Curvas Al Exito

Así paso el mes y una Nueva Amenaza se avecinaba.

Benjamín se encontraba en su oficina, inmerso en los asuntos de su empresa. Desde la revelación en su boda, su enfoque en el trabajo había sido su refugio. Sin embargo, algo extraño había estado ocurriendo en la empresa: proyectos clave se habían retrasado inexplicablemente y algunos contratos importantes parecían estar en peligro.

Decidido a enfrentar la situación, Benjamín convocó a una reunión con su equipo directivo. Tras revisar minuciosamente cada detalle, descubrió que había habido intentos de sabotaje. Sin embargo, su capacidad para anticipar problemas y su rápida respuesta permitieron que la empresa saliera ilesa de los ataques.

Benjamín: (con determinación) Gracias a todos por su arduo trabajo. Hemos superado este obstáculo, pero debemos estar más atentos que nunca. No permitiremos que nadie nos desestabilice.

Mientras tanto, en un rincón oscuro de la ciudad, Valery y Leonardo se reunían en secreto. Valery, estaba furiosa por cómo sus planes habían fallado.

Valery: (molesta) ¡No puedo creer que haya logrado solucionar todo tan rápido! Pensé que esto lo destruiría.

Leonardo: (con una sonrisa fría) Subestimamos su capacidad. Pero esto es solo el comienzo. Tenemos que atacar donde más le duele, Valery. Ariel y su hijo son la clave. Si logramos separarlos definitivamente, Benjamín no podrá mantenerse enfocado en su empresa.

Valery: (con malicia) Tienes razón. Ariel es su debilidad. Pero, ¿cómo lo haremos?

Leonardo: (pensativo) Tengo algunos contactos que pueden ayudarnos. Vamos a poner en marcha un plan que haga que Ariel dude aún más de Benjamín y lo abandone para siempre. Y cuando él esté en su punto más bajo, atacaremos su empresa de nuevo.

Valery: (asintiendo) Muy bien, hagámoslo. No descansaré hasta ver a Benjamín destruido.

Con un nuevo plan en marcha, Valery y Leonardo comenzaron a mover sus piezas, decididos a acabar con Benjamín y Ariel. Mientras tanto, Benjamín, ajeno a la nueva amenaza que se cernía sobre él, seguía luchando por demostrar su amor y cambiar para mejor, sin saber que la verdadera batalla apenas comenzaba.

Leonardo y Valery diseñaron un plan meticuloso para sembrar más dudas y enojo en el corazón de Ariel, utilizando tácticas manipuladoras y engañosas.

Leonardo tenía acceso a un hacker que podían falsificar mensajes y crear montajes fotográficos.

Valery decidió enviar mensajes de texto a Ariel desde un número desconocido. Los mensajes insinuaban que Benjamín todavía estaba en contacto con Valery y que planeaba volver con ella una vez que naciera el bebé. Además, enviarían fotos editadas de Benjamín con otras mujeres, incluidas algunas recientes con Valery, para hacer creer a Ariel que él no había cambiado y seguía siendo infiel.

Leonardo contrató a un detective privado para seguir a Benjamín y Ariel. El detective tomaría fotos de Benjamín en situaciones que pudieran ser malinterpretadas y las enviaría a Ariel. Por ejemplo, fotos de Benjamín cenando con una clienta o asistiendo a reuniones con mujeres de negocios, acompañadas de mensajes sugerentes sobre la naturaleza de esos encuentros.

Valery comenzó a difundir rumores en el círculo social y profesional de Ariel, insinuando que Benjamín solo se estaba portando bien por ahora y que volvería a sus antiguas costumbres una vez que naciera el bebé. Estos rumores llegaban a Ariel a través de amigas preocupadas y colegas bienintencionados, incrementando sus dudas y miedos.Leonardo también planeaba atacar la empresa de Benjamín para desestabilizarlo aún más. Contrató a un grupo de empleados desleales para sabotear proyectos clave desde dentro y hacer parecer que Benjamín estaba perdiendo el control de su empresa, lo que le causaría estrés y distracciones, afectando su comportamiento y relación con Ariel.