Cuando El Villano Gana

Marshall sale y toma el sendero alcanzando a los tres dragones. Akai mira que lleva a Elizabeth en sus brazos y le pregunta con un tono preocupado...

— Marshall... ¿Que le hiciste ahora?

Responde afincado su voz— no le eh hecho nada...— él mira a los ojos cerrados de ella y no puede evitar pensar lo siguiente...

¿Que será lo que le preocupa?... Mi corazón no es...— recuerda el pequeño momento de angustia que pasó Elizabeth—... No quise seguir con ese tema que le incomodaba, pero desde ahí viene su comportamiento afligido... Esto me da mala espina...

Aoi y kagura no dejaban de ver el pecho de Marshall y Elizabeth... Sin embargo, no hacen ninguna pregunta... Akai se detiene, mira al frente y dice con melancolía...

— ya llegamos... Al parecer no ah cambiado nada...— tras pasar por el sendero del bosque llegan a una tierra con terreno amplio y un pequeño pueblo en él...

Elizabeth se había quedado dormida en el pecho de Marshall, sin embargo, aunque estaba soñando, para ella era real... Su sueño es en el momento en el que ella vio por última vez a su hermano...

Estoy en mi habitación en un día de lluvia leyendo un nuevo libro que mi hermano Emanuel me regaló. Luego escucho que la voz de mi madre se alza contra la de él... Cerré el libro y decidí asomarme en el marco de la puerta de la cocina... Lo único que entendía era que mi madre estaba molesta con mi hermano... No sabía el porqué... Hasta que el me vio y se acercó a mí, se agachó por mi estatura y me puso una mano en el hombro...

— Elizabeth.... Me iré y no se cuándo volveré. No creo que podré cumplir las promesas que te hice... Aún así, prometo volver a tú lado... Eliz, Perdoname.

Se levanta y ya no cruza más palabras con mi madre... Lo único que comprendí fue que jamás volvería... Fue ahí donde lo único que me importaba era alcanzarlo... Que no me importaba mi madre o padre... Salí corriendo cuando ya no lo vi... No me puse lo zapatos y salí del departamento con mi piyama... ¿La lluvia?... Tampoco me importó.... Vi en el momento en el que se montó en su carro, sé que el me vio... Ya que no arrancó de inmediato... Salí y fue en el momento en el que él acelera su auto... La lluvia no me impidió salir corriendo tras él, aunque sabía que no lo iba a alcanzar no paré de correr... Mi madre me atrapa en medio de la lluvia.... Yo gritaba su nombre sin parar... El último grito fue el más fuerte que hice...

Elizabeth se despierta de repente y ella grita el nombre...

— ¡EMMANUEL!— respiraba agitada... Sudaba gota a gota... Todo fue tan real.... Fue como si volviera en ese tiempo... No, por favor, no... Las lágrimas salen solas, yo intento detenerlas....

— ¡ELIZABETH!...— entró Marshall gritando mi nombre... Él me ve con las lágrimas cayendo y se coloca delante de mí, me toma las mejillas con ambas manos y va limpiado las lágrimas con su pulgar...— ¿Dime qué pasa, Elizabeth?...

— Marshall... Yo... Solo fue un sueño, no fue nada ... — observo la habitación y pregunto— ¿Donde estamos?... ¿Ya llegamos a la aldea?...¿Cuanto tiempo dormí?— Marshall quita sus manos y yo pongo la mía en la frente...

— dormiste una hora y ya para de decir que no es nada. Se que no era un sueño... Era una pesadilla, balbuceaba asustada... Y ahora, te encontré agitada y llorando... Para y dime la verdad... No ves que me preocupas Elizabeth...

— ¿Eh?... ¿De verdad?— pregunté ingenuamente.

— cielos... Me cuestas sacar las palabras... Pero sí, me preocupas desde que llegamos aquí...

Me levanté de la cama aún mareada de todo lo sucedido, Marshall me sostiene de la cintura para estabilizarme... Luego el me dice seriamente...

— esperaré el momento en el que me digas que te pasa... Pero si vuelvo a encontrarte en ese estado te obligaré...

Me reí un poco y le hablé— pensé que te gustaría ver mi sufrimiento... ¿No era lo que querías hace tiempo?

— lo era... Ahora quiero otra cosa de tí...

— ¿Y qué es?

Me mira y me sonríe— que confíes en mí desde ahora...

— lo haré con toda seguridad...— aún sí, no soy capaz de contarle lo que tengo... Me llamarán hipócrita... Pero no es fácil abrir la herida que por años trataba de sanar... Desvíe el tema y le pregunté sonriendo a Marshall— ¿Que tal si nos vamos junto a Akai?... Me da curiosidad saber qué pasó con él y la chica...

— conozco a Akai y esa mujer es todo lo contrario a sus gusto...

— Marshall... Akai se quedará con ella. Se que puede sonar muy apresurado pero vi los momentos exacto cuando los dos se miraban... Ahí hay chispa...— él apreta más mi cintura y dice con atrevimiento...

— oh... ¿Que hay de lo nuestro?...

— al principio era forzado... Ahora es genuino...— me abraza pero no separa su vista de la mía...

— ahora que lo recuerdo... Tenemos que continuar lo que dejamos pendiente...— dijo el pícaramente...

Yo le seguí el juego con el mismo tono de voz...— ¿Que era?... Marshall... ¿Me lo podrías recordar?— acerca más su cara a la mía.

— será un placer...— apunto de besarnos una voz nos interrumpe...

— vaya, ustedes dos si que se aman...— era Aoi quién jugaba con su aretes y miraba seriamente...

Era esperarse que Marshall se molestara...— ¿Que quieres?

— simplemente vengo a decirle que Akai lo está esperando... Sígame, lo guiaré hacia él...— Aoi es el primero en caminar, luego Marshall y yo iba tras él... “Elizabeth" esa voz nuevamente.... Respiré profundo y empecé a seguir a Marshall. Haré lo posible para que ese sentimiento no vuelva a salir... No quiero que Marshall o Akai se preocupe, tampoco puedo desviar mi misión con crearle el corazón a Marshall... Tendré que ser más fuerte... ¿Pero seré capaz de aguantarlo?

gracias por leer 😁