DULCEMENTE DOLOROSA VIDA

ROWAN: Ya te he dicho que ella me pertenece. Después de decir esto, se lo llevó a un extraño lugar donde tomaron su forma original y empezaron un combate. Después de pelear en forma humana, ROWAN dijo:

ROWAN: No importa cuánto luches, siempre te ganaré.

WEI: No lo creo, dice tirándole un golpe muy fuerte a ROWAN y casi dejándolo derrumbado. Hermano, ya no soy ese chico débil, dice desapareciendo.

ROWAN, al verse herido, quería regresar a casa, pero estaba tan herido que no le dio tiempo de llegar a casa y se quedó donde LEONORA.

LEONORA: Siente que la abraza e intenta voltearse.

ROWAN: No lo hagas.

LEONORA: ¿Por qué?

ROWAN: Solamente no lo hagas.

LEONORA: Espera, ¿por qué huele a sangre? Eres tú.

ROWAN: Sí, soy yo. Por eso te dije que no voltearas.

LEONORA voltea y se asusta al ver tanta sangre en él y procede a limpiar sus heridas y darle analgésicos para la fiebre.

LEONORA: ¿Te sientes bien?

ROWAN: Sí, mucho mejor.

LEONORA: Cierra los ojos y duerme un poco. Voy a lavar estas sábanas.

Después de que LEONORA lava las sábanas y se asegura de que ROWAN no tenga fiebre, se acuesta.

Como de costumbre, LEONORA se levanta para ir al colegio, pero hoy no se levantó por su cuenta, así que su mamá la llamó.

ADELAIDE: LEONORA, levántate, que vas a llegar tarde.

Pero LEONORA no se levantaba, así que se dirigió al cuarto, pero por suerte se levantó antes de que su mamá entrara.

LEONORA: Por poco y lo encuentra en mi cama. Mamá, ya voy.

LEONORA se ducha, se cambia y desayuna. Hoy no se iría con YAKIER; su mamá la llevaría.

ADELAIDE: LEONORA, apúrate, que llegarás tarde.

LEONORA: Voy, mamá.

LEONORA escribe una nota que deja en la mesa que dice: "No dejes que te descubran o estarás muerto. En el microondas está tu desayuno, y si te sientes mal, toma los analgésicos o llámame. Chao".

Más tarde, en la escuela, YAKIER le dice a LEONORA:

YAKIER: LEONORA, ¿qué te sucede?

LEONORA: Es que anoche ROWAN entró a mi casa herido y lo dejé solo.

YAKIER: Yo lo sabía, te gusta, y tu mamá no estaba en casa anoche.

LEONORA: No me gusta, solo me preocupó. Mi mamá sí estaba.

YAKIER: Entonces, ¿cómo entró?

LEONORA: Por la ventana.

YAKIER: ¿Como, si vives en un edificio?

LEONORA: Después te cuento,

YAKIER:Me dejarás en esta penuria.

YAKIER: Por fin tendremos un mes para descansar.

Después de entrenar, hicieron el examen. A LEONORA le pusieron nueve, y a YAKIER, cinco. Después de esto, se dirigieron a casa. LEONORA, al llegar a casa, la escuchó en silencio y se dirigió a la habitación, pero ROWAN no estaba.

LEONORA: ¿Qué sinvergüenza? Ni siquiera se despidió.

Cuando de la nada escucha su nombre en la cocina, ella asusta se acerca.

ROWAN: LEONORA, esposa.

LEONORA: Al ir a la cocina y ver que es ROWAN, dice: "Pensé que te habías ido, y esperas... por primera vez me llamas por mi nombre, pero luego lo mezclas con 'esposa'. Oye, espera, ¿por qué estás vestido así?"