Segunda parte de casualidad o destino, en donde se relata lo que paso con Carlos y Liz después de que supimos de ellos, relatando como el pasado puede volver afectándonos, no solo a nosotros, sino a nuestros seres más queridos, además de mostrar, como es obligación de los padres apoyar a sus hijos, para que no paguen los errores cometidos por estos.
NovelToon tiene autorización de Israel Cruz para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
LOS XV
Los preparativos para la fiesta, comienzan, Carolina ensaya diariamente, junto con los chambelanes, las invitaciones han sido entregadas, a familiares y amigos, la iglesia y el salón ha sido reservados, todos los adornos están listos, los centros de meza ya han sido pedidos, todo lo necesario para la gran fiesta está encargado para el gran día.
Las manecillas del reloj avanzan rápidamente, la iglesia es ocupada poco a poco por los invitados, Carolina entra con un vello vestido azul cielo, lleno de brillos, desde el corcet, hasta la falda, un peinado alto y sandalias de tacón.
La misa comienza, los sermones del padre, son escuchados atentamente, al terminar el servicio, empiezan a desalojar la iglesia, la feliz quinceañera y su corte suben a la limusina, la cual los pasea por la ciudad hasta llegar al salón.
Al llegar al salón, Carolina es recibida por la clásica tonada de las quinceañeras y aplausos de sus invitados, el DJ anuncia que la reina de la fiesta, ha llegado, Carolina avanza hacia la mesa de honor, donde la esperan sus padres, al sentarse, el servicio del salón empieza, con el clásico baile de los meseros, servir la comida y bebidas, al terminar empieza el servicio, ante la mirada complacida de invitados hambrientos.
La comida que se sirve es un clásico de estas fiestas, carnitas con sus respectivos acompañamientos, siendo acompañados por bebidas que consisten en refrescos y los clásicos, tequila, ron y cerveza, mientras la comida es consumida la fiesta avanza y pasado el tiempo el DJ pide la atención de todos los presentes y la presencia de Carlos y Liz para dar el clásico discurso; la primera en hablar es Liz.
Liz:
Gracias a todos por acompañar a mi hija en este día tan especial, Melina eres una buena hija y siempre agradeceré al destino que hayas llegado a nuestras vidas, ya que como hemos dicho todo pasa por una razón y la razón que estés aquí es la felicidad que trajiste, a tu padre, hermanos y a mí al ser mi única niña.
Carlos:
Como ya lo dijo Liz, les agradecemos a todos por acompañarnos, para ti mi Melina Carolina, aunque ya estés grande a mis ojos, siempre serás mi pequeña, y siempre estaré aquí para cuidarte y al igual que tu madre para apoyarte cuando nos necesites.
DJ:
Un plauso para, los papas de nuestra bella festejada. Después de estos bellos discursos, iniciaremos con el vals de nuestra hermosa quinceañera; mientras se prepara nuestra festejada y su corte de honor se prepara, esta es primera llamada.
La fiesta continua, con Carolina preparándose, mientras los invitados siguen comiendo y bebiendo, en cuanto se oye la voz del DJ.
DJ:
Esta es segunda llamada.
Al escuchar, estas palabras, la gente se empieza, a preparar, para ver con qué vals iniciarán.
DJ:
Esta es tercera llamada, comenzamos.
El primer vals es de apretura siendo, Se busca Doogy Degli Armonium, el cual es bailado con una, coreografía
hermosa y delicada, con cargadas a la quinceañera por parte de los chambelanes.
DJ:
Un aplauso, para nuestra guapa festejada y su corte de honor.
Los aplausos no se hacen esperar y la festejada, junto con los chambelanes, realizan una reverencia.
DJ:
A continuación, solicitamos la presencia, de la madrina de coronación, la señorita Sonia Aguilar.
Acompañada, de los chambelanes y con la balada flauta de pan de Edgar Civallero Sonia es llevada ante Carolina, al llegar con Carolina, retira el tocado de la cabeza, le coloca la corona y le entrega un cetro en las manos.
DJ:
Solicitamos, la presencia de la madrina de último juguete la señorita Citlalli Mora.
Citlalli avanza con la melodía Corazón de niño de Raúl Di Blacio, cargando un oso gigante, el cual Carolina abraza con mucha ternura.
DJ:
Solicitamos, la presencia de la Madrina de copas, la señorita Marina Velázquez, pedimos por favor que todos alcen su bebida para brindar con nuestra, hermosa festejada, todos 1, 2, 3 ¡Salud!
Las copas, son llenadas con delicioso vino, el cual es bebido por Carolina, sus chambelanes y Marina.
Dj:
A continuación tendremos, el primer vals de nuestra quinceañera que pasa de niña a mujer, con sus chambelanes.
Presentando a:
Carlos Cruz Jr.
Aldebaran Cruz.
Adonai Hernández
Dibiel Jiménez.
Uno a uno los chambelanes son presentados, haciendo una elegante reverencia mientras bailan con Carolina, terminando está en el centro de la pista mientras los cuatro hombres quedan como escoltas de ella.
DJ:
A continuación continuamos con el vals familiar, pedimos la presencia de Carlos Cruz, Carlos Cruz Jr., Aldebaran Cruz, Alejandro Cruz, Esteban Higuera, Néstor Higuera, Francisco Mora, Francisco Gonzales.
Uno a uno los hombres de la familia van pasando a bailar con Carolina, con la melodía de matrimonio de amor de Richard Clayderman, ante los aplausos de todos los asistentes.
Dj:
A continuación nuestra bella quinceañera, y sus chambelanes, realizan un cambio de vestuario, para su siguiente baile, sigamos disfrutando, de este bello evento.
Al concluirse el cambio de vestuario, Carolina, sale con un vestido negro a las rodillas, de tirantes con vuelo y un listón blanco en la parte de atrás, combinando con tacones, sus chambelanes con un smoking de gabardina negro, con corbatín azul, tirantes sombrero y camisa blanca.
El tango es bailado de manera elegante y rítmica, con gran alegría en sus rostros, ante la mirada de los invitados, que al terminar, pedían a coro otra, otra, a lo cual la festejada y los chambelanes complacen a la audiencia y bailan otra vez llevándose las palmas.
DJ:
Un aplauso, para nuestra festejada y su corte de honor.
Al terminar, el tango, los chambelanes rodean a Carolina, para gritar una porra, mientras pisan fuertemente.
Chambelanes: ¡chiquitibun a la bimbomba, chiquitibun a la bimbomba, a la vio, a la bao, a la bimbomba Carolina, Carolina rararaaaa!
Al continuar la fiesta, los invitados bailan, distintas canciones, divirtiéndose junto con la festejada y su familia, haciendo sentir un ambiente de alegría, felicidad, llegando otro momento dentro del programa.
DJ:
Ha llegado el momento de que nuestra festejada parta el pastel, pedimos al señor Francisco, padrino de pastel, que se una en el centro de la pista para partir el pastel.
Hasta ese momento todos se preguntaban cómo era el pastel el cual nadie había visto, apareciendo un pastel de color rosa de 15 pisos con un adorno en forma de Carolina en la punta.
Las mañanitas suenan y a terminar, Carolina realiza el primer corte del pastel, para que después sea repartido a los invitados.
La fiesta continua, sin mayores problemas, y como todo en este mundo tiene que llegar a un fin, la fiesta termina sin mayor contratiempo, llevando todos los regalos, a la camioneta, familiar, mientras el salón, se empieza a
vaciar poco apoco quedando vacío.
