recursos Humanos, estaba en mi horario, volví a tiempo, no hice nada irregular, solo una persona fue amable conmigo en esta empresa.
Rafael
Entendí la indirecta, pero no me importa. No estás aquí para conseguir novios.
Mary
Me enfurezco. Una lágrima cae sin control. No necesito esto, no tengo novio porque no quiero. Si quisiera, no necesitaría esta empresa para conseguirlo.
Rafael
Eh, más respeto.
Mary
¡De acuerdo! Salgo de la sala. Lo escucho decir que vuelva, pero ya no me importa. Entro y comienzo a recoger mis cosas.
Rafael
Voy tras ella, no me deja hablando solo... Ella no me responde y sigue guardando cosas en su bolso. Entonces me acerco, la tomo del pulso y la obligo a mirarme, pero no esperaba que se pegara a mi pecho, tan agitada, con furia en sus ojos. No te he despedido.
Mary
Me he despedido yo misma.
Rafael
Ah, entonces no aguantas la presión, ¿no?
Mary
Maldito aroma, maldita boca tan cerca... Gato, lindo e insoportable... No voy a soportar esto, y si puedes soltarme...
Rafael
Estaba tan concentrado en sus labios y en su aroma que me di cuenta de que no la había soltado... Maldición. Mira, no quiero que te vayas. Pero si te vas, no te aceptaré de vuelta. Salgo y cierro la puerta.
Mary
Esa desgraciada no tendrá esa satisfacción. He enfrentado serpientes peores... Espera... él dijo que no quiere que me vaya...
Rafael
¡Ah, qué idiota! Soy increíble, no quiero que te vayas. Imbécil. Después de unos minutos, ella entra sin decir nada y me entrega unos documentos...
Mary
Firma, lo necesitas. Espero a que los firme, tomo los documentos y me voy a mi oficina. Al final del día, recojo mis cosas y voy a la parada de autobús. Encuentro a Michael y le cuento lo ocurrido. Él sonríe y lo encuentra divertido. Le doy un ligero golpe en el hombro y cuando estamos riendo por eso, veo a Rafael pasar en su auto, mirándome con cara de pocos amigos. Me siento de alguna manera acorralada.
Rafael
Cuando ella me miró, su sonrisa desapareció, sentí decepción. Debería estar enamorada de ese tal Michel. Si supiera quién es él. Pero también, por caer en cualquier engaño. Y no tengo nada que ver con eso. Voy a la casa de Dilan para hablar con él un poco, tal vez decirle algunas groserías. Después de todo, se lo merece por meterme en este lío.
Mary
Subo a mi autobús y voy a casa. Mi día estuvo lleno hoy. Quiero descansar, ducharme y sentirme en paz... Recibo un mensaje de Bia diciendo que había separado algunas cosas para mí y que las traería esta noche. Le envío otro mensaje de confirmación y guardo el teléfono. Aún estoy traumatizada por el robo.
