La Bruja De Hielo Y El Hada De Las Sombras

Tras leer la carta de la emperatriz, Katerina no duda en reír y arrugar el papel, esa mujer debe de estar loca si cree que irá para ayudarla a fingir que el príncipe esta enfermo. Katerina busca a su padre para enseñarle la carta y al verla toda arrugada le dice que se sintió molesta por la petición de la emperatriz.

— ¿que te parece ir a la villa flower? Esta lejos y es una buena excusa para evitar a la emperatriz.— sugiere el marqués.

— no quisiera dejarte solo...pero creo que seria lo mejor, no quiero ser parte de las mentiras de la emperatriz.— Katerina se muestra preocupada.

— lo sé, por eso la mejor opción es la villa. Ve, yo le responderé a la emperatriz.—

El marqués manda preparar los carruajes para el viaje, mientras que escribe una carta de respuesta a la emperatriz. Al día siguiente, Katerina se despide de su padre y se marcha a la villa, mientras que el marqués envía la carta a la emperatriz. Katerina observa por la ventana, como se van alejando de la mansión y si piensa, él que se marche de la capital es bueno, tal vez de ese modo pueda hacer algo para ayudar a Arek.

— Jane, ¿un grifo es caro? Escuche que son buenos para viajes largos.—

— en la villa probablemente hayan, su padre también cría esos animales, para viajes urgentes.— responde Jane.

— que bien, realmente me gustaría aprender a viajar en uno, ¿es difícil?—

— es casi lo mismo que con el caballo, algunos son tercos y otros dóciles. Le puedo enseñar cuando estemos en la villa.—

— te lo agradecería, cuando los vi en el palacio, me parecieron muy hermosos y quisiera tener uno.—

Katerina se muestra emocionada, pero no quiere aprender a viajar en un grifo, lo necesita para poder ir a la frontera, les hará ver al imperio que Katerina Rosesky no es una cobarde y que de ese modo, nadie dirá nada cuando haga que su compromiso se rompa.

***

Por otro lado, al atardecer, la emperatriz recibe la carta del marquesado Rosesky, ella pensaba que Katerina acudiría a cuidar del príncipe, pero se lleva una decepción al leer la carta, donde el marqués expresa su molestia hacía el príncipe heredero, pues debido a que se rumorea que finge su enfermedad, su hija ha sido humillada ante la sociedad y que ha estado muy triste por las burlas que ha recibido, por lo que, el marqués optó por enviarla lejos de la capital, hasta que las cosas se calme, "pronto acudiré al palacio, para hablar sobre el compromiso, puesto que, no puedo permitir que mi hija, sea humillada más." Fue el final de la carta, la emperatriz la arruga y la tira al piso, estaba furiosa, ahora incluso el marqués parece molesto, todo se estaba arruinando.

— ¡no! Esto no puede ser así...seguramente él la envió lejos...maldito.— grita furiosa.

La emperatriz sabe que ahora, las cosas se pondrán peores, ya que pronto se sabrá que Katerina está fuera de la capital, lo que causará más rumores. Necesito pensar en algo que les pueda ayudar, pues si de verdad el marqués quiere romper el compromiso, el apoyó hacía el príncipe heredero caerá, el marqués es un hombre con mucha influencia y romper el compromiso es como decir que ya no esta de su lado.

— necesito que averigüen a donde fue lady Rosesky y que sea rápido.— ordena.

Si sabe a donde fue, hará que Rowan la busque, debe ganarse su afecto para evitar que el compromiso se rompa.

***

Tras un largo viaje, Katerina llego a la villa flower, era una mansión enorme, con grandes jardines y una granja más adelante, Jane le cuenta que en esa granja de crían a los grifos y se cosechan frutas que son enviadas a distintos reinos del imperio. Tan pronto se instala, lo primero que pide es que la lleven a la granja, los encargados del establo, le explican la forma de cuidar a los grifos. Jane le dice al encargado que Katerina quiere uno para poder pasear cuando pueda.

El encargado la guía para buscar uno dócil, que sea fácil de tratar, al llegar al corral, Katerina queda encantada al ver a uno grande y blanco, era tan hermoso y majestuoso.

— puede acercarse mi lady, es un animal muy dócil, el más noble de todos.—

Katerina se acerca y acaricia al precioso animal, quien gustoso acepta sus caricias.

— quiero este, en la mansión principal vi que había un invernadero, quiero que lo adecuen para él, así podré tenerlo cerca.—

— por supuesto mi lady, mandaré a que se acomodé todo de inmediato.—

Jane se queda con Katerina y le va mostrando la forma correcta de subir al grifo, pues debe tener cuidado de no bloquear las alas para que este no se sienta incómodo al volar, también las riendas que le colocan, debe sujetarlas con firmeza, pero sin tirar de más para no dañar al grifo.

Tras unas lecciones, Katerina finalmente logra volar con el animal, aunque lo hace a una altura baja, mientras Jane sostiene una correa al ir sobre otro grifo, y le va mostrando como guiarlo.

— le dije, es casi lo mismo que montar a caballo.— menciona Jane.

Katerina estaba emocionada de poder volar sobre esa hermosa criatura, ni en sus más locos sueños, imagino hacer algo así.

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Tras el paso de algunos días, en la frontera, Arek se enfrenta al inicio de la guerra, aunque Arek ha entrenado desde pequeño y ha estado en algunas batallas, nada se compara a una guerra contra otro país. Jack, que es un poco mayor que él, trata de apoyarlo lo mejor que puede, incluso él sabe lo difícil que debe de ser enfrentarse a una batalla de esa magnitud.

Entre ambos y los generales, planean rutas de ataque y estrategias para intentar hacer que el enemigo retroceda. La tropa que el marqués le dejo a su servicio, son una ayuda extra y les esta dando una ventaja, pero no pueden confiarse, aún cuando el enemigo parecía estarlo subestimando por su edad.

Los meses pasaban, la guerra cada día era más atroz, los soldados a veces perdían esperanzas, solo deseaban poder volver a sus hogares, ya que veían como sus compañeros perdían la vida, para Arek también estaba siendo difícil soportar, ver a sus compañeros muertos y ser él quien también mate al enemigo, estaba causando estragos en su cordura, si bien estuvo en batallas menores antes, nunca había tenido que matar a nadie y ahora, tenía que comenzar a endurecer su corazón y su carácter, si es que quería volver victorioso. Mientras se sentía desanimado, no pudo evitar pensar en la hermosa mirada azul de Katerina, quizás solo se conocieron poco tiempo, pero era inevitable no quedar encantado con esos hermosos ojos azules. Jack se sentó a su lado y le entregó una taza de sopa.

— debes de comer o perderás fuerzas. Se lo duró que es esto, para mi también es la primera vez que enfrento algo así y te aseguro que muchos de los que estamos aquí, es lo mismo, pero no podemos perder, no dejemos que la emperatriz gane.— menciona Jack mientras le da un par de palmadas en el hombre al chico.

Arek agradece por los ánimos, sabe que Jack tiene razón, no son los únicos sufriendo en ese lugar, muchos soldados también están pasando por un momento difícil al ser la primera vez que enfrentan una verdadera guerra.

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Como pueden ver, en este capítulo, profundice un poco los sentimientos de Arek, ya que esto lo llevará a formar su carácter y esta viendo, cuan cruel y difícil es la vida fuera del palacio. 🥹 pero el niño crecerá y será un buen hombre, digno de ser emperador, si o si. Jaja