SIN MIEDO AL ÉXITO

Mientras miraba hacia la oficina, donde su jefe aún estaba riendo y jugando con su hija, Naudi se permitió soñar un poco. Soñó con la posibilidad de que su jefe la viera como algo más que solo una empleada, de que la viera como una mujer con sentimientos y deseos, y aunque sabía que era un riesgo que podría terminar lastimándola, Naudi no podía evitar sentir una pequeña chispa de esperanza en su corazón, tal vez, justo tal vez, su jefe estaba empezando a verla de una manera diferente, y tal vez, justo tal vez, eso podría llevar a algo más entre ellos.

A la hora del almuerzo estaban los tres comiendo muy animados, El jefe se permitió soñar por un momento, imaginándose a sí mismo como el esposo de Naudi y el padre de Sofía, se imaginó viviendo con ellas, compartiendo momentos felices y difíciles, y creciendo juntos como una familia. Pero pronto regresó a la realidad, recordando que Naudi era solo su empleada y que no había nada entre ellos más allá de una relación profesional. Se sintió un poco triste y melancólico al darse cuenta de que su fantasía no era posible.

A pesar de eso, no pudo evitar sentir una conexión especial con Naudi y Sofía. Se sentía atraído por la bondad y la calidez de Naudi, y por la energía y la curiosidad de Sofía. Y aunque sabía que no podía ser su familia, se sintió agradecido de poder ser una parte de sus vidas, aunque fuera solo de manera profesional. Rodin había aprendido a confiar plenamente en Naudi, no quería hacerla sentir mal, no quería que se apartara de el aunque ya tuviera familia.

El escolta que siempre estaba en la puerta se alejo un poco, Naudi le había dicho a su jefe que el la ponía nerviosa, Rodin le pidió al hombre que se alejara un poco pero que estuviera muy pendiente.

A la hora de la salida Naudi fue a la oficina por su sobrina, ella miró con tristeza a Rodin y dijo.

SOFIA: ¿Ya no nos veremos más?

RODIN: ¿Porque no?

SOFIA: Porque ya mi mamá no me va a traer más, tengo que ir a la escuela y los sábados no trabajan.

RODIN: Pero te puedo invitar un sábado a comer un helado.

SOFIA: ¿De verdad?

RODIN: Si, si tu mamá acepta.

Naudi sonrió y les dijo que podían salir un sábado, para ella era probable que la invitación a comer un helado sea el comienzo de una relación más cercana entre ella y su jefe. A medida que pasen más tiempo juntos, es posible que se desarrollen lazos emocionales más fuertes entre ellos, o por lo menos el mostrará indicios de algo.

Naudi se fue con Sofi a su casa, después de su rutina de bañarse y ponerse ropa cómoda fue a la cocina para ayudar a su hermana, mientras cocinaban hablaban de cómo les había ido a cada una, Naudi contó la osadía de Sofía con su jefe, Shirly sonrió y le dijo a su hermana.

SHIRLY: El debe sentir algo por ti, porque ese cambio que tuvo desde que tu entrastes es por algo.

NAUDI: Solo porque me necesita como buena empleada que soy.

SHIRLY: No mija, un jefe no se deja insultar de una empleada recién llegada y no pasa nada, tu rompes reglas y el te lo permite.

NAUDI: Para que no renuncie, por eso lo acepta.

SHIRLY: Si tu lo dices, pero yo creo lo contrario, esta enamorado.

Las dos hermanas cocinaban mientras charlaban, a ella se les unió Sofía contando todo lo que hizo en la oficina, después de cenar cada una fue a su cama. Al día siguiente Naudi se levantó temprano, recogió la ropa sucia de ella, su hermana y sobrina para lavar, eran las seis de la mañana, Shirly también se levantó porque iba a trabajar, mientras Naudi lavaba ella hacia el desayuno.

A las nueve de la mañana ya la ropa estaba limpia, el apartamento organizando y Sofía recién levantada, Sofía después de desayunar se baño y lo mismo hizo Naudi, como tenia sueño dijo.

NAUDI: Sofi, yo tengo sueño, me levante temprano y tu recién te levantas, así que, yo voy para los brazos de papá Morfeo para que me abrace fuerte y me caliente porque hace mucho frío, y tu te quedas a mi lado viendo televisión ¿Estamos?

SOFIA: Estamos mami, pero.... ¿Quién es papá Morfeo?

NAUDI: El dios del sueño, cuando te da sueño es porque papá Morfeo te está llamando a sus brazos para consentirte con un fuerte abrazo, te duermes y tienes hermosos sueños.

SOFIA: A... pero... ¿y cuando tenemos pesadillas y estamos en sus brazos porque lo permite?

NAUDI: Porque chuqui nos quita de sus brazos y nos carga el para asustarnos, pero casi siempre estamos en los brazos de Morfeo que nos cuida con Dios, porque Dios es el más poderoso del mundo.

SIFIA: Si.. mi abuela dice que si uno le pide a Dios con fe todo sale bien.

NAUDI: Así es mi amor, bueno vamos que voy a dormir media horita, se quedas a mi lado sin hacer travesuras, déjame dormir un ratico porque si no me dejas dormir tranquila papá Morfeo se molesta mucho.

SOFIA: Ok mamita.

Naudi se acostó y a los pocos segundos se quedó dormida porque tenía un sueño profundo, ella ponía la cabeza en la almohada y quedaba dormida rápidamente.