NovelToon NovelToon
UN DULCE AROMA A FLORES [OMEGAVERSE] BL/YAOI.

UN DULCE AROMA A FLORES [OMEGAVERSE] BL/YAOI.

Status: Terminada
Genre:Yaoi / ABO / Pareja destinada / Contratadas / Completas
Popularitas:2M
Nilai: 4.8
nombre de autor: Dalianegra

PRIMERA PARTE DE LA TRILOGÍA AROMAS.
SIN EDITAR.
Éley es un omega recesivo.
Lukyan es un alfa dominante.
Ambos se conocen en una noche en un bar y se vuelven amigos, sin embargo, hay un problema. Lukyan tiene un desagrado por los omegas debido a las situaciones por las que ha pasado durante toda su vida. Se mantiene alejado de todos ellos volviéndose odiado por muchos omegas y alfas. Ante eso, Éley finge ser un beta porque, debido a que es recesivo su aroma no se nota. No obstante, un día cuando Lukyan siente un dulce aroma a flores, todo cambia.
¿Para bien?
¿Para mal?
Solo queda descubrirlo...

NovelToon tiene autorización de Dalianegra para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

17.

Éley lo vio parado ahí cubriendo su nariz y sosteniendo su mochila, quiso acercarse a él porque solo quería tocarlo. Solo quería estar cerca de él y nada más. Todo lo que su cuerpo le pedía era a Lukyan casi de forma descontrolada.

Su cuerpo estaba caliente y la fiebre seguía aumentando. Las feromonas que comenzaba a liberar eran cada vez más intensas y Lukyan sintió asco, sintió ganas de vomitar y un enojo descomunal. Lo vio casi arrastrándose a él en el suelo y retrocedió. Solo tiro su mochila al suelo y salió cerrando la puerta del baño sin importarle lo que le pudiera pasar.

El pelirrojo quiso hablar, quiso llamarlo y, a pesar de que estaba consumido y sus pensamientos estaban nublados por el celo que había despertado en él, fue capaz de darse cuenta de todo lo que había sucedido. Fue capaz de darse cuenta de que Lukyan lo sabía todo y en su mente se quedó intacta la imagen que solo le daba a entender la cantidad de asco que él había sentido al enterarse de todo.

Como pudo, tomo su mochila y saco su teléfono. El pitido de la llamada sonó una vez seguida de otra hasta que alguien al otro lado de la línea contesto.

—Hola —habló Cheng.

Éley respiro de forma ruidosa y cerró sus ojos mientras sostenía el teléfono.

—¿Éley? ¿Estás bien?

Se quedó escuchando su respiración dificultosa y lo conocía bien para saberlo todo, entonces solo preguntó:

—¿Dónde estás?

—Baños —habló y se movió hasta pegar su espalda en la pared y quedar sentado —. Baños de la universidad.

—Voy para allá.

Minutos después cuando la puerta fue abierta, Cheng se vio cansado. Era obvio el hecho de que había corrido por minutos incontables y corrió hasta él para ayudarlo. Tocó su frente, pero seguía ardiendo. Miró a todos lados, pero no parecía que hubiese entrado alguien. Solo quería sacarlo antes de que llegará alguien porque sabía que pelear con un Alfa no le iba a resultar sencillo. Éley se aferró a él con fuerza y enterró su rostro en su cuello con desesperación para olerlo.

—Ayúdame —susurró —. Cheng, ayúdame, no puedo soportarlo más. Quiero ver a Lukyan.

Él tomó su mochila y luego levantó a Éley del suelo.

—Saldremos rápido. Tengo el auto afuera, solo espera un poco.

—Llama a Lukyan —repitió —. Es por su culpa.

—¿Por Lukyan entraste en celos? —preguntó y no pudo evitar imaginarse miles de cosas del por qué había sucedido aquello. Solo pensó en el hecho de que el Alfa ya lo sabía todo.

Lo sintió oler su cuello y caminó de forma rápida por el pasillo. Miró a todos lados porque lo que menos deseaba era encontrarse con un Alfa. Cuando estuvo en el estacionamiento, lo metió en el auto y lo rodeó para subirse también de forma audaz. No quería perder ni un solo segundo, no por querer tener sexo con Éley, sino para mantenerlo alejado de los Alfas que sabía que se podían poner como locos.

—Vamos a casa, solo dame un minuto —pidió, pero Éley estaba casi desesperado.

Solo quería dejar de sentir la calor en su cuerpo. Solo quería que alguien lo tocara para que todo se pudiera calmar, pero a pesar de que siempre se conformaba con Cheng, ahora no era lo que quería. Solo quería al Alfa. Todos sus pensamientos, sentimientos y latidos de su corazón lo llamaban. Lo imaginó encima de él besándolo y más y solo provocaba que el deseo sexual aumentará sin cesar.

—Tengo calor —susurró e intento quitarse la ropa.

—No, espera.

Cheng tomó sus manos para mantenerlo quieto, pero le estaba resultando imposible. Sabía que el ciclo de Éley no era intenso, era algo pasajero que solo duraba menos de cinco horas o máximo un día, pero ahora se estaba comportando de una manera diferente y lo entendió. Entendió que él no era Lukyan, no era un Alfa y que esta vez él no se iba a conformar con un simple Beta incapaz de darle lo que él quería: feromonas.

—Cheng —gimió y se acercó a él.

