Matrimonio Por Contrato

Voy llegando con mis hijos a visitar al abuelo y nos encontramos con la sorpresa de ver a Alberto allá. Yo saludo como si nada mis hijos besaran y abrazaran a su abuela y le dan los dulces que a ella tanto les gustan. Su padre se queda viéndolos ellos lo ignoran, yo cortésmente los llamo y les digo muchachos vengan acá les presento al señor Alberto Contreras su padre, él les entendió la mano y ellos solo le dijeron mucho gusto, se dieron la vuelta y subieron al cuarto de su abuelo.

Alberto solo me dijo que no quieren nada conmigo, yo me quedé en silencio la señora Soledad solo le dijo y que pretendías que te abrazaran y besaran, que has hecho por ellos, él le respondió a su madre, no sabes como me duele no haber estado para ellos, son el orgullo de papá, me lo restregó en la cara. Yo pedí permiso para retirarme al cuarto del suegro, pero en eso bajo la enfermera y le dijo a Alberto que su padre quería hablar con él. Le pregunté por mis hijos y me dijo que en la conversación son ellos cuatro nada más, eso me preocupa, ya que sé cómo son mis hijos y sé que no sienten nada por su padre, pero ellos son mayores de edad y sabrán tomar sus decisiones.

Después de dos horas bajo Alberto, venía triste y lloroso, se despidió y salió de la casa, su madre lo siguió y le pregunto que había pasado y él solo dijo por estúpido perdí a mi mujer y mis hijos al igual que el amor de mi padre, abrazo a la señora Soledad y le dijo perdóname madre por haber sido tan estúpido. Ella lo acaricio y le dijo bastante que te dijera que esos niños crecerían y que te jugarían por haber Sido irresponsable, si tú no querías a Noelia, con divorciarte de ella tenías, pero tú deber era buscar y ayudar a tus hijos, porque ellos son tus hijos, pero nunca los tomaste en cuenta pensaste que se quedarían pequeños toda la vida. Y los hijos cuando crecen pasan factura, como las pasantes tú que no sé porque tu odio hacia nosotros que todo te lo dimos, lo único que nunca quisimos para ti fue tu relación con la vedette Rusa tu tú mismo viste como quedó, o esa era la mujer que tú querías.

Madre, la mujer que yo quería es y será Nohemí lo que pasa es que no quería que fuera a trabajar a la calle para que no viera lo que yo hacía a sus espaldas, ya que sabía que me iba a dejar y el día que me descubrió ni me moleste en pedirle perdón ella ya me lo había dicho que no habría un segundo perdón. Por eso ya descubierto sabía que no tenía oportunidad de nada y seguí mi vida. Pero ahora no sabes cómo lo lamento y ver lo bella que está de seguro hay muchos hombres detrás de ella y yo solo con dinero es que busco un poco de complacencia en los brazos de unas locas.

Hijo perdona que te lo diga, pero tú eres el único culpable de lo que te pasa. Tu solito creaste tu propio destino.