Bajo La Ley Del Silencio

Tras haber matado a Korn, Yeong volvió al hospital para estar con Tae, quién ya estaba esperándolo para volver a casa después de recibir el alta.

Tae aún estaba débil, pero se alegró al verlo. No le teme aunque ya se imaginó lo que había hecho.

T: ¿terminaste tus asuntos? Ya quiero ir a casa (sonrió)

Y: claro, te llevaré a casa (le devolvió la sonrisa)

Yeong lo cargo hasta el auto. En todo el camino de regreso Tae estaba en silencio, aunque quería saber que paso con Korn, tenía miedo de la respuesta.

Su mirada curiosa le hizo saber a Yeong que quería preguntar algo.

Y: no te preocupes no hize nada, gracias a ti lo liberé del sufrimiento rápidamente (tocando su mano)

Tae se tranquilizó, aunque sabía que lo mató estaba feliz. El había vivido en carne propia las torturas que daban en ese mundo, y aunque fuese su peor enemigo no le deseaba eso a nadie.

Ya en casa Yeong les digo a sus hombres que el personalmente se encargaría de Tae, y les pidió que solo esperarán en la entrada como de costumbre.

(Lo alimento, lo ayudo a vestirse, lo acompañaba en todo momento).

Ya en la noche cuando ambos iban a dormir, Yeong miro a Tae por un momento.

T: ¿qué te pasa?(tocando su rostro)

Y: Solo quería agradecerte, gracias por quedarte a mi lado aún sabiendo lo peligroso que puede ser (con voz baja)

T: Escucha, yo te amo. Haria lo que fuese necesario por ti

y: es la primera vez que alguien me ama con tanta intensidad, sabes. Estoy agradecido de tenerte en mi vida.

Tae solo sonrió y lo abrazo.

Era el momento más feliz de sus vidas, ambos se descubrieron y estaban dispuestos a dar todo el uno por el otro.

.........

Los días pasaron y ya era momento de que Tae regresará a la facultad, le quedaban unos pocos meses para graduarse con honores.

En la puerta de la facultad TAE se encuentra con su mejor amigo Minjun, quien había estado ausente varios meses por problemas personales.

M: Tae no sabes cuánto te extrañe hermano(lo abrazo)

T: ¿resolviste tus problemas? Yo también te Eche de menos amigo

M: Salgamos a comer después de clases, ahí que ponernos al día. Por ahí oí que alguien te perseguía (se burló)

T: digamos que sí, lo hablaremos después de clases.

(Sonido de timbre)

Luego de clases ambos fueron a comer a un restaurante.

M: ¿dime qué hiziste todo este tiempo ?

T: Mm no te lo dije? Ahora tengo novio

M: ¿Tú? ¿dime quién es? (sorprendido)

T: Solo puedo decirte que es una persona que me hace muy feliz, me apoya en todo y me cuida bastante (sonriendo)

Aunque a Minjun le pareció sospechoso que Tae no quisiera revelar nada de su pareja no dijo nada, después de todo a él le gustaba ver a su amigo feliz.

M: me alegro por ti Tae, espero que sea muy feliz.

t: Gracias amigo, espero tú también encuentres la felicidad en el nuevo camino que emprendas.

M: vamos come rápido y regresemos a clases.

T: Claro.

Cuando terminaron de comer ambos caminaron de regreso a la facultad, Tae estaba feliz porque toda su vida estaba mejorando.

Los meses pasaban, la graduación de Tae estaba cerca. Su relación con Yeong estaba cada mes más fuerte, vivían una rutina casi normal, llena de ternura, complicidad y deseo.

Yeong mantiene su vida criminal en las sombras, esforzándose por no ensuciar a Tae con ese mundo.

Tae, aunque no conoce los detalles de lo que hace exactamente Yeong, presiente que ahí algo que él no quiere decirle. Aunque prefiere no presionarlo.

Yeong cambio mucho, ya no tiene esa mirada fría de antes. Ante los ojos de Tae él ahora solo es un hombre normal, al cuál ama por sobre todas las cosas.

Y estaba dispuesto a amarlo hasta al final, así tuviera que ir contra el mundo entero para defender su amor.

Sin embargo. Ahí una verdad, un secreto del pasado que podría separarlos.