Intentó mantenerlo quieto porque estaba manejando y no sé la estaba haciendo fácil. Ya demasiado había sido con el tener que pedir permiso con urgencia del trabajo para ir por él. Cuando logró llegar a su departamento, se estacionó y lo sacó fuera de forma rápida. Intentó hacerlo lo más rápido posible porque sabía que en el departamento vivían más Alfas a los que no tenía intenciones de alborotar.

—Ah... ayúdame, solo ayúdame un poco —pidió.

Cuando todo finalizó, Cheng lo vio dormido en su cama. Soltó un suspiro y lo vio despertar de forma lenta. Miró a todos lados hasta que quedó sentado en la cama casi desorientado porque una parte de él no sabía qué había ocurrido exactamente. Tragó saliva y paso las manos por su rostro. Observó a su amigo que solo estaba ahí de forma amable. Solo tenía sus pantalones puesto y Éley tenía ropa limpia puesta.

Se quedaron mirando por uno segundos, entonces, Cheng preguntó:

—¿Recuerdas lo qué pasó? A veces no recuerdas bien.

Y tenía razón, a veces olvidaba las cosas que pasaban debido al celo y Cheng se las recordaba, pero ahora tenía todo claro y nítido en su mente.

—Si lo recuerdo —susurró.

—¿Sabe qué eres Omega?

Asintió de forma triste casi sintiendo un nudo en su pecho y solo comenzó a llorar porque se sintió débil y pequeño. Tenía el rostro vivo de Lukyan mirándolo con asco y, por un momento, sintió su corazón irse rompiendo de forma lenta, pero extremadamente dolorosa.

—Él me vio y me miró con asco —sollozó y Cheng lo abrazó —. Fue su culpa, el ciclo me llegó porque él quiso besarme. Tenía ganas de besarme, pero cuando me vio así pude ver que se arrepintió de todo.

Su amigo lo sostuvo porque estaba llorando con fuerza y casi de manera desgarradora. Acarició su cabello y soltó un suspiro.

—Te lo dije, Éley. Te dije que él era así, pero no quisiste escucharme.

—No me siento bien —murmuró —. Mi pecho duele mucho y, a pesar de eso, quiero verlo.

Ninguno dijo algo por unos segundos y el pelirrojo se alejó para limpiar sus mejillas.

—Cuando me vio, dijo: eres un maldito Omega. Sentí que sus palabras me habían atravesado el corazón porque me gusta. Siento que me gusta tanto desde que lo vi y creí que yo también le gustaba.

—Tal vez le gustaba el Éley Beta. No debiste mentirle.

—Lo vi cubrirse la nariz y solo me tiro la mochila para irse y dejarme ahí. No le importó si llegaban otros Alfas o algo me sucedía. ¿Por qué hizo eso? —se preguntó sintiendo que su pecho dolía —. Yo no quise que eso pasará, pero él se acercó mucho y me tocó.

—Tranquilo, Éley, todo va a estar bien.

—¿Puedo quedarme aquí? No quiero ir a casa.

Cheng solo asintió y se quedó sentado a su lado hasta que lo vio dormido de nuevo. Acarició su rostro y sintió lástima por su amigo porque le gustaba justo lo más peligroso y oscuro. Había escuchado muchas cosas sobre las feromonas de Lukyan. Algunos decían que eran como entrar al infierno, otros decían que eran venenosas como el veneno de una serpiente y otros que eran tan podridas como algo muerto.

Por un momento, pensó en que, ¿cómo Éley iba a soportar algo como eso cuando sus feromonas eran tan dulces? Y es que nunca las había sentido, pero Éley ya se las había descrito algunas veces y había sido suficiente para saber que debían ser las feromonas más dulces y tiernas que podían existir.

Entonces, ¿cómo unas feromonas dulces podrían mezclarse con unas feromonas malditas?

1
Valentt Ramírez
me encantó un 10/10/CoolGuy//Drool/
Joanna Villamil
ay no mames precioso, solo le diste un dibujo y dos comidas jsjsjsjsjsjs vete alv ¿acaso eso es mucho? bare minimum
Berenice Hernández
😭😭😭pobre serás un super papá 😭😭😭
Berenice Hernández
lukyan que no sabes que leer es muy educativo 🤦🏼‍♀️
Berenice Hernández
🙈 no sabía que tenía conocimiento de la biblia 🤣🤣
Berenice Hernández
esto suena a embarazo 🤔 y no se han dado cuenta 🙈
Berenice Hernández
😭😭😭😭😞
Berenice Hernández
😭😭😭
Berenice Hernández
😂 idiota como se te ocurre golpearlo ahora tendrás 3 alfas tras de ti 🤣
Berenice Hernández
😮😮así sin más se lo sueltas si serás tonto lo espantas 🤦🏼‍♀️
Berenice Hernández
no que no ibas a correr,🤣🤣🤣miedoso
Berenice Hernández
😂😂😂😂
Berenice Hernández
🤣🤣🤣🤣🤣 de todas mis lecturas es la única que lei algo así 🤣🤣🤣
Berenice Hernández
😂como no si lo espantas tonto 🤦🏼‍♀️
Berenice Hernández
😭😭😭no como pudieron hacerle eso desgraciados 😭😭
Berenice Hernández
😭😭😭😞😞
Berenice Hernández
🤣🤣🤣🤣🤣🤣
Berenice Hernández
😱😱 que susto
Berenice Hernández
🤣🤣🤣🤣
Berenice Hernández
🤣🤣🤣
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